Euskadi, nueve a?os de una econom¨ªa sin miedo

¡°Solo cuando ya no tenemos miedo empezamos a crear¡±. La frase es de un afamado pintor que se at¨® al palo mayor de un barco de vapor para captar mejor la luz bajo los truenos y los rayos de una tormenta. ¡°Lo dijo William Turner¡±, recuerda el empresario guipuzcoano Miguel Lazpiur. Le apasiona la pintura del artista brit¨¢nico. Tormenta de nieve sobre el mar, Naufragio, Barcos holandeses en una galerna o Calais Pier reflejan la crudeza de la batalla y la dificultad de las traves¨ªas cuando el viento y las olas se enfurecen. Sus colores, vividos desde dentro, transmiten a la perfecci¨®n el dramatismo de esas situaciones.

Lazpiur decidi¨® amarrarse al m¨¢stil de la patronal vasca, Confebask, en 2005, cuando todav¨ªa resonaban los ecos del asesinato, en agosto de 2000, del que fuera presidente de Adegi, Empresarios Guipuzcoanos, Jos¨¦ Mar¨ªa Korta. La econom¨ªa vasca arrastraba como pod¨ªa el lastre de ETA, cuya actividad criminal extend¨ªa el miedo y la desconfianza entre visitantes e inversores, deslocalizaba el talento, complicaba el emprendimiento y frenaba la internacionalizaci¨®n.

Yo creo que a ETA la derrotamos los empresarios que nos quedamos aqu¨ª. Ellos pensaban paralizar el pa¨ªs y no lo consiguieron

Miguel Lazpiur, expresidente de Confebask

As¨ª hasta el 20 de octubre de 2011. 19 horas. ¡°ETA ha decidido el cese definitivo de su actividad armada¡±. Tres encapuchados pon¨ªan fin a uno de los periodos m¨¢s negros de la hitoria de Espa?a con 10 palabras. Atr¨¢s quedaban 43 a?os y 829 v¨ªctimas. Se van a cumplir ya nueve a?os sin que la econom¨ªa vasca est¨¦ condicionada por la violencia y la actividad lo agradece. La banda terrorista seg¨® la vida de m¨¢s de 40 empresarios, secuestr¨® a 55 m¨¢s y chantaje¨® a otros 10.000 con el mal llamado impuesto revolucionario. ¡°Hab¨ªa muchos ejemplos a seguir, si quer¨ªamos sacar este pa¨ªs adelante¡±. Lazpiur recuerda que se motiv¨® con el recuerdo de todos ellos antes de dar el paso de dirigir la patronal. ¡°ETA le hizo mucho da?o a este pa¨ªs en vidas, pero tambi¨¦n a la econom¨ªa. Hubo muchas inversiones que no vinieron, y algunos que se marcharon, aunque no tantos. La mayor¨ªa aguantamos. Yo creo que a ETA la derrotamos los empresarios que nos quedamos aqu¨ª. Ellos pensaban paralizar el pa¨ªs y no lo consiguieron¡±.

El 40% de los atentados y el 63% de la kale borroka tuvieron objetivos empresariales, describe el estudio La bolsa y la vida, coordinado por Josu Ugarte y publicado en 2018. Concluye que el coste directo del terrorismo oscil¨® entre 20.000 y 25.000 millones de euros, de los que en torno a 6.000 habr¨ªa que imputar a la paralizaci¨®n de la central nuclear de Lemoniz, Bizkaia. Los profesores Alberto Abadie y Javier Gardeazabal estimaron, con muchas salvedades y conscientes de la dificultad del c¨¢lculo, que el impacto de la violencia y chantaje terrorista ser¨ªa equivalente, en el Pa¨ªs Vasco y Navarra, al 10% del PIB durante los a?os m¨¢s dif¨ªciles. ¡°Nuestro pa¨ªs siempre ha salido adelante con la cultura del trabajo. Solemos decir que nuestros valores son la ilusi¨®n, el compromiso y amor por el trabajo bien hecho y este pa¨ªs tiene que tener estas tres cosas¡±, asegura Lazpiur en uno de los despachos de su empresa, en el coraz¨®n del Goierri. Este empresario es natural de Bergara, Gipuzkoa, ¡°la localidad donde se descubri¨® el wolframio¡± dice orgulloso.

