La gran banca de Estados Unidos hunde el beneficio de marzo y anticipa una fuerte recesi¨®n

El 20 de marzo, cuando el presidente Trump todav¨ªa se negaba a parar la econom¨ªa de Estados Unidos, Michelle Meyer, el economista de Bank of America, advirti¨® de que Estados Unidos ya hab¨ªa entrado en recesi¨®n por los efectos de la pandemia. ¡°Estamos declarando oficialmente que la econom¨ªa ha ca¨ªdo en una recesi¨®n, uni¨¦ndose al resto del mundo, y se trata de una ca¨ªda profunda en la que se perder¨¢n empleos, se destruir¨¢ la riqueza y caer¨¢ la confianza¡±, escribi¨® en una nota a los inversores publicada por la cadena de televisi¨®n CNBC.

Hasta ahora, ya han desfilado ante los analistas los m¨¢s grandes: Citi, Bank of America, Wells Fargo, JPMorgan, Goldman Sachs y Morgan Stanley.

Los m¨¢ximos directivos de los grandes bancos han demostrado que coinciden con el criterio de Meyer y han hundido los resultados de sus entidades al realizar un total de 23.418 millones de d¨®lares (21.430 millones de euros) en provisiones para una morosidad que todav¨ªa no existe, pero que temen que sea gigante. ¡°Los bancos estadounidenses recelan de la gran morosidad que pueda llegar de las tarjetas con las que se financia el consumo, por el incremento del paro despu¨¦s de que la cifra haya llegado a los 17 millones de personas desempleadas. Tambi¨¦n les preocupan los impagados de las pymes, cuya estructura financiera y capacidad de aguante de este par¨®n econ¨®mico es peque?a¡±, apunta ??igo Vega, experto bancario de la firma Nau-Securities. Los mercados han reaccionado con ca¨ªdas de todos los valores bancarios.

El gigante Citi obtuvo un resultado de 2.520 millones de d¨®lares (2.305 millones de euros) en el primer trimestre, un 46% menos que en marzo de 2019, pese a que elev¨® los ingresos un 12%. La raz¨®n es que destin¨® 4.920 millones de d¨®lares (4.501 millones de euros) a provisiones ante el temor al auge de la morosidad. En M¨¦xico, Citi, que est¨¢ entre los tres m¨¢s grandes, un pa¨ªs en el que habitualmente gana unos 200 millones al trimestre, ha presentado p¨¦rdidas al duplicar las dotaciones hasta los 500 millones de d¨®lares (457 millones de euros).

El segundo m¨¢s grande, Bank of America, obtuvo un resultado de 4.000 millones, un 45% de ca¨ªda frente al primer trimestre del a?o anterior, tras provisionar unos 5.000 millones de d¨®lares (4.574 millones de euros). Los ingresos descendieron un 1%.

Wells Fargo, un gigante comercial de Estados Unidos, fue el m¨¢s tajante al provocar un descenso del beneficio del 89%, tras presentar una cuenta con un resultado de 653 millones (597 millones de euros), tras provisionar 3.100 millones (2.836 millones de euros).

En cuarto lugar est¨¢ JPMorgan, con 2.621 millones de ganancias hasta marzo (2.397 millones de euros), lo que supone un descenso del 69%. El gigante de Estados Unidos ha dotado 8.290 millones (7.584 millones de euros), la mayor cifra desde hace 10 a?os, es decir, desde la anterior crisis financiera.

En quinto lugar est¨¢ otro gigante de Wall Street, Goldman Sachs, cuyos resultados descendieron un 46% tras obtener 1.210 millones de d¨®lares (1.107 millones de euros), como resultado de unas provisiones de 937 (857 millones de euros) hasta marzo.

Por ¨²ltimo este jueves Morgan Stanley ofreci¨® sus datos: registr¨® un beneficio neto atribuido de 1.590 millones de d¨®lares (1.462 millones de euros) en el primer trimestre de 2020, lo que equivale a una ca¨ªda del 32% en comparaci¨®n con el mismo periodo del a?o anterior. Contabiliz¨® un impacto negativo de 1.011 millones de d¨®lares (929 millones de euros) que refleja las p¨¦rdidas en los pr¨¦stamos corporativos puestos a la venta por el alza de las primas de riesgo, as¨ª como un incremento en las provisiones para p¨¦rdidas de cr¨¦ditos para inversi¨®n.

