Podemos reclama a Calvi?o que active un paquete de ayudas directas a empresas para mitigar la crisis
Varios ministros socialistas admiten que esa idea est¨¢ sobre la mesa, pero Econom¨ªa no lo ve viable
El Gobierno prepara una bater¨ªa de medidas para mitigar la oleada de insolvencias empresariales que puede llegar a partir de primavera, seg¨²n alertan el Banco de Espa?a, las instituciones europeas y hasta Mario Draghi, exjefe del Banco Central Europeo y una de las figuras de la ¨²ltima crisis. Parte del Ejecutivo reclama m¨¢s ambici¨®n: Podemos presiona a Eco...
El Gobierno prepara una bater¨ªa de medidas para mitigar la oleada de insolvencias empresariales que puede llegar a partir de primavera, seg¨²n alertan el Banco de Espa?a, las instituciones europeas y hasta Mario Draghi, exjefe del Banco Central Europeo y una de las figuras de la ¨²ltima crisis. Parte del Ejecutivo reclama m¨¢s ambici¨®n: Podemos presiona a Econom¨ªa para que active un plan de ayudas directas a las empresas, en especial a los sectores m¨¢s castigados, y varios ministros socialistas admiten que Espa?a tiene recorrido por ese flanco. El Tesoro acaba de reducir en 10.000 millones las emisiones de deuda en 2021. ¡°La econom¨ªa necesita un plus porque el pr¨®ximo semestre va a ser malo; lo ideal ser¨ªa usar esos 10.000 millones¡±, se?ala el responsable de Econom¨ªa de Podemos, Nacho ?lvarez. Fuentes de Econom¨ªa sostienen que esa cifra en concreto nunca se le ha trasladado a la vicepresidenta. Pero el debate est¨¢ ah¨ª.
El socio minoritario de la coalici¨®n de Gobierno es partidario de reforzar ¡°desde ya¡± las ayudas directas, en particular para el sector de la hosteler¨ªa. Y ese debate lleva un tiempo sobre la mesa del Consejo de Ministros, con dos bandos diferenciados: quienes creen que 2021 va a ser un a?o de recuperaci¨®n fuerte y apuntan que Espa?a ya ha hecho lo suficiente por el lado fiscal, y los ministros que atisban la recuperaci¨®n a¨²n lejos y, por tanto, aspiran a reforzar los est¨ªmulos previstos en el Presupuesto ante un semestre m¨¢s dif¨ªcil de lo esperado, en el que ni las vacunas ni los fondos europeos ¡ªlos dos grandes motores de la reactivaci¨®n¡ª van a surtir efecto todav¨ªa. Econom¨ªa tiene sobre la mesa varias f¨®rmulas para abordar reestructuraciones de deuda o figuras como los pr¨¦stamos participativos, como adelant¨® este lunes EL PA?S. Pero al menos una parte del Consejo de Ministros es partidaria de subir un grado la ambici¨®n de ese paquete, con ayudas directas a las empresas, como han hecho otros socios europeos, como piden tambi¨¦n las patronales y el PP y como han solicitado tanto el Banco de Espa?a como el FMI.
Este debate se ha reproducido en varias ocasiones en el seno del Gobierno, en especial en la Comisi¨®n Delegada de Asuntos Econ¨®micos. Y fue muy intenso durante la discusi¨®n del plan de la hosteler¨ªa, que se retras¨® varias veces entre otras cosas por esta disputa. La ministra de Industria, Reyes Maroto, era una de las que m¨¢s insist¨ªa en la necesidad de aprobar ayudas directas, como han hecho otros pa¨ªses, en especial Alemania. Finalmente se apost¨® por una f¨®rmula intermedia que la semana pasada logr¨® un amplio apoyo en el Congreso.
Las reticencias m¨¢s fuertes llegan de la vicepresidencia econ¨®mica y el Ministerio de Hacienda, que insisten en que la ayuda m¨¢s potente para las empresas son los expedientes de regulaci¨®n temporal de empleo (ERTE), que implican que el Estado asume los salarios, o la reducci¨®n de cotizaciones. El Ejecutivo activ¨® tambi¨¦n hace meses un paquete de 10.000 millones para entrar en el capital de empresas estrat¨¦gicas. Pero una parte del Gobierno insiste en que hay que hacer m¨¢s, y apuntan a los 10.000 millones adicionales procedentes de la reducci¨®n de las emisiones de deuda p¨²blica previstas por el Tesoro para este a?o.
No hay comidas gratis, dice un viejo adagio en econom¨ªa. Y esta tampoco lo es: se trata de salvar los pr¨®ximos seis meses, hasta que los datos de contagios mejoren y los fondos europeos empiecen a llegar, pero a costa de m¨¢s d¨¦ficit. Podemos apunta, en l¨ªnea con organismos como el FMI, que no es el momento de preocuparse por la situaci¨®n fiscal, pero el partido que lidera Pablo Iglesias no est¨¢ solo en esa reivindicaci¨®n. Tanto los sindicatos como la patronal han lanzado reiterados mensajes en ese sentido. E incluso en el flanco socialista del Consejo de Ministros ha cuajado la idea de que Espa?a ha hecho relativamente poco.
La Moncloa apoya a la vicepresidenta Nadia Calvi?o: ¡°El paquete fiscal ha sido potente, ha sostenido a empresas y trabajadores a trav¨¦s de los ERTE y el ICO, y es Econom¨ªa quien se ha encargado de acompasar las medidas a la situaci¨®n econ¨®mica¡±, seg¨²n las fuentes consultadas. Sin embargo, ese debate se abre paso en el Consejo de Ministros y en el PSOE a medida que se va comprobando que la leve recuperaci¨®n del cuarto trimestre puede dejar paso a unos meses complicados. Econom¨ªa sostiene tambi¨¦n que el paquete de ayudas directas, adem¨¢s de los 10.000 millones de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) para empresas estrat¨¦gicas, incluye los ERTE, as¨ª como las medidas para los aut¨®nomos y las incluidas en el plan de la hosteler¨ªa. Junto con las moratorias fiscales, las medidas relativas a las cotizaciones a la Seguridad Social y las l¨ªneas de cr¨¦dito y los avales del ICO, el ministerio sostiene que las ayudas del Gobierno espa?ol est¨¢n en la banda alta de lo que de veras se ha otorgado en Europa. Pero las cifras de la Comisi¨®n Europea sit¨²an a Espa?a en el furg¨®n de cola en las medidas de gasto discrecionales.
Desde el sector del Ejecutivo que m¨¢s rechaza la idea de las ayudas directas aclaran, en cualquier caso, que se est¨¢ analizando en todo momento la evoluci¨®n de la econom¨ªa y sobre todo la capacidad de supervivencia del tejido empresarial. Las mismas fuentes apuntan que esos 10.000 millones est¨¢n ah¨ª por si hicieran falta, porque Espa?a de momento no est¨¢ teniendo problemas en sus emisiones de deuda. Tambi¨¦n insisten en que los ERTE suponen un gasto enorme para el Ejecutivo, mayor incluso de lo que podr¨ªa implicar alg¨²n tipo de ayuda directa, y adem¨¢s argumentan la complejidad del Estado auton¨®mico para justificar su rechazo. Son las autonom¨ªas las que tienen las competencias para esas ayudas directas, y algunas las est¨¢n inyectando ya.
En cualquier caso el debate no est¨¢ cerrado. La dureza de la tercera ola ha hecho saltar las previsiones por los aires. Y hasta los m¨¢s resistentes admiten que es posible que esas ayudas sean la ¨²nica opci¨®n en pocas semanas.