?C¨®mo ha crecido la econom¨ªa vasca a partir de ese momento? Varios economistas consultados y el propio Lazpiur coinciden en que el final de la banda no gener¨® una reacci¨®n causa efecto en t¨¦rminos de PIB porque Euskadi, como el resto del mundo estaba bajo el shock de la crisis financiera. Sin embargo, s¨ª hubo sectores que, desde el mismo 2011 ¡ªaunque la banda no se disolvi¨® hasta 2018¡ª empezaron a dar s¨ªntomas de liberaci¨®n. ¡°En el turismo se ve muy claramente que el final de ETA marca un antes y un despu¨¦s. La inversi¨®n extranjera es otro de los par¨¢metros que se libera, aunque luego fluye o se retrae en funci¨®n de otras variables. Y claramente hay m¨¢s confianza de los inversores y de los empresarios a la hora de reinvertir¡±, explica el viceconsejero de Econom¨ªa, Hacienda y Presupuestos del Gobierno vasco, Alberto Alberdi.

Sector servicios

El turismo, tambi¨¦n el de negocios, empez¨® a crecer en porcentajes de hasta dos d¨ªgitos y no ha parado hasta la crisis de la covid-19. Ahora supera el 6% del PIB. La sociedad vasca se ha escorado al sector terciario, debido en parte al flujo de visitantes, desarrollando un poderosa industria de servicios que ha pasado de aportar el 60% al PIB vasco en 2009 al 70% en 2018. Y la inversi¨®n extranjera, que tiene mucho que ver con la confianza en el pa¨ªs de destino, ha pasado, con altibajos hasta 2015 debido a aquella crisis, de los 528,4 millones de inversi¨®n en 2011 a los 2.691 en 2017, seg¨²n el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

El sector gastron¨®mico de los cocineros con varias estrellas Michel¨ªn, ha convertido a la Euskadi sin ETA en un polo mundial de atracci¨®n, y la transformaci¨®n urban¨ªstica de capitales como Bilbao o el tir¨®n de San Sebasti¨¢n han permitido el desarrollo de una hosteler¨ªa y una restauraci¨®n sin precedentes. ¡°Pero el ADN de la econom¨ªa vasca es la industria¡±, recuerda Alberdi. Euskadi mantiene una pujanza industrial que supone el 24,2% del PIB vasco, aunque ha llegado a ese porcentaje desde unos a?os 80 en los que representaba el 50%. La herencia y el impulso de los grandes apellidos de la industria vasca como los Olarra, Sendagorta, Aristrain e Ybarra, entre otros, sigue en el imaginario de una peque?a y mediana empresa que avanza hacia la industria 4.0 con un apoyo decidido del sector p¨²blico.

Los tres ¨²ltimos a?os que ha volado sin lastres, ni de crisis ni de violencia, ha sido capaz de crear en torno a 14.000 empleos al a?o y dejar el paro por debajo del 10% con crecimientos del PIB sobre el 3%. Y adem¨¢s generando recursos para reducir las desigualdades sociales. Unas constantes vitales que la crisis de la covid-19 ha estado a punto de paralizar.

Antes el debate de ETA lo tapaba todo, ahora se est¨¢n produciendo consensos que durante cinco d¨¦cadas han sido imposibles y que van a ser mucho m¨¢s necesarios para salir de la actual crisis

Zigor Urkiaga, analista financiero

La foto inmediatamente anterior a marzo, al estallido de la pandemia, dibujaba un PIB per c¨¢pita en Euskadi de 34.079 euros, el 119% de la UE28, la productividad por trabajador superaba el 123% de esa media europea y el peso de sus exportaciones representaba el 30% del PIB.

El analista financiero Zigor Urkiaga prefiere medir las mejoras de la econom¨ªa vasca en t¨¦rminos diferentes al PIB. ¡°Tenemos un vicio occidental que es medir la econom¨ªa por el PIB, y esa es una forma muy as¨¦ptica de cuantificarla. El PIB te puede ir muy bien pero el pa¨ªs ser insufrible para vivir¡±, explica. Urkiaga cree que habr¨ªa que introducir factores como la desigualdad social, la disparidad de rentas, los mecanismos de protecci¨®n social. Y en todo esto tampoco sale mal parada la comunidad vasca.

Para cuando el Gobierno central ha legislado sobre el Ingreso M¨ªnimo Vital (IMV), Euskadi llevaba ya 30 a?os con una renta para los ciudadanos m¨¢s desfavorecidos y con ingresos por debajo del Salario M¨ªnimo Interprofesional. En 2008, la Renta de Garant¨ªa de Ingresos que supera en cuant¨ªa al IMV, se convirti¨® en un derecho subjetivo. Adem¨¢s, la Ley vasca de Vivienda de 2015 obliga al Ejecutivo auton¨®mico a garantizar el derecho constitucional a una vivienda digna. La primera semana de julio comunic¨® a 5.039 familias que cumplen los requisitos y que pueden disfrutar de ese derecho subjetivo.

