Alemania suaviza su ley de inmigraci¨®n para atraer trabajadores extranjeros de fuera de la UE

¡°Asegurar trabajadores cualificados es asegurar nuestra prosperidad¡±. La frase del ministro de Trabajo, Hubertus Heil, define a la perfecci¨®n el esp¨ªritu de la reforma de la ley de inmigraci¨®n alemana que este mi¨¦rcoles ha aprobado el Consejo de Ministros. Berl¨ªn se dispone a desplegar un enorme esfuerzo legislativo para hacer m¨¢s atractivo el pa¨ªs a los extracomunitarios que se plantean emigrar para trabajar. La escasez de mano de obra cualificada es un problema de primer orden para la mayor econom¨ªa europea, que tiene la necesidad de incorporar a 400.000 personas de fuera cada a?o para compensar su envejecida pir¨¢mide poblacional.

El Gobierno alem¨¢n, una coalici¨®n de socialdem¨®cratas, verdes y liberales, va a suavizar los requisitos para que los trabajadores de fuera de la UE accedan al complicado mercado laboral alem¨¢n. Lo har¨¢ reduciendo la tediosa burocracia; facilitando la homologaci¨®n de t¨ªtulos extranjeros o incluso eliminando la necesidad de poseerlos en algunos casos, y permitiendo la llegada de personas sin contrato de trabajo con visados temporales para que, una vez en el pa¨ªs, traten de encontrar un puesto de trabajo. Heil se ha referido a la reforma como ¡°una estrategia de contrataci¨®n masiva¡± y ha asegurado que es necesario hacer ¡°un esfuerzo nacional¡± para ponerla en marcha.

La falta de personal en Alemania es acuciante para muchas empresas y se aprecia a simple vista dando un paseo por cualquier calle comercial. Los carteles de ¡°Trabaja con nosotros¡± o ¡°Buscamos a alguien como t¨²¡± se suceden en los escaparates de tiendas y establecimientos de restauraci¨®n. Pero la escasez es enorme tambi¨¦n en sectores que se consideran claves para el futuro del pa¨ªs, como la digitalizaci¨®n y las energ¨ªas renovables. La sanidad tambi¨¦n reclama personal especializado. En educaci¨®n, hay Estados, como Berl¨ªn, que sufren para cubrir las plazas de profesor que se quedan libres en los colegios p¨²blicos.

El Gobierno es consciente de que Alemania necesita mejorar su atractivo con respecto a otros pa¨ªses europeos y a lugares como Estados Unidos y Canad¨¢. ¡°En la competencia por el talento y las manos amigas, ofrecemos nuevas formas y, sobre todo, m¨¢s f¨¢ciles de trabajar aqu¨ª. Nuestro objetivo es crear la ley de inmigraci¨®n m¨¢s moderna de Europa¡±, se?al¨® Heil durante la presentaci¨®n de las l¨ªneas generales de su propuesta, que en los pr¨®ximos meses se redactar¨¢ como proyecto de ley.

Entre las mejoras que plantea el documento est¨¢ que los trabajadores extranjeros cualificados tambi¨¦n podr¨¢n trabajar en ocupaciones que no tengan nada que ver con su formaci¨®n. Un mec¨¢nico podr¨¢ ser contratado como empleado de almac¨¦n, por ejemplo, algo hasta ahora casi imposible por la rigidez de la normativa y las acreditaciones oficiales que se exigen para casi todos los oficios. Tampoco ser¨¢ necesario ya homologar los t¨ªtulos antes de llegar a Alemania, como sucede ahora. Y contar¨¢ m¨¢s la experiencia laboral que la titulaci¨®n a la hora de pedir un visado de trabajo.

Sistema de puntos

Un sistema de puntos inspirado en el modelo canadiense permitir¨¢ la llegada de solicitantes de empleo de fuera de la UE sin contrato previo. La llamada ¡°tarjeta de oportunidades¡± ser¨¢ como un visado temporal para quienes cumplan varios requisitos, entre los que se baraja tener un t¨ªtulo universitario o cualificaci¨®n profesional, al menos tres a?os de experiencia profesional, conocimiento del idioma o residencia previa en Alemania y no ser mayor de 35 a?os. Se est¨¢ estudiando que estos permisos de residencia tengan validez durante un a?o.

Muchas empresas alemanas dan preferencia a los nacionales y a ciudadanos de la Uni¨®n Europea para evitar las trabas burocr¨¢ticas que supone contratar a empleados del resto del mundo. Algo que al final les acaba perjudicando, porque muchos puestos quedan sin cubrir. Los procedimientos para acelerar esta inmigraci¨®n cualificada que necesita el pa¨ªs ¡°deben implementarse de manera r¨¢pida y pragm¨¢tica¡±, se?al¨® por su parte el ministro de Econom¨ªa y Clima, Robert Habeck. La Agencia Federal de Empleo calcula que Alemania tiene que incorporar 400.000 trabajadores extracomunitarios cada a?o.

La puesta en marcha de la reforma de la ley de inmigraci¨®n coincide con otro debate candente en Alemania, la propuesta para facilitar el acceso a la nacionalidad alemana de los ciudadanos de origen extranjero. La ministra del Interior, Nancy Faeser, se dispone tambi¨¦n a presentar un proyecto de ley para reducir de ocho a cinco a?os el periodo de residencia necesario para convertirse en ciudadano alem¨¢n, entre otras novedades. Los planes de Faeser incluyen permitir la doble nacionalidad, es decir, que el nuevo ciudadano alem¨¢n pueda mantener su ciudadan¨ªa de origen.

Esta reforma, en cierto modo complementaria de la otra, tiene visos de convertirse en el pr¨®ximo campo de batalla entre la coalici¨®n que lidera Olaf Scholz y la oposici¨®n. Y tambi¨¦n en fuente de desacuerdos entre los socios del tripartito. Los liberales del FDP ya est¨¢n mostrando su preocupaci¨®n por alguno de los puntos que baraja la ministra socialdem¨®crata. El canciller le ha dado respaldo en p¨²blico: ¡°Cualquiera que viva y trabaje aqu¨ª de forma permanente tambi¨¦n deber¨ªa poder votar y ser elegido; deber¨ªa ser parte de nuestro pa¨ªs con todos los derechos y deberes que ello conlleva¡±, se?al¨® el lunes en un acto sobre integraci¨®n.

La Asociaci¨®n de C¨¢maras Alemanas de Industria y Comercio (DIHK) acogi¨® con satisfacci¨®n los planes del Gobierno para facilitar la inmigraci¨®n de trabajadores cualificados, pero pidi¨® mejoras, por ejemplo, en la contrataci¨®n de aprendices del extranjero. El n¨²mero de plazas de aprendiz que se quedan vacantes aumenta a?o a a?o y los empresarios ven en los extracomunitarios la soluci¨®n a sus problemas para reclutar y formar a j¨®venes empleados. El responsable de Oficios de la organizaci¨®n, Hans Peter Wollseifer, reclam¨® a las autoridades migratorias que se conviertan en ¡°centros de bienvenida¡± y que emitan visados con mayor rapidez. ¡°De lo contrario, la gente no vendr¨¢, porque, la verdad, Alemania no tiene la mejor reputaci¨®n como pa¨ªs al que emigrar¡±, se?al¨® en una entrevista en el Rheinishe Post.