M¨¢s provisiones para recuperarse antes

En enero de este a?o, en Estados Unidos entr¨® en vigor la nueva contabilidad que obligar a realizar provisi¨®n seg¨²n los modelos hist¨®ricos de morosidad de cada banco, sobre el que se aplica la p¨¦rdida esperada de cada cr¨¦dito. Sin embargo, tras la llegada de la pandemia, las autoridades bancarias han dejado libertad para aplicar o no este criterio. A la vista de estos resultados, est¨¢ claro que los grandes bancos han optado por aplicar los criterios m¨¢s severos en provisiones. ¡°Cuanto antes empieces a provisionar por la morosidad, antes terminas y la banca de Estados Unidos ha optado por la v¨ªa m¨¢s dr¨¢stica pero con la que puede recuperarse m¨¢s r¨¢pidamente cuando termine la crisis¡±, apunta Vega.

Ahora la cuesti¨®n clave es qu¨¦ har¨¢ la banca brit¨¢nica y la europea. En ambas jurisdicciones los supervisores han levantado la exigencia de provisionar en virtud de la p¨¦rdida esperada, conocida como IFRS 9, con una visi¨®n de corto plazo por la gran incertidumbre econ¨®mica que domina el panorama. Es una manera de no hundir las cuentas de resultados de los bancos, lo que les llevar¨ªa a cerrar el grifo del cr¨¦dito. Con esta norma se concede tiempo a los bancos por si se logra una recuperaci¨®n r¨¢pida, en forma de V, y se ahorran unas fuertes dotaciones como las que est¨¢n haciendo los estadounidenses. Habr¨¢ que ver cu¨¢l es la reacci¨®n de los inversores a la decisi¨®n de los banqueros sobre las provisiones.

Precisamente este mi¨¦rcoles se public¨® un documento del BIS (Banco de Pagos Internacionales), cuya misi¨®n es servir a los bancos centrales en su b¨²squeda de la estabilidad monetaria y financiera, que aborda esta cuesti¨®n. El informe, Reflexiones sobre las respuestas regulatorias a la pandemia de la covid-19, est¨¢ firmado por Claudio Borio, Jefe del Departamento Monetario y Econ¨®mico del BIS, y Fernando Restoy, Presidente Instituto de Estabilidad Financiera.

En este documento se dice que ¡°la flexibilidad en los criterios de clasificaci¨®n de pr¨¦stamos con fines prudenciales y contables debe complementarse con una divulgaci¨®n suficiente sobre los criterios que los bancos utilizan para evaluar la solvencia crediticia¡±. Es decir, se considera que puede ser conveniente ser flexible con las normas sobre provisiones, siempre que se adviertan los sistemas que se siguen al mercado.

Una guerra que no se puede ganar sin los bancos

Tambi¨¦n se apunta que ¡°las medidas logran un equilibrio diferente entre el impacto en la prociclicidad y un reconocimiento transparente de las valoraciones de los activos bancarios. Las suspensiones temporales de la nueva norma ser¨ªan m¨¢s efectivas para moderar el efecto potencialmente perjudicial de las disposiciones m¨¢s altas, seguidas de arreglos de transici¨®n y orientaci¨®n pragm¨¢tica¡±, indica el informe.

Y concluye que la pandemia es ¡°una guerra que no se puede ganar si, en el proceso, las acciones pol¨ªticas comprometen el papel vital de intermediario que desempe?an las instituciones financieras. Hoy es m¨¢s importante que nunca no poner en riesgo la estabilidad y la transparencia del sistema financiero. Esto establece un l¨ªmite sobre cu¨¢n audaces y extraordinarios pueden ser los pasos necesarios¡±.

Ahora todos los reguladores, supervisores y banqueros desean que se cumpla otra afirmaci¨®n de la analista de Bank of America: ¡°Aunque la recesi¨®n es severa, creemos que ser¨¢ bastante corta¡±, agreg¨® Meyer.

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