Gobierno y sindicatos acuerdan incluir el teletrabajo para los trabajadores de las administraciones

A pesar de las primeras reticencias, Gobierno y sindicatos han llegado a un acuerdo para regular el teletrabajo para el conjunto de los trabajadores p¨²blicos de las distintas Administraciones, que podr¨¢n acogerse a ¨¦l una vez sea formalizada su inclusi¨®n en el Estatuto B¨¢sico del Empleo P¨²blico el pr¨®ximo lunes, 21 de septiembre, tras el debate en la Mesa General de las Administraciones Generales. En este foro estar¨¢n representadas comunidades aut¨®nomas y Ayuntamientos, adem¨¢s de la Administraci¨®n General del Estado y los sindicatos.

Por primera vez, m¨¢s de tres millones de empleados p¨²blicos (tanto funcionarios como personal laboral) podr¨¢n acceder al trabajo no presencial de manera voluntaria y reversible, una de las principales reivindicaciones de los sindicatos. Del mismo modo, el personal que opte por el teletrabajo ¡°tendr¨¢ garantizados los mismos derechos y obligaciones que aquellos que acudan a su puesto de manera presencial¡±, seg¨²n asegura CSIF.

Ante esta nueva posibilidad, ser¨¢n las administraciones las que estimen el porcentaje del servicio que podr¨¢ realizarse mediante el teletrabajo, para de este modo combinar la presencialidad y el trabajo a distancia y garantizar la atenci¨®n presencial a la ciudadan¨ªa. Del mismo modo, ser¨¢ la Administraci¨®n quien provea al personal que trabaje en remoto de los medios tecnol¨®gicos necesarios para llevar a cabo su actividad, y se ocupar¨¢ de su mantenimiento.

Conciliaci¨®n vida laboral y personal

¡°CSIF valora de manera positiva este acuerdo y espera poder abrir cuanto antes la negociaci¨®n en otros ¨¢mbitos, como las retribuciones o la oferta de empleo p¨²blico, ante las dificultades y la presi¨®n de las plantillas en ¨¢reas como la sanidad, la educaci¨®n, los servicios de empleo o la seguridad social, como consecuencia de la pandemia por el Covid-19¡±, ha se?alado el sindicato en un comunicado. ¡°Valoramos tambi¨¦n que el teletrabajo es una medida que favorece la conciliaci¨®n de la vida laboral y personal, flexibiliza horarios de una manera m¨¢s racional, previene riesgos laborales y protege la salud. Sin duda, disminuye el impacto ambiental, reduce costes en infraestructuras y mejora la integraci¨®n de personas con discapacidad o en rehabilitaci¨®n tras enfermedad¡±, a?ade.

Para CC OO, sin embargo, ¡°quedan aspectos que clarificar y trabajar, como la regulaci¨®n negociada de las circunstancias excepcionales¡±. Este sindicato considera ¡°imprescindible que se ponga encima de la mesa un calendario y se inicie inmediatamente la negociaci¨®n sobre los Presupuestos Generales del Estado y de un III Acuerdo para la mejora del empleo y las condiciones de trabajo de las empleadas y empleados p¨²blicos que permita avanzar en temas como el empleo, la estabilidad de las plantillas, los derechos laborales y la recuperaci¨®n del poder adquisitivo perdido en estos a?os¡±.

Flecos por cerrar en el sector privado

El acuerdo sobre el teletrabajo alcanzado para el sector p¨²blico desbloquea en parte las negociaciones, todav¨ªa en marcha, que se est¨¢n llevando a cabo entre agentes sociales y Gobierno para regular este formato laboral en el sector privado. Aunque se trate de dos procesos independientes ¨Den el que participan distintos interlocutores¨D, los sindicatos hab¨ªan denunciado que el personal laboral de la Administraci¨®n P¨²blica no estuviese incluido en la norma general del ¨¢mbito privado. Alegaban que estos trabajadores ¨Dque est¨¢n sometidos a las normas de la funci¨®n p¨²blica, pero tambi¨¦n a las leyes laborales¨D se quedar¨ªan descolgados de cualquier regulaci¨®n si no se llegaba a un acuerdo con Funci¨®n P¨²blica.

Ahora este escollo parece estar superado, pero quedan otros flecos por cerrar. Fuentes sindicales aseguran que todav¨ªa hay fricciones sobre el porcentaje de horas teletrabajadas a partir del cual se aplicar¨ªa la nueva normativa. Esta cifra se fij¨® en un principio en el 20% de la jornada laboral ¨Dun d¨ªa a la semana¨D, una cantidad considerada demasiado baja para la patronal. Tras las reuniones celebradas entre el Gobierno y los agentes sociales a la vuelta del verano, este porcentaje fue elevado al 30%. Fuentes sindicales trasladan que con esta soluci¨®n muchos trabajadores se quedar¨ªan fuera del alcance de la ley; otras fuentes sindicales a?aden que este punto no representar¨ªa una l¨ªnea roja si el texto en su conjunto es equilibrado.

Porque hay m¨¢s cuestiones que siguen negoci¨¢ndose. La patronal presiona para que los aspectos formales de la regulaci¨®n no se apliquen cuando el teletrabajo es fruto de circunstancias excepcionales, como la actual pandemia. Una postura que no ven de buenos ojos los sindicatos, que tambi¨¦n exigen que los trabajadores participen en el dise?o de los protocolos de protecci¨®n de datos y seguridad que implemente la empresa.

La delicada situaci¨®n sanitaria por la que atraviesa el pa¨ªs, unida a las medidas de confinamiento que se han llevado a cabo en los ¨²ltimos meses, han derivado en que cada vez sean m¨¢s las personas que se acojan a la modalidad del teletrabajo. Seg¨²n un estudio reciente de Ramstad, son ya 3.015.000 los espa?oles que desempe?an su labor a distancia.