Calvi?o prepara medidas para evitar que se disparen las insolvencias

Viene una primera mitad de a?o todav¨ªa con curvas. El Gobierno es consciente de que a¨²n quedan semanas y meses duros hasta entrar en una fase de recuperaci¨®n econ¨®mica plena e intensa. Todo depender¨¢ de las vacunas. Y para afrontar estos esfuerzos que restan el Ejecutivo est¨¢ ya preparando nuevas medidas con las que tratar de evitar que en ese periodo haya problemas de insolvencias generalizadas que lastren la salida de la crisis. Los sectores y patronales, el Banco de Espa?a y las entidades financieras han presionado. Y el Gobierno ha dado un giro y empieza a abrirse a medidas para aliviar el exceso de deuda.

El Ejecutivo analiza f¨®rmulas para abordar reestructuraciones de deuda o figuras como los pr¨¦stamos participativos. Seg¨²n las fuentes gubernamentales consultadas, no est¨¢n cerradas y en cualquier caso ser¨¢n quir¨²rgicas y focalizadas. El Tesoro, las entidades y el Banco de Espa?a colaboran haciendo un seguimiento para valorar la oportunidad de las medidas. La reforma de la Ley Concursal ir¨¢ seguro con el fin de agilizar los procesos para liquidar r¨¢pido las empresas inviables y recuperar con m¨¢s facilidad las viables. Se aprovechar¨¢ la transposici¨®n de una directiva europea para lograr reestructuraciones tempranas y eficaces de la deuda. Entre ellas se incluir¨ªa la mejora de las exoneraciones de deuda en el periodo preconcursal y acelerar los procedimientos para firmar acuerdos extrajudiciales de pago con quitas. En todo caso, a¨²n est¨¢ por ver la dimensi¨®n y profundidad del paquete.

La vicepresidenta de Asuntos Econ¨®micos, Nadia Calvi?o, desliz¨® el viernes en el Congreso que en las pr¨®ximas semanas habr¨¢ medidas para atajar los problemas de solvencia. ¡°Un elemento fundamental es seguir evitando un impacto estructural sobre nuestra econom¨ªa. Es decir, seguir actuando de forma decisiva sobre el tejido productivo y el empleo, sobre todo en los sectores m¨¢s golpeados, como hemos hecho hasta ahora. Tenemos que seguir adoptando medidas en las pr¨®ximas semanas para evitar que los problemas de liquidez se conviertan en problemas de solvencia para las empresas viables. Tenemos que seguir proporcionando apoyo enfocado a aquellos sectores, empresas y trabajadores m¨¢s afectados. Tenemos que asegurar mecanismos ¨¢giles de reestructuraci¨®n empresarial, y tambi¨¦n tenemos que recuperar el pulso inversor¡±, declar¨®.

Todav¨ªa quedan d¨ªas complicados. En noviembre la econom¨ªa empez¨® a dar malas se?ales. Sin embargo, la reapertura en diciembre y la fortaleza de la actividad en Madrid en ese mes brind¨® un respiro suficiente como para que no cayese el PIB. Pero ahora esa relajaci¨®n de diciembre se est¨¢ pagando con nuevas restricciones que ya tienen un reflejo en los indicadores adelantados. Las ¨²ltimas cifras de movilidad, gasolina y tarjetas apuntan una reca¨ªda. La recuperaci¨®n se retrasa. ¡°Los datos son mixtos: relativamente buenos en electricidad y manufacturas; malos en movilidad y consumo¡±, explica Antonio Merino, economista jefe de Repsol.

No obstante, el Gobierno tiene argumentos para ser un poco m¨¢s optimista. Fuentes del Ejecutivo explican tres factores a tener en cuenta: uno, el fuerte rebote del tercer trimestre demuestra que las medidas funcionan y que la econom¨ªa est¨¢ preparada para retomar la actividad en cuanto bajan las restricciones. Dos, las restricciones aprobadas son mucho menos duras que las del gran confinamiento. Y tres, las empresas y trabajadores se han adaptado y son capaces de operar con menores niveles de movilidad. Rafael Dom¨¦nech, economista del BBVA, apunta en este mismo sentido: ¡°Aunque se trata de un pa¨ªs con un tejido productivo distinto, China est¨¢ siendo capaz de recuperar niveles con un 20% menos de movilidad¡±.

Adem¨¢s, pese a los retrasos en las vacunas, algunos analistas se?alan que los mayores de 65 a?os infectados por la covid-19 son los que m¨¢s ocupan las UCI. De modo que su vacunaci¨®n podr¨ªa restar presi¨®n hospitalaria y supondr¨ªa una mejora sustancial de las expectativas mucho antes de alcanzar la inmunidad de reba?o.

