El FMI aprueba la mayor inyecci¨®n de reservas de su historia: ?qu¨¦ son los derechos especiales de giro y c¨®mo funcionan?
La entidad efectuar¨¢ un desembolso de 550.000 millones de euros, pero busca que los pa¨ªses m¨¢s ricos donen o presten su cuota a los m¨¢s vulnerables
Es patente que la salida de Donald Trump de la Casa Blanca no solo ha tenido consecuencias en el ¨¢mbito interno. Los efectos en la escena internacional son cada vez m¨¢s claros. El ¨²ltimo de ellos se ha visualizado este viernes, con la aprobaci¨®n por parte del directorio ejecutivo del Fondo Monetario Internacional del mayor est¨ªmulo en sus 77 a?os de historia: 550.000 millones de euros en derechos especiales de giro ¡°para hacer frente a las necesidades mundiales de reservas durante la peor crisis desde la Gran Depresi¨®n¡±, en t¨¦rminos de su directora gerente, Kristalina Georgieva. Un desembolso que Estados Unidos, el accionista dominante del FMI, bloque¨® durante el mandato de Trump para evitar que China e Ir¨¢n obtuvieran nueva financiaci¨®n. La asignaci¨®n debe ser aprobada con al menos el 85% de los votos, y Washington posee el 16,5% de ellos, con lo que su consentimiento es imprescindible para sacarlo adelante.
Reactivado tras la llegada de Joe Biden, el proyecto gan¨® tracci¨®n durante la reuni¨®n de marzo del G7, y est¨¢ ahora pendiente de la aprobaci¨®n de la junta de gobernadores del Fondo, un tr¨¢mite que se espera se supere sin m¨¢s complicaciones, con lo que las reservas empezar¨¢n a llegar a finales de agosto. ¡°Se trata de una inyecci¨®n de energ¨ªa para el mundo¡±, ha celebrado Georgieva en una declaraci¨®n previa a la reuni¨®n de ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20 en Venecia. ¡°Impulsar¨¢ la liquidez y las reservas de todos nuestros pa¨ªses miembros, crear¨¢ confianza y fomentar¨¢ la resistencia y la estabilidad de la econom¨ªa mundial¡±, a?adi¨®. El movimiento supone, esencialmente, crear dinero que los pa¨ªses m¨¢s golpeados, con monedas generalmente devaluadas, puedan usar para comprar m¨¢s f¨¢cilmente vacunas, financiar servicios m¨¦dicos y liquidar deudas, a menudo contra¨ªdas en divisas m¨¢s fuertes, como el d¨®lar.
?Qu¨¦ son los DEG? Los derechos especiales de giro (DEG) son un activo de reserva creado por el FMI en 1969. Aunque oficialmente no son una moneda como tal, s¨ª lo son en la pr¨¢ctica, porque proporcionan liquidez y complementan las reservas oficiales de los pa¨ªses miembros. Y sobre todo porque los que los perciben pueden canjearlos por d¨®lares, euros, libras esterlinas, yenes japoneses o yuanes chinos. El valor de los DEG cambia diariamente seg¨²n la evoluci¨®n en el mercado de divisas de esas cinco monedas, con el d¨®lar especialmente sobrerrepresentado, dado que supone el 41% frente al 31% del euro y el 11% del yuan chino, que entr¨® en 2016 en esa cesta que se revisa cada cinco a?os. Actualmente, 1 DEG vale en torno a 1,20 euros.
?C¨®mo funcionan? Cuando que el Fondo aprueba asignar derechos especiales de giro, los ingresa en las cuentas de sus Estados miembros, que pueden cambiarlos por una de las cinco monedas llegando a acuerdos con otros pa¨ªses o con la mediaci¨®n del FMI si hubiera problemas. Una vez las divisas est¨¢n en sus cuentas, pueden invertirlas en lo que quieran, ya sea reducir deuda, comprar vacunas o adquirir alimentos. La asignaci¨®n de estos derechos es bastante poco habitual, y se circunscribe a momentos especialmente delicados. En 2009, con la crisis financiera haciendo estragos, el organismo aprob¨® un incremento de su potencia de fuego de 293.000 millones de d¨®lares, menos de la mitad que el actual.
