Vistazo a las pensiones en el mundo

La publicaci¨®n esta pasada semana del reconocido informe bianual de la OCDE, Pensions at a Glance 2019, acerca de la situaci¨®n y perspectivas de las pensiones en los pa¨ªses m¨¢s desarrollados del mundo, merece una atenci¨®n singular. En primer lugar, al igual que la lucha contra el cambio clim¨¢tico, el dise?o de sistemas de pensiones sostenibles y suficientes para sociedades mucho m¨¢s longevas, como la espa?ola, se ha convertido en un reto urgente y de primer nivel que exigir¨¢ una prolongada carrera de fondo para los Gobiernos. En segundo lugar, y como tambi¨¦n sucede con los problemas ambientales, el punto de partida es cuanto menos delicado y, en todo caso, manifiestamente mejorable.

Sin un adecuado dise?o de incentivos y de las pol¨ªticas p¨²blicas, tambi¨¦n en ambos casos, se corre el riesgo (no s¨®lo) de trasladar a generaciones futuras el coste de la inacci¨®n, el riesgo de crear graves condiciones de inequidad intergeneracional. ?Cu¨¢l es el punto de partida en el ¨¢mbito de las pensiones? Seg¨²n los datos del informe, la tasa media de reemplazo (del ¨²ltimo salario) para un trabajador con salario medio y una carrera laboral completa inserto en un sistema obligatorio (p¨²blico, en general) alcanza el 59% en el conjunto de la OCDE. Eso s¨ª con una variabilidad extrema, desde un 30% en Lituania, M¨¦xico o Reino Unido hasta un 90% o m¨¢s en Austria, Italia, Luxemburgo, Portugal o Turqu¨ªa, situ¨¢ndose Espa?a cerca de este ¨²ltimo grupo con una tasa de reemplazo ligeramente superior al 83%. En cualquier caso, si se proyectan estas tasas para las pr¨®ximas d¨¦cadas, las mismas se reducen significativamente en pr¨¢cticamente todos los pa¨ªses. Y esto, a pesar de las crecientes medidas adoptadas en buena parte de los pa¨ªses con la pretensi¨®n de garantizar la sostenibilidad del sistema p¨²blico de pensiones (primer pilar). Entre ellas, el aumento de la edad de retiro desde los 63,8 a?os actuales hasta los 65,9 en media en el horizonte de 2060, que en cualquier caso s¨®lo ser¨¢ suficiente para cubrir la mitad del aumento de la esperanza de vida en este mismo periodo.

Aunque no ¨²nicamente, es claro que la pura din¨¢mica demogr¨¢fica (y la longevidad dentro de ella) juega un papel central en esta ecuaci¨®n que amenaza con presionar en exceso las cuentas p¨²blicas. De hecho, obliga tanto al redise?o de los esquemas p¨²blicos de pensiones, que en muchos casos han quedado arcaicos, como al imprescindible impulso de pilares de ahorro previsional adicionales. Los planes de previsi¨®n complementaria de empleo de promoci¨®n empresarial (segundo pilar), han de comenzar a verse como una pieza m¨¢s de una (nueva) pol¨ªtica p¨²blica integral de pensiones. Los modelos sueco o brit¨¢nico son casos de ¨¦xito recientes en los que convendr¨ªa buscar inspiraci¨®n.

Daniel Manzano y Mar¨ªa Romero son profesores de Afi Escuela de Finanzas.