Las trabas para meter en n¨®mina a los repartidores
El Gobierno ultima una ley para regularizar el estatus de los llamados ¡®riders¡¯, pero los expertos advierten de las dificultades de este proceso
Van en bicicleta, cargan a sus espaldas una llamativa mochila cuadrada y forman parte de la estampa de cualquier gran ciudad. El debate sobre si existe relaci¨®n laboral entre los repartidores a domicilio de comida y las plataformas como Uber Eats, Deliveroo o Glovo est¨¢ m¨¢s vivo que nunca. El Gobierno quiere zanjar la cuesti¨®n con la publicaci¨®n inminente de la ley de riders, que en estos d¨ªas encara las ¨²ltimas fases de...
Van en bicicleta, cargan a sus espaldas una llamativa mochila cuadrada y forman parte de la estampa de cualquier gran ciudad. El debate sobre si existe relaci¨®n laboral entre los repartidores a domicilio de comida y las plataformas como Uber Eats, Deliveroo o Glovo est¨¢ m¨¢s vivo que nunca. El Gobierno quiere zanjar la cuesti¨®n con la publicaci¨®n inminente de la ley de riders, que en estos d¨ªas encara las ¨²ltimas fases de la negociaci¨®n con los sindicatos y la patronal.
El Ejecutivo quiere resolver un conflicto que dura a?os. Todo apunta a que los riders dejar¨¢n atr¨¢s la etiqueta de falsos aut¨®nomos y pasar¨¢n a ser trabajadores en n¨®mina. As¨ª lo recoge un borrador que manejan fuentes de la negociaci¨®n, aunque el Ministerio de Trabajo insiste en que a¨²n no hay acuerdo. Las empresas tendr¨ªan 90 d¨ªas para contratar a todos los ciclistas. Pasado el plazo, ser¨ªan asalariados ¡°salvo prueba en contra¡±.
El Gobierno s¨ª ha adelantado que los repartidores no podr¨¢n elegir entre ser aut¨®nomos o empleados en plantilla seg¨²n les interese. Esto siempre depender¨¢ de ¡°c¨®mo se trabaje¡±, puntualiz¨® este mi¨¦rcoles el secretario de Estado de Empleo y Econom¨ªa Social, Joaqu¨ªn P¨¦rez Rey.
Para Nacho Parra, abogado laboralista del Colectivo Ronda, este camino no mejorar¨ªa la situaci¨®n de los repartidores. M¨¢s bien al contrario: dar¨ªa margen a las plataformas para acudir a los tribunales. Al admitir prueba en contra, vaticina que ¡°las empresas podr¨¢n seguir alegando que su forma de prestaci¨®n de servicios es propia de aut¨®nomos¡±. Una opini¨®n que comparte Miguel Arberas, socio de Abd¨®n Pedrajas Littler, que agrega que esta presunci¨®n ¡°no a?adir¨ªa mucho m¨¢s a lo que ya recoge el Estatuto de los Trabajadores¡±.
No obstante, todas las posibilidades est¨¢n abiertas. El Gobierno podr¨ªa optar por un ultim¨¢tum y obligar a las plataformas a una contrataci¨®n en masa, sin condicionantes. Tambi¨¦n est¨¢ encima de la mesa que las empresas paguen las cotizaciones a la Seguridad Social con efecto retroactivo, esto es, pagar tambi¨¦n los periodos no cotizados como falsos aut¨®nomos.
En este escenario, el letrado Miguel Arberas ve dos problemas. Por un lado, las plataformas tendr¨ªan que pagar de golpe muchos millones a la Tesorer¨ªa del Estado en concepto de cotizaciones atrasadas, lo que ¡°repercutir¨ªa en los consumidores e incluso a los propios riders¡±. Por otra parte, un asalariado con horarios tendr¨ªa un dif¨ªcil encaje en el d¨ªa a d¨ªa del reparto, que es din¨¢mico y requiere flexibilidad. ¡°Algunos d¨ªas sobrar¨ªan repartidores y otros no dar¨ªan abasto¡±, augura el letrado.
La batalla legal por las condiciones de este colectivo comenz¨® en 2018, cuando un ciclista consigui¨® que una jueza de Valencia declarase improcedente su despido pese a ser aut¨®nomo sobre el papel. Detalles como el control por GPS, el uso de la aplicaci¨®n o no poder fijar precios fueron esenciales para concluir que la relaci¨®n era por cuenta ajena.
Desde entonces, los jueces han emitido alrededor de una treintena de sentencia a favor de los riders, que han visto reconocidos derechos b¨¢sicos como las vacaciones, el salario fijo o la protecci¨®n ante despidos. El Tribunal Supremo consolid¨® esta l¨ªnea jurisprudencial en septiembre de 2020 al reconocer por primera vez a un repartidor de la espa?ola Glovo como trabajador por cuenta ajena.
La resoluci¨®n del alto tribunal, sin embargo, no zanja el asunto. La rapidez con la que se crean y destruyen los modelos de trabajo en el mundo de Internet podr¨ªa ser un h¨¢ndicap para la doctrina del Supremo.
Este ser¨ªa el argumento comod¨ªn de las multinacionales en los tribunales. As¨ª lo explica Ignasi Beltr¨¢n, profesor de Derecho del Trabajo de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). ¡°Las plataformas defienden que el Supremo dio una respuesta a una problem¨¢tica en un momento concreto, pero hasta ahora las condiciones han evolucionado¡±, subraya el docente. Por ejemplo, ahora los repartidores pueden rechazar pedidos sin ser penalizados y no est¨¢n sujetos a horarios. En esta l¨ªnea, Alberto Novoa, socio del ¨¢rea laboral de Ceca Mag¨¢n, coincide en que las empresas est¨¢n otorgando flexibilidad a los riders y ¡°mayor libertad para aceptar o no servicios¡±.
Por su parte, el abogado Nacho Parra est¨¢ convencido de que el criterio lo marcar¨¢ la Inspecci¨®n de Trabajo. Los procedimientos a gran escala s¨ª podr¨ªan inquietar a las firmas, explica, ya que analizan ¡°la propia organizaci¨®n de la actividad¡± y no la situaci¨®n de un solo repartidor. Estos procedimientos s¨ª pueden sentar un verdadero precedente, ya que juzgan las estructuras de contrataci¨®n en conjunto, y no la situaci¨®n de un repartidor con nombres y apellidos, lo que s¨ª podr¨ªa inquietar a las grandes multinacionales.
Sin ir m¨¢s lejos, fue una de estas investigaciones la que deriv¨® en la importante sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de enero de 2020, que declar¨® a 532 ciclistas de Deliveroo como falsos aut¨®nomos y conden¨® a la plataforma a pagar 1,2 millones a la Seguridad Social. La decisi¨®n debe ser confirmada por el Supremo. M¨¢s recientemente, un juez de Barcelona acept¨® la tesis de los inspectores de Trabajo y aval¨® que exist¨ªa una estructura de contrataci¨®n fraudulenta en Glovo que involucraba a 748 mensajeros. La Tesorer¨ªa cifr¨® en 1,3 millones de euros la deuda por las cotizaciones no abonadas.
Beltr¨¢n explica que, para salir airosas de estas inspecciones, las plataformas se definen a s¨ª mismas como meras intermediarias. Algo parecido a las p¨¢ginas amarillas, que conectan clientes con servicios, ¡°pero por un medio digital¡±. El profesor, sin embargo, rechazada esta tesis y lo define m¨¢s bien como ¡°un modelo de negocio dise?ado para no pagar a la Seguridad Social¡±.
El negocio del ¡®delivery¡¯
Seg¨²n la Asociaci¨®n Espa?ola de la Econom¨ªa Digital (Adigital), patronal que agrupa empresas como Deliveroo, Glovo y Uber Eats, en 2019 las plataformas de reparto facturaron 708 millones de euros, y crearon 15.300 empleos. Espa?a es el pa¨ªs de la Uni¨®n Europea con m¨¢s trabajadores en estas estructuras. Otro informe titulado Digital Labour Platforms in Europe de la Comisi¨®n Europea recoge que un 12,3% de los adultos ha trabajado alguna vez para uno de estos portales. Sin embargo, la UGT calcula que la f¨®rmula del falso aut¨®nomo ahorrar¨ªa a las multinacionales 168 millones de euros al a?o: 90 millones en salarios y 76 en cotizaciones a la Seguridad Social.