Laurence Boone: ¡°Hemos aprendido las lecciones de la crisis financiera¡±

Como en tiempos de pandemia todo es a distancia, la entrevista con la economista jefa de la OCDE, Laurence Boone (Boulogne-Billancourt, Francia, 51 a?os), hecha por tel¨¦fono, no permite ver si su cara refleja alivio o si toca madera cuando habla de una recuperaci¨®n gradual.

Aunque la econom¨ªa global sigue en pleno t¨²nel, se empieza a vislumbrar la luz de salida y su tono no deja dudas del optimismo cauto que destilan tambi¨¦n las ¨²ltimas previsiones econ¨®micas del organismo con sede en Par¨ªs: con la promesa de una pronta llegada de las vacunas, la mejor gesti¨®n de la segunda oleada pand¨¦mica y las herramientas pol¨ªticas y fiscales puestas en marcha han impedido una ca¨ªda total a los infiernos. Eso s¨ª, nada de esto habr¨¢ servido si se comete el mismo error que durante la Gran Recesi¨®n de hace una d¨¦cada y se retiran las ayudas demasiado r¨¢pido, advierte.

¡°Hemos aprendido las lecciones de la crisis financiera y los responsables pol¨ªticos han sido mejores a la hora de implementar pol¨ªticas que protejan a la gente y la capacidad colectiva de la econom¨ªa¡±, sostiene Boone, para quien en la crisis de 2008-2012, ¡°la pol¨ªtica fiscal en Estados Unidos y Europa fue ajustada [a la baja] demasiado r¨¢pido¡±. Por eso, insiste, lo importante ahora es no pisar el freno de las ayudas antes de que haya pasado la crisis, y eso no suceder¨¢ al menos en 2021. ¡°Aunque la econom¨ªa est¨¢ ganando impulso y el desempleo est¨¢ bajando, necesitamos los apoyos. Podr¨¢n ser ajustados, pero hay que mantenerlos¡±.

La OCDE se muestra m¨¢s optimista ante el futuro de la PANDEMIA

Tiene ejemplos a mano. Australia, por ejemplo, ha hecho algo ¡°interesante¡±: el Gobierno ha prometido que no ajustar¨¢ su pol¨ªtica fiscal hasta que el paro vuelva a estar en torno al 6%. ¡°Da una cierta gu¨ªa¡±, considera Boone. No se trata, tampoco, de seguir gastando a lo loco: al fin y al cabo, la OCDE tambi¨¦n advierte en su ¨²ltimo informe de que los tremendos gastos en que est¨¢n incurriendo los Gobiernos de todo el mundo, a costa de una ingente deuda que alg¨²n d¨ªa habr¨¢ que afrontar, tienen que tener sentido. En caso contrario, en alg¨²n momento estos desembolsos se volver¨¢n en contra de los pa¨ªses que los han aprobado.

¡°Cuando la situaci¨®n vuelva un poco a la normalidad, la gente va a preguntar a d¨®nde fue el dinero¡±, advierte. Gastar s¨ª, pero guardando las facturas, en resumen. Y ¡°focalizando¡± mejor, agrega Boone. Otro ejemplo, Alemania: en cada Estado, explica, tienen un comit¨¦ que analiza el balance anual de las empresas en 2019 para ver si son sostenibles. Porque una de las grandes ¡°preocupaciones¡± de la economista jefa de la OCDE es la bancarrota de muchas empresas que, recuerda sombr¨ªa, suele suceder en un momento posterior de la crisis. ¡°El gasto deber¨ªa realizarse de forma inteligente, focalizado en algunos sectores y empresas viables¡±, algo que requiere una decisi¨®n consensuada quiz¨¢s tambi¨¦n con otros organismos m¨¢s all¨¢ de los gubernamentales, como hace Alemania.

No es solo una cuesti¨®n de empresas viables. Tambi¨¦n de apostar por el futuro. Y este requiere, ante todo, no olvidar a los que van a salir peor de esta crisis: los j¨®venes. ¡°Lo que m¨¢s me preocupa es la desigualdad que estamos creando. Sobre todo para los j¨®venes que acceden al mercado de trabajo¡±, reconoce. No hay que mirar muy lejos ni muy atr¨¢s para encontrar las consecuencias peligrosas de hacer que la gente se sienta dejada atr¨¢s.

¡°Hemos visto en el pasado c¨®mo esto puede llevar a una polarizaci¨®n que lleve a econom¨ªas m¨¢s cerradas, menos abiertas a cambios y tambi¨¦n menos capaces de cambiar. En el pasado, muchos pol¨ªticos no prestaron suficiente atenci¨®n a los afectados por la globalizaci¨®n y la digitalizaci¨®n, y hay la preocupaci¨®n por que ahora no prestemos suficiente atenci¨®n a los ni?os y los j¨®venes trabajadores, que son los m¨¢s afectados hoy. Y si no hacemos mucho por ellos, les perseguir¨¢n (los efectos de la crisis) toda su vida. Y eso ser¨ªa un desastre para ellos y para la sociedad¡±, advierte. S¨ª, hay un riesgo de que la crisis deje una generaci¨®n perdida. ¡°Generaciones¡±, corrige, muy seria, Boone. ¡°En plural¡±.