La reducci¨®n de las rentas de las familias no ha sido tan fuerte gracias a los ERTE. Y es previsible que se produzca un fuerte tir¨®n del consumo alimentado por el ahorro acumulado en alg¨²n momento de la segunda mitad del a?o. El Gobierno tambi¨¦n espera que el gasto de los fondos europeos brinde impulso a la econom¨ªa hacia final de a?o. Incluso si tardan en llegar, estos ya est¨¢n presupuestados y se empezar¨¢n a licitar en cuanto se tenga el visto bueno de Bruselas. Y siempre que no haya cambios en el comportamiento del virus, conforme se vaya extendiendo la vacunaci¨®n, mejorar¨¢ la presi¨®n hospitalaria y se podr¨¢ liberar una parte de la econom¨ªa: el comercio, la hosteler¨ªa y el turismo dejar¨ªan de hibernar y se ir¨ªan incorporando al ir desapareciendo las restricciones. As¨ª las cosas, aunque se retrasa la recuperaci¨®n, en general el consenso entre los analistas es que hacia el segundo semestre todos estos elementos deber¨ªan alinearse para propiciar un fuerte rebote.

Pero, entretanto, todav¨ªa hay muchos riesgos. Aparte de la evoluci¨®n de la pandemia y la vacunaci¨®n, a¨²n van a darse unos meses en los que sectores importantes sufrir¨¢n. Pese a que la liquidez de las pymes en dep¨®sitos es elevada, el uso de los pr¨¦stamos ICO se ha ralentizado, lo que podr¨ªa constituir una se?al de que las empresas ya no quieren endeudarse m¨¢s para aguantar. Y la fuerte recuperaci¨®n podr¨ªa verse lastrada por quiebras, empresas muy endeudadas que ni invierten ni contratan o la llamada hist¨¦resis del mercado laboral, esto es, que a los trabajadores que han perdido el empleo les cueste volver.

El estudio del Banco de Espa?a

Para evitar todo esto, el Banco de Espa?a, la banca y los sectores han estado pidiendo al Gobierno m¨¢s ayudas, sobre todo porque en Espa?a se han dado menos apoyos directos que en otros pa¨ªses del euro. Y Calvi?o se hab¨ªa resistido hasta ahora para no acabar con un agujero mayor en las cuentas. Con un ojo en el estado de las entidades, el Banco de Espa?a prepara un estudio para que el Gobierno cuente con unos par¨¢metros con los que decidir a qu¨¦ empresas ayudar y c¨®mo. Y la patronal bancaria est¨¢ elaborando con la consultora Oliver Wyman otro trabajo similar, en el que analizan cu¨¢les son las inviables, las viables con problemas de liquidez y las viables sin dificultades de financiaci¨®n pero con exceso de deuda. Mientras, el Ejecutivo empieza a abrirse a medidas tras haber defendido que bastaba con los ERTE y los ICO.

La Comisi¨®n Europea ya ha relajado el marco permitido de ayudas de Estado: desde enero acepta que las reembolsables se conviertan en directas hasta 800.000 euros. Y desde octubre se puede ayudar a empresas con una ca¨ªda del negocio de al menos un 30% con hasta tres millones de euros en costes fijos.

La f¨®rmula de los pr¨¦stamos participativos

El Banco de Espa?a ha reclamado en varias ocasiones iniciativas para reforzar los recursos propios de las empresas ante el riesgo de que algunos sectores acaben con un reguero de insolvencias y exceso de deuda. En Espa?a los pr¨¦stamos participativos han sido siempre la f¨®rmula utilizada para mejorar la solvencia con el menor desembolso. Estos cr¨¦ditos se retribuyen en funci¨®n del beneficio de la empresa. Y son los ¨²ltimos en devolverse en caso de quiebra. As¨ª que suponen una mejora del capital y la solvencia de la compa?¨ªa.

En Francia se ha aprobado un mecanismo para desarrollar estos pr¨¦stamos participativos. Y el Instituto Valenciano de Finanzas ha hecho lo mismo. Enisa y Cofides los usan en la Administraci¨®n central, aunque sin el m¨²sculo suficiente. Estos cr¨¦ditos son ideales para las medianas, pero no as¨ª para las peque?as. Para estas ¨²ltimas solo dos v¨ªas re¨²nen la capilaridad necesaria: la Agencia Tributaria y la banca.