Espa?a se adelanta a Bruselas y propone una reforma integral del mercado el¨¦ctrico de la UE

El Gobierno espa?ol toma la delantera en la UE ante la pr¨®xima reforma del mercado el¨¦ctrico com¨²n, y lo hace con una propuesta de cambio integral en las reglas hoy vigentes. El Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica y el Reto Demogr¨¢fico ha esbozado este martes las l¨ªneas b¨¢sicas de la propuesta que remitir¨¢ a la Comisi¨®n Europea, con la que busca tanto limitar de forma permanente el impacto del gas en la factura de la luz como establecer un precio fijo y regulado para las centrales nucleares e hidroel¨¦ctricas ¡ªen general, amortizadas y con unos costes de operaci¨®n m¨ªnimos¡ª, al margen de lo que ocurra en el mercado mayorista. Todo supervisado por el organismo regulador que decida cada pa¨ªs de la UE, que podr¨¢ determinar el grado de intervenci¨®n en el mercado.

El documento del Ejecutivo espa?ol, que ya ha pasado la criba del Consejo de Ministros, propone un giro pr¨¢cticamente total sobre las bases del sistema actual de formaci¨®n de precios para arrinconar al gas ¡ªel principal responsable de la escalada en el recibo el¨¦ctrico del ¨²ltimo a?o y medio¡ª y garantizar ingresos estables para las energ¨ªas renovables. Que el mercado mayorista, en fin, quede mucho m¨¢s embridado y regulado, y que sea mucho m¨¢s previsible para consumidores y empresas generadoras.

La retribuci¨®n que reciben los propietarios de granjas solares y parques e¨®licos quedar¨ªa fijada, de forma muy mayoritaria, por las subastas renovables. Un mecanismo que ya existe, pero que pasar¨ªa de ser una opci¨®n m¨¢s ¡ªcompletamente voluntaria¡ª para los desarrolladores a abarcar la pr¨¢ctica totalidad de la energ¨ªa verde que se vende.

Por su parte, los ciclos combinados (gas), la hidroel¨¦ctrica de bombeo y las bater¨ªas pasar¨ªan a estar regidas por otro tipo de concursos: las llamadas ¡°subastas de capacidad¡±. Ese esquema no solo fijar¨ªa una retribuci¨®n no solo por el volumen de energ¨ªa que se vende, sino por su importancia como el respaldo de todo el sistema el¨¦ctrico. Ser¨ªa una manera de asegurarse de que estas centrales estar¨¢n cuando se requiere su presencia: se les exigir¨ªa aportar energ¨ªa cuando la demanda sube y la generaci¨®n renovable es baja; es decir, cuando hay escasez de electricidad barata. A diferencia de lo que ocurre hoy, cuando reciben el precio de mercado en cada franja horaria, ingresar¨ªan una cantidad previamente fijado por el volumen de energ¨ªa que vendan y una prima por estar disponible en ese momento en el que hacen falta.

?Adi¨®s al sistema marginalista?

De cuajar esta propuesta, el actual esquema marginalista ¡ªen el que el precio de la luz queda fijado por la tecnolog¨ªa m¨¢s cara de generaci¨®n en cada tramo horario¡ª se ver¨ªa, as¨ª, superado por otro en el que prevalecen los costes medios de cada tecnolog¨ªa. ¡°El mercado de corto plazo no dejar¨ªa de ser marginalista, pero pasar¨ªa a ser completamente secundario, mucho menos importante¡±, explica Luis Atienza, expresidente de Red El¨¦ctrica de Espa?a (REE) y una de las voces m¨¢s respetadas en el panorama energ¨¦tico espa?ol. ¡°Se convertir¨ªa poco m¨¢s que en un elemento de ajuste del coste de la energ¨ªa: el grueso del coste de la energ¨ªa quedar¨ªa fijado por contratos a largo plazo¡±.

En este sentido, Natalia Fabra, catedr¨¢tica en el Departamento de Econom¨ªa de la Universidad Carlos III de Madrid y asesora del Gobierno en la reforma del mercado el¨¦ctrico, defiende que la propuesta espa?ola conseguir¨¢ que los consumidores se beneficien del mayor peso de las renovables gracias a su menor coste y a la reducci¨®n del impacto del gas. ¡°El mercado diario a corto plazo va a seguir siendo importante para asegurar la eficiencia en la producci¨®n, pero ya no va a ser el ¨²nico determinante del precio que al final acaba pagando el consumidor o recibiendo las empresas¡±, explica.

Mientras, la proliferaci¨®n de contratos de compra de energ¨ªa a plazo, ¡°preferiblemente subastados por el regulador¡±, dar¨¢ estabilidad y previsibilidad a hogares y compa?¨ªas generadoras. La economista considera que esta f¨®rmula ser¨¢ cada vez m¨¢s atractiva para un nuevo creciente de empresas de renovables que ¡°se beneficiar¨¢n de no tener incertidumbre en el precio, lo que les dificulta el acceso y coste de la financiaci¨®n¡±, a?ade. Una ventaja, a su juicio, fundamental.

La reforma del mercado el¨¦ctrico es uno de los grandes retos inmediatos de la UE, que ha visto c¨®mo la crisis energ¨¦tica ha tenido un efecto devastador para la econom¨ªa. Tras varios retrasos, Bruselas tiene previsto difundir sus propuestas antes de finales de marzo. Una suerte de aperitivo para el debate entre capitales, del que saldr¨¢ el texto definitivo y que tendr¨¢ lugar en primavera.

La discusi¨®n promete ser intrincada, con un centro y norte de la Uni¨®n ¡ªcapitaneado por Alemania y Holanda¡ª siempre renuentes a introducir muchos cambios, y un sur ¡ªcon Espa?a y Francia al frente¡ª mucho m¨¢s favorable a aplicar algo m¨¢s que un simple lavado de cara y que se siente respaldado por la reciente crisis de precios, que ha dado alas a quienes abogan por un nuevo sistema de precios. Si no hay un acuerdo en el primer semestre del a?o, el Gobierno de coalici¨®n marcar¨¢ este tema como prioritario durante la presidencia espa?ola de la UE, en el segundo semestre de 2023. En ese periodo, conf¨ªan, sus tesis tendr¨¢n m¨¢s predicamento entre los Veintisiete.

Objetivo: fijar posici¨®n en el debate europeo

En ese contexto se enmarca la propuesta espa?ola dada a conocer este martes, con la que pretende fijar posici¨®n antes incluso de que se pronuncie el Ejecutivo comunitario. En paralelo, y para garantizarse una protecci¨®n hasta el momento en que entre en vigor las nuevas reglas de funcionamiento de los mercados el¨¦ctricos europeos, el Gobierno pedir¨¢ a Bruselas que le permita mantener hasta finales de 2024 la llamada excepci¨®n ib¨¦rica, una medida excepcional que entr¨® en vigor en junio y que trata de evitar que el alto precio del gas contagie a la electricidad. Este sistema, temporal y extraordinario, ha permitido una importante rebaja en la factura de la luz en comparaci¨®n con lo que habr¨ªa ocurrido sin su entrada en vigor. El problema es que expira en menos de cuatro meses: el pr¨®ximo 31 de mayo.