?Por qu¨¦ son importantes para los pa¨ªses m¨¢s vulnerables? Lo explica Leopoldo Torralba, economista de Arcano Economic Research. ¡°Normalmente estos pa¨ªses tienen divisas fr¨¢giles y vol¨¢tiles. Los derechos de giro les permiten comprar su divisa si lo necesitan para frenar su ca¨ªda y evitar que siga depreci¨¢ndose. Ganas poder adquisitivo, porque si eres un pa¨ªs emergente te conviene tener muchas reservas de divisa de calidad. Por ejemplo, para comprar vacunas a pa¨ªses avanzados o compa?¨ªas farmac¨¦uticas que seguramente no te van a aceptar tu moneda pero s¨ª los d¨®lares o euros que has canjeado con tus derechos de giro¡±.
?C¨®mo se reparten? Aunque su distribuci¨®n entre los 190 miembros del Fondo es un bal¨®n de ox¨ªgeno para los pa¨ªses en problemas, el reparto es controvertido. Se realiza en proporci¨®n a sus cuotas en el FMI, que siguen una f¨®rmula en la que entre otros factores se tienen en cuenta el PIB y su apertura comercial. Por eso, los pa¨ªses grandes y ricos acaparan las mayores cuotas. Cuanto mayores sean las cuotas, mayores son las obligaciones a la hora de contribuir con recursos al FMI, pero tambi¨¦n las ventajas, como m¨¢s derechos de voto, mejor acceso a financiaci¨®n y m¨¢s asignaciones de derechos especiales de giro, dando lugar a la paradoja de que los pa¨ªses que menos la necesitan son los que m¨¢s liquidez perciben. Se calcula que la UE, EE UU y el Reino Unido recibir¨¢n la mitad de los 650.000 millones de d¨®lares a dividir. Con Espa?a percibiendo unos 13.000 millones y Estados Unidos m¨¢s de 100.000 millones.
Teniendo en cuenta ese sistema de reparto, solo unos 21.000 millones de d¨®lares en reservas adicionales ir¨¢n a parar a los pa¨ªses de bajos ingresos ¡ªel 3,2% del total. Pero el FMI y Naciones Unidas est¨¢n presionando para que los pa¨ªses m¨¢s ricos presten o donen parte de los 438.000 millones que tienen asignados. Pese a que el montante es bajo respecto al total, la precaria situaci¨®n de algunos estados hacen que incluso una inyecci¨®n peque?a comparativamente tenga amplias repercusiones. Los analistas de Citigroup calculan que las reservas de Zambia se duplicar¨¢n y las de Zimbabue se multiplicar¨¢n por seis. Tambi¨¦n es positivo para pa¨ªses como Argentina, Turqu¨ªa, Sri Lanka, Sud¨¢frica, Pakist¨¢n y Nigeria, que tambi¨¦n ver¨¢n un aumento del 10% al 20% en sus reservas de divisas, lo cual les ayuda a reducir su dependencia de una deuda interna o externa m¨¢s cara para acumular reservas.
?Por qu¨¦ ahora? Sus cr¨ªticos, sin embargo, reprochan que, tras los meses perdidos con las trabas de la Administraci¨®n Trump, la medida llega muy tarde. Y lamentan que, ante la mayor profundidad de la crisis derivada de la pandemia en t¨¦rminos de destrucci¨®n de PIB en un solo a?o, el est¨ªmulo se queda corto frente al que se concedi¨® en 2009. La decisi¨®n de asignar 650.000 millones de d¨®lares y no m¨¢s ha estado muy condicionada por EE UU, dado que ronda el m¨¢ximo que Estados Unidos puede aprobar sin tener que acudir al Congreso para pedir su autorizaci¨®n.
La efectividad final de la inyecci¨®n del FMI, depender¨¢ por tanto de cu¨¢nto est¨¦n dispuestos a ceder los pa¨ªses m¨¢s ricos. Georgieva ha dicho que se pondr¨¢ manos a la obra en los pr¨®ximos meses para tratar de ¡°identificar opciones viables para la canalizaci¨®n voluntaria de los derechos especiales de giro de los miembros m¨¢s ricos para apoyar a nuestros pa¨ªses m¨¢s pobres y vulnerables¡±. Y se espera que los responsables de finanzas del G20 discutan durante los pr¨®ximos dos d¨ªas los posibles mecanismos de contribuci¨®n, tanto para los pa¨ªses de bajos ingresos como para algunos pa¨ªses vulnerables de ingresos medios.
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