Realidad virtual contra los trastornos mentales

En ocasiones, para emprender hay que tomar decisiones dif¨ªciles. Xavier Palomer, f¨ªsico e ingeniero electr¨®nico catal¨¢n, est¨¢ convencido de ello. En 2013, abandon¨® un doctorado en el que investigaba c¨®mo usar antenas en la detecci¨®n de enfermedades ¡ªuna ocupaci¨®n que seg¨²n ¨¦l le aventuraba ¡°un futuro con todas las comodidades¡± ¡ª para iniciar una carrera empresarial. ¡°Ve¨ªa mi vida encarrilada y pens¨¦ que apenas me suceder¨ªa nada nuevo, as¨ª que me rebel¨¦¡±, cuenta por videollamada desde Barcelona, donde regres¨® tras tres a?os en Colorado (EE UU).

De vuelta a casa dispuso de tiempo para echar a andar varios proyectos, hasta que a los pocos meses, en un encuentro con amigos, surgi¨® el definitivo. ¡°Uno de ellos coment¨® que ten¨ªa miedo a volar y otro le sugiri¨® que se tratara con realidad virtual. Me qued¨¦ con el comentario y en cuanto llegu¨¦ a casa, busqu¨¦ qu¨¦ investigaci¨®n apoyaba esas terapias¡±, rememora el emprendedor, y explica que se encontr¨® con que el uso de realidad virtual en el ¨¢mbito de la salud mental estaba avalado desde hac¨ªa m¨¢s de 30 a?os. ¡°El desaf¨ªo era sobre todo tecnol¨®gico. Los trastornos estaban ah¨ª y las soluciones tambi¨¦n, pero faltaba desarrollar una herramienta que permitiera llegar a mercado¡±, afirma Palomer, y concede que, cuando fund¨® Psious, a¨²n ve¨ªa lejos el desarrollo de esa tecnolog¨ªa.

El camino iba a ser largo, pero los 20.000 euros iniciales con los que empez¨® le permitieron contratar a varios desarrolladores y crear algunos prototipos del futuro software. Para probarlos, se imprim¨ªan en 3D sus propios cascos de realidad virtual, a la espera de que el mercado ofreciera un mejor hardware. ¡°La falta de un dispositivo adecuado era un problema, as¨ª que optamos por trabajar la parte comercial, inform¨¢ndonos al detalle de las necesidades del cliente, para ser capaces de adaptarnos r¨¢pidamente cuando el casco ¨®ptimo estuviera disponible¡±. Aunque emplearon primero uno de Samsung, el momento esperado lleg¨® en 2016 con el lanzamiento por parte de Oculus, compa?¨ªa adquirida por Facebook en 2014, de uno de mejor aplicaci¨®n comercial. Firmaron los primeros contratos en EE UU y en Espa?a y hoy tienen m¨¢s de 2.000 clientes en 60 pa¨ªses, en su gran mayor¨ªa psic¨®logos y psiquiatras con consulta privada, que pagan entre 100 y 200 euros mensuales seg¨²n las funcionalidades a las que se suscriban. Ayudan a tratar unos 30 trastornos, desde ansiedades y depresiones hasta des¨®rdenes alimentarios o diferentes fobias.

Palomer define el producto de Psious como una ¡°plataforma en la nube¡±. En ella, el profesional sigue en directo la experiencia de realidad virtual en la que est¨¢ inmerso el paciente y observa su reacci¨®n a trav¨¦s de unos gr¨¢ficos que transcriben el ritmo cardiaco o la sudoraci¨®n. Con esa informaci¨®n, en un tercer espacio, modifica la estimulaci¨®n virtual para, finalmente, realizar el diagn¨®stico. La plataforma ¡°¨²nicamente vincula est¨ªmulos y reacciones¡±, argumenta Palomer, de tal forma que ¡°la pueden emplear profesionales de distintas tendencias¡±. La mayor¨ªa de sus clientes siguen terapias cognitivo-conductuales.

Psious factur¨® en 2019 un mill¨®n de euros. Por ahora carece de ganancias y ha financiado sus elevados gastos fijos, entre ellos una plantilla de m¨¢s de 50 trabajadores, psic¨®logos en su mayor¨ªa, gracias a 10 millones de euros obtenidos en dos rondas de inversi¨®n y ¡°peque?as cuant¨ªas¡± procedentes de subvenciones p¨²blicas. En 2020 sus ingresos aumentar¨¢n un 50%, por debajo de lo esperado, aunque Palomer cree que la pandemia ha asentado tendencias que les benefician, como la telepsicolog¨ªa. ¡°Antes, las sesiones virtuales, en las que una app sustituye a las gafas de realidad virtual, apenas alcanzaban el 5%. Mejoramos la herramienta y ahora son un 50%¡±, apunta, y explica que el menor crecimiento se debe a que parte de sus clientes ¡°no se han adaptado¡± a las consultas a distancia.

A Psious tambi¨¦n le favorece el despegue de la realidad virtual, un mercado con cada vez m¨¢s aplicaciones. Por ese motivo, ahora est¨¢n centrados en extender el alcance de su herramienta a trav¨¦s de varios proyectos, entre ellos uno con el Hospital Vall d¡¯Hebron de Barcelona en el que ayudan a pacientes de c¨¢ncer de mama a ¡°conseguir la mejor relaci¨®n posible¡± con esta enfermedad. ¡°Nuestro verdadero objetivo es tratar el mayor n¨²mero de afecciones y para lograrlo, es necesario que tengan visibilidad. Acompa?amos ese proceso para que la sociedad demande soluciones¡±, resume Palomer.