Urkiaga argumenta que el final de la violencia ha generado un estado de ¨¢nimo que ha mejorado la capacidad de la sociedad para poner en el foco en los problemas reales. ¡°Antes el debate de ETA lo tapaba todo, ahora se est¨¢n produciendo consensos que durante cinco d¨¦cadas han sido imposibles y que van a ser mucho m¨¢s necesarios para salir de la actual crisis¡±, explica.

ENTREVISTA a Isabel MUELA

La patronal Confebask y las territoriales provinciales pasaron p¨¢gina a casi cinco d¨¦cadas de terrorismo en octubre de 2017, en un acto de homenaje a las v¨ªctimas. Invitaron a todos los partidos menos a los representantes de EH Bildu. Tres meses despu¨¦s, el 29 de enero de 2018, el presidente de los empresarios vascos, Roberto Larra?aga, y el secretario general de EH Bildu, Arnaldo Otegi se estrecharon la mano en una reuni¨®n en torno a una mesa y un caf¨¦ para hablar de econom¨ªa.

Cambio de imagen

Apenas cinco a?os despu¨¦s del final de ETA a Euskadi le comenzaron a llegar reconocimientos internacionales. Por cuarto a?o consecutivo el Pa¨ªs Vasco ha sido premiado este 2020 por el Financial Times como destino de inversiones. El diario econ¨®mico destaca la labor del ¨¢rea Invest in the Basque Country del grupo p¨²blico SPRI, y ha colocado a Bilbao en el top 10 de las ciudades de tama?o medio con mejor estrategia de atracci¨®n de inversiones. Desde el a?o 2014 que comenz¨® la estrategia Invest, han entrado 613,95 millones por esa v¨ªa y se han puesto en marcha 136 proyectos que han creado 2.616 nuevos empleos, adem¨¢s de mantener otros 3.417.

Fruto de esa imagen el Gobierno vasco ha realizado esta legislatura tres emisiones de bonos sostenibles en los que la demanda ha quintuplicado la oferta. El consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, y su equipo visitaron en sus sedes a los principales bancos de inversi¨®n y fondos soberanos de Francia, Noruega, Alemania y Holanda.

¡°El Guggenheim vino cuando ETA asesinaba¡±, explica Urkiaga. ¡°Lo que quiero decir es que la inversi¨®n extranjera no solo no ven¨ªa porque estaba ETA, que tambi¨¦n, sino por una cuesti¨®n social de elevados ¨ªndices de paro y de que el Pa¨ªs Vasco ten¨ªa una sociedad deteriorada y estaba sumida en una crisis brutal en la d¨¦cada de los 80 y los 90¡±. Urkiaga recuerda que hace m¨¢s de 40 a?os naci¨® la Sociedad para la Promoci¨®n y la Reconversi¨®n Industrial. ¡°Ahora se llama Agencia P¨²blica de Desarrollo Empresarial, pero no le han quitado las siglas para que recordemos de d¨®nde venimos¡±, describe, dejando caer que es muy dif¨ªcil analizar el impacto de ETA en la econom¨ªa vasca separ¨¢ndolo de los diferentes ciclos econ¨®micos mundiales.

Quisiera pensar que hemos superado tambi¨¦n el impacto del pensamiento totalitario de estos sectores que todav¨ªa no han renunciado del todo a hacer cuentas con su pasado

Alberto Alberdi, viceconsejero de Econom¨ªa y Hacienda del Gobierno vasco

Atr¨¢s quedan los esfuerzos de la ingenier¨ªa tributaria vasca para atraer inversores cuando los peri¨®dicos se llenaban de tragedias. Las denominadas vacaciones fiscales tuvieron como objetivo incentivar a quienes se atrev¨ªan a venir a Euskadi, y a fidelizar a los que se compromet¨ªan con reinvertir su dinero en el pa¨ªs. Se trataba de ayudas vinculadas a la exenci¨®n del impuesto de sociedades, como la reducci¨®n de la base imponible, o el cr¨¦dito fiscal del 45% del importe de ciertas inversiones, entre otras. Se pusieron en marcha de 1993 a 2000. La Comisi¨®n Europea las equipar¨® a ayudas de Estado y las declar¨® ilegales en 2001.

A?os de plomo

Eran unos momentos en los que todo se ve¨ªa abajo en un ciclo econ¨®mico muy desfavorable y con ETA empujando hacia el fondo. En los a?os 70 y 80 el peso de la industria en el PIB vasco era del 50% y ahora es la mitad. Una reducci¨®n que se ha ido cocinando en crisis y reconversiones consecutivas de un sector p¨²blico vinculado al acero y a la construcci¨®n naval, pero tambi¨¦n a la industria manufacturera. Con niveles de desempleo superiores al 25% en los a?os 80 y 90 y un clima social enrarecido, la banda aprovech¨® algunas luchas populares para provocar el terror. En los ochenta, paraliz¨® a base de asesinatos y atentados, la construcci¨®n de la central nuclear de Lemoniz. En los 90 intent¨® hacer lo mismo con la autov¨ªa de Leizar¨¢n, que une Navarra y Gipuzkoa, y con las obras del tren de alta velocidad.

Ahora la econom¨ªa vasca no depende de gigantes, como entonces, aunque hay tres empresas muy ancladas, de grandes dimensiones, que suponen un punto de apoyo en materia de empleo y de recaudaci¨®n tributaria. Iberdrola emplea a 2.000 personas en Euskadi de las 30.000 a las que da trabajo en todo el mundo, Petronor (Repsol) a unas 900 personas en Muskiz, Bizkaia, y Eroski emplea 9.730 trabajadores en el Pa¨ªs Vasco de los que 6.765 son socios. Solo Petronor aport¨® a la hacienda de Bizkaia 810 millones de euros en impuestos en 2018 e Iberdrola m¨¢s de 700. ¡°Adem¨¢s de las fortalezas en energ¨ªas renovables, con Iberdrola, y en la b¨²squeda de combustibles sint¨¦ticos de Repsol Petronor, ahora somos gigantes en fabricaci¨®n avanzada y en m¨¢quina herramienta¡±, explica Alberdi, quien cree que la transformaci¨®n hacia empresas m¨¢s peque?as, ¨¢giles y muy internacionalizadas est¨¢ yendo por buen camino.

Otra de las fortalezas de la econom¨ªa, y un factor de estabilidad social, es el cooperativismo. Solo la Corporaci¨®n Mondragon aporta el 10% de todo el empleo de Euskadi, con casi 82.000 trabajadores en el mundo. Supone el 12% del PIB vasco y el 15% de todas las inversiones industriales. Las exportaciones tambi¨¦n se han desbocado. En 2018 alcanzaron los 25.487,5 millones, 1.630,8 millones m¨¢s que en 2017, el 6,8% de incremento. Fue el mejor dato hasta la fecha en el hist¨®rico del Eustat. En relaci¨®n con el PIB, las exportaciones supusieron el 33,3%, porcentaje solo superado por la tasa de 2014 (33,9%), tres a?os despu¨¦s del fin de la violencia. ¡°Ahora que ya nos hemos convertido en un pa¨ªs atractivo para las inversiones exteriores tenemos que dar el siguiente paso y empezar la reconstrucci¨®n de esta nueva crisis con inversiones en el capital de nuestras empresas¡±, propone Alexander Zapirain, abogado y economista de la London School of Economics.

Con el recuerdo reciente de la p¨¦rdida de la mayor¨ªa de Euskaltel, y con otros procesos similares en el espejo retrovisor como con el BBVA, Guascor, ITP o Gamesa, Zapirain cree que es el momento de invertir en el capital de aquellas firmas que cumplan est¨¢ndares, ratios y objetivos estrat¨¦gicos de pa¨ªs como la mejor v¨ªa para mantener los centros de decisi¨®n y evitar el excesivo endeudamiento del tejido productivo. ¡°Necesitamos respiradores financieros¡±, explica el letrado fiscalista, ¡°que faciliten una industria mejor posicionada y de mayor valor a?adido¡±.

Las diputaciones forales tambi¨¦n est¨¢n poniendo la fiscalidad al servicio de los capitales y del talento. Bizkaia aprob¨® en septiembre de 2019 una norma tributaria destinada a captar talento. La norma fija que la mitad de sus ingresos, a los que da tratamiento de rentas irregulares, tributar¨¢ al 49%. La otra mitad queda exenta.

La de Gipuzkoa ha regulado los carried interest, para alentar a los business angels, o a las gestoras de fondos de capital riesgo, a asentarse en la provincia. En una norma tributaria de 20 de febrero de 2019, Gipuzkoa integra las plusval¨ªas que se reparte la propia gestora ¡ªtras haber devuelto aportaciones y ganancias a los inversores del fondo¡ª como rendimiento de capital mobiliario y no como rendimiento del trabajo. La diferencia de tributaci¨®n puede llegar a los 25 puntos, a favor de los gestores.

El viceconsejero Alberto Alberdi est¨¢ satisfecho porque Euskadi ha superado la lacra de la violencia. ¡°Quisiera pensar que hemos superado tambi¨¦n el impacto del pensamiento totalitario de estos sectores que todav¨ªa no han renunciado del todo a hacer cuentas con su pasado¡±, duda. ¡°No s¨¦ si en ese ¨¢mbito de los valores estamos tan bien equipados o estamos haciendo los procesos que hacen falta para triunfar en el futuro¡±. Todo un aviso a navegantes.