El discurso del Banco de Espa?a sobre el SMI

En su comparecencia parlamentaria del 1 de noviembre de 2018, el gobernador del Banco de Espa?a (BdE) anticip¨® que la subida del 22% planteada para el Salario M¨ªnimo Interprofesional (SMI) de 2019 conllevar¨ªa una destrucci¨®n del 0,8% del empleo asalariado. Dado que la ocupaci¨®n por cuenta ajena era de 16,85 millones de trabajadores a finales de 2018, ello supon¨ªa unos 135.000 asalariados menos. La poblaci¨®n asalariada entre el cuarto trimestre de 2018 y el de 2019 aument¨® en 400.000 personas mientras que el tama?o del colectivo presuntamente m¨¢s afectado (j¨®venes entre 16 y 29 a?os) tambi¨¦n creci¨® ligeramente en 6.000 personas. Por tanto, la predicci¨®n result¨® desajustada, algo que seguramente dej¨® preocupada a nuestra autoridad monetaria.

Dado que la anterior predicci¨®n se basaba en un estudio con datos hasta 2017 y que ahora est¨¢n ya disponibles los microdatos de la Muestra Continua de Vidas Laborales del INE para 2019, el Banco de Espa?a procedi¨® a encargar otro estudio a un grupo de investigadores de su Servicio de Estudios para comprobar si esta vez la nueva evidencia era favorable a su hip¨®tesis. El enfoque de este trabajo, mucho m¨¢s convincente que el anterior, compara las tasas de crecimiento del empleo asalariado para un grupo de tratamiento formado por los colectivos con salarios inferiores a 1.250 euros en 2018 ¨Daquellos m¨¢s afectados por la subida del SMI en 2019 hasta 1.050 euros en 12 pagas¨D con las de un grupo de control constituido por aquellos otros trabajadores cuyos salarios se encontraban entre 1.251 y 1.350 euros (presuntamente no afectados). Este ejercicio de evaluaci¨®n documenta que la subida del 22% en el SMI dio lugar a entre 0,6 y 1,1 puntos porcentuales de menor empleo, esto es, cerca de 140.000 puestos de trabajo menos. Bingo, el gobernador hab¨ªa acertado.

Dado que, de acuerdo con el estudio, la incidencia del nuevo SMI afectaba a cerca de 1,69 millones de asalariados (alrededor del 10% del total, especialmente a los j¨®venes, los contratados temporales en pymes y al sector agr¨ªcola), los resultados anteriores implican que 1,55 millones de trabajadores vieron aumentar sus salarios mientras que 140.000 perdieron su empleo. ?Qu¨¦ supone ello en t¨¦rminos de aumento de la masa salarial? Obviamente los beneficiados de esta pol¨ªtica no experimentaron una subida del 22% en sus salarios, ya que algunos percib¨ªan sueldos muy cercanos al nuevo SMI.

De acuerdo con un excelente informe de CC OO sobre la distribuci¨®n salarial en 2018, un 27% de los afectados ten¨ªa derecho a una subida del 2,5%; un 20% al 7,5%; un 17% al 12,5%; un 14% al 17,5%, y un 22% al 22,3%. Ello implica que la masa salarial de 1,55 millones de trabajadores que han mantenido su empleo (un 92% de los afectados) subi¨® en promedio un 10,6% mientas que la del 8% restante experiment¨® una ca¨ªda del 5,6% (suponiendo que la p¨¦rdida de renta laboral para estos ¨²ltimos es del 70% al percibir alguna prestaci¨®n/subsidio de desempleo). Esto es, la masa salarial de los colectivos afectados se increment¨® en un 5%. Con un salario bruto mediano de unos 14.000 euros en 2018 para este tipo de trabajadores, ello supone unos 700 millones de euros adicionales en sus bolsillos.

Esquema de compensaci¨®n

As¨ª pues, como medida redistributiva la subida del SMI ha sido efectiva. Incluso podr¨ªa dise?arse un esquema de compensaci¨®n a los perjudicados por parte de los beneficiados y estos ¨²ltimos todav¨ªa mantendr¨ªan buena parte sus ganancias salariales. Poner el ¨¦nfasis sobre el impacto negativo sobre el empleo a corto plazo es como enfatizar los efectos secundarios de las vacunas anticovid durante la semana siguiente al pinchazo, ignorando la inmunidad subsiguiente de los vacunados.

Entre estos efectos potencialmente favorables se encuentra el aumento de la oferta de trabajo (beneficioso para la sostenibilidad del sistema de pensiones) para aquellos cuyo salario de reserva (por debajo del cual no desean trabajar) superaba al SMI de 2018 y ahora es inferior. Tambi¨¦n la menor tasa de abandono escolar de aquellos j¨®venes con bajas cualificaciones que permanecen en el sistema educativo para mejorar su empleabilidad en empresas que han de pagarles m¨¢s o que sufren explotaci¨®n salarial en sectores monopson¨ªsticos.

A este respecto, conviene recordar que el SMI por hora en 2019 era de siete euros y que los j¨®venes muy cualificados que trabajan con contratos en pr¨¢cticas en algunas consultoras y bancos de inversi¨®n cobran unos 2.100 euros mensuales con jornadas efectivas de m¨¢s de 80 horas semanales, es decir, percibiendo menos de siete euros la hora.

Los autores del informe del Banco de Espa?a son conscientes de que sus resultados son muy parciales, aunque concentrarse en este tema sea perfectamente leg¨ªtimo. Esta obsesi¨®n por resaltar los aspectos negativos deja fuera algunas de las preguntas m¨¢s relevantes sobre este tipo de regulaci¨®n laboral. Por ejemplo, ?no ser¨ªa m¨¢s eficiente complementar el SMI con un impuesto negativo sobre la renta, como el cr¨¦dito tributario por ingreso del trabajo (EITC) en EE UU?, ?deber¨ªa recuperarse el SMI juvenil (16-17) que aboli¨® Aznar en 1998?, ?no ser¨ªa deseable la existencia de diferentes salarios m¨ªnimos regionales en funci¨®n de la capacidad adquisitiva en cada comunidad aut¨®noma? Esperemos que el pr¨®ximo discurso del gobernador ante el parlamento tenga una mayor altura de miras y que, con el apoyo de su gran equipo de investigaci¨®n, proporcione una respuesta convincente a todas estos interrogantes.

Juan Jos¨¦ Dolado es catedr¨¢tico de Econom¨ªa en la Universidad Carlos III de Madrid.