El teletrabajo amenaza con una ola de pleitos
El empleo desde casa empieza a copar las sentencias y los expertos prev¨¦n m¨¢s conflictos con la vuelta a la oficina
La vuelta de los teletrabajadores a la oficina podr¨ªa terminar de abrir la caja de Pandora de las disputas por el trabajo a distancia. Un fen¨®meno que tiene ya su reflejo en los conflictos laborales, como recogen las estad¨ªsticas judiciales: el n¨²mero de sentencias que incluyeron el t¨¦rmino ¡°teletrabajo¡± pas¨® de 182 en 2019 a 349 en 2020, seg¨²n la base de datos jur¨ªdica La Ley Digital, lo que supone el doble de discrepancias en solo un a?o.
Los expertos advierten de que los empleados...
La vuelta de los teletrabajadores a la oficina podr¨ªa terminar de abrir la caja de Pandora de las disputas por el trabajo a distancia. Un fen¨®meno que tiene ya su reflejo en los conflictos laborales, como recogen las estad¨ªsticas judiciales: el n¨²mero de sentencias que incluyeron el t¨¦rmino ¡°teletrabajo¡± pas¨® de 182 en 2019 a 349 en 2020, seg¨²n la base de datos jur¨ªdica La Ley Digital, lo que supone el doble de discrepancias en solo un a?o.
Los expertos advierten de que los empleados, tras meses en casa, pueden tener la confusi¨®n de que han adquirido derechos que, en realidad, nunca existieron. Por otra parte, las empresas pueden aprovechar la coyuntura para alterar condiciones laborales cuando no toca.
La ola de pleitos, seg¨²n los abogados del sector, podr¨ªa llegar con el fin de la pandemia. Aunque por ahora la conflictividad es baja, el momento cr¨ªtico vendr¨¢ cuando las firmas decidan entre volver a la oficina, mantener a la plantilla en los hogares de forma permanente o adoptar un sistema mixto.
Como apunta Iv¨¢n L¨®pez Garc¨ªa de la Riva, socio director del ¨¢rea laboral de Abd¨®n Pedrajas Littler, los empresarios buscan asesoramiento en la materia para anticiparse a los problemas. ¡°Han aumentado considerablemente el n¨²mero de consultas de empresas y la elaboraci¨®n de protocolos, pol¨ªticas y acuerdos sobre teletrabajo¡±, afirma el letrado. Por su parte, Nicol¨¢s Mart¨ªn, abogado laboralista, coincide en este sentido y vaticina que ¡°habr¨¢ m¨¢s pleitos, seguro¡±. ¡°No solo porque los empleados no quieran volver a la oficina¡±, explica, sino porque, d¨¢ndole la vuelta a la tortilla, ¡°habr¨¢ empresas que querr¨¢n imponer el trabajo a distancia y as¨ª ahorrarse gastos, como el alquiler de las sedes o la luz¡±. Una situaci¨®n que puede chocar con el deseo de regresar de los trabajadores, ¡°porque el ambiente laboral es bueno, o porque en la oficina tienen servicios como guarder¨ªa o gimnasio que en casa no¡±.
El Gobierno public¨® en septiembre de 2020 un real decreto para regular el bum de oficinas en casa, donde consagra la voluntariedad del teletrabajo. El empleado no puede exigir al empresario trabajar en remoto, ni viceversa, a no ser que exista una causa de peso (por ejemplo, cuidar de los ni?os).
En los dem¨¢s casos, se debe llegar a un acuerdo escrito que recoja de forma clara unos contenidos m¨ªnimos que desgrana la ley, como cu¨¢nto durar¨¢ el r¨¦gimen, los equipos que necesitar¨¢ el empleado, los gastos, los horarios o las posibles medidas de control.
Por otro lado, este pacto es reversible, es decir, puede deshacerse en cualquier momento si se respeta un preaviso, que tambi¨¦n debe acordarse. Un sistema que, para Mart¨ªn, puede generar ¡°cierta inseguridad¡± a la empresa, ya que el trabajador puede volver a la presencialidad sin considerar las necesidades de la compa?¨ªa.
Compensar gastos
Son precisamente los contenidos m¨ªnimos de estos acuerdos los que podr¨ªan generar m¨¢s conflictividad. La legislaci¨®n no entra en detalles sobre c¨®mo se deben negociar estos puntos y es un ¨¢rea que mezcla cuestiones variopintas como la conciliaci¨®n, el registro de jornada, el control de horarios, la protecci¨®n de datos o la desconexi¨®n digital. Sergio Ponce, socio de Laboral de Ur¨ªa Men¨¦ndez, corrobora que ¡°se trata de un aspecto transversal que afecta a muchas y muy variadas materias¡±. ¡°En la actualidad las disputas se centran esencialmente en la determinaci¨®n de la compensaci¨®n de gastos¡±, apunta el letrado. As¨ª, por ejemplo, si bien la nueva norma obliga al empresario a hacerse cargo de internet o de la luz, ¡°no determina c¨®mo debe cuantificarse, ni otros aspectos que, en gran medida, se remiten a la negociaci¨®n colectiva¡±, lo que ¡°es fuente de conflicto¡±.
El papel de los convenios colectivos ser¨¢, por tanto, clave. Pero hasta que estos regulen el asunto (algunos como el convenio de banca ya lo hacen), los tribunales resuelven poco a poco los puntos de fricci¨®n. Por ejemplo, enviar a un operario a teletrabajar no justifica el recorte de pluses y beneficios acordados por convenio. As¨ª lo dijo la Audiencia Nacional en marzo de este a?o, al condenar a una compa?¨ªa que, aprovechando el trabajo a distancia, modific¨® los horarios y suprimi¨® el cheque restaurante de un trabajador.
Los accidentes laborales son otro nicho de pleitos. La regla general no var¨ªa: si ocurre en horario de trabajo, es accidente laboral. Con estos mimbres, el Tribunal Superior de Justicia de Pa¨ªs Vasco sent¨® en septiembre de 2020 que era lesi¨®n laboral el infarto de un comercial en casa mientras trabajaba. Tambi¨¦n el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a, esta vez en 2015, sentenci¨® que era accidente de trabajo el infarto de un t¨¦cnico mientras realizaba una guardia en su casa, porque tener el m¨®vil encendido y estar atento a cualquier urgencia implica una labor.
?lvaro San Mart¨ªn, abogado laboralista del bufete Casadeley, tambi¨¦n teme que con la vuelta a las oficinas haya malentendidos. ¡°La gente no tiene nada claro que no son derechos adquiridos y son totalmente reversibles¡±, apunta. Para imponer el teletrabajo deben existir ¡°derechos superiores, como conciliaci¨®n familiar, prevenci¨®n de riesgos laborales o acuerdos en convenio o contrato¡±. Fuera de estos casos, ¡°la empresa puede denegarlo y ni siquiera tener que justificar la negativa¡±, agrega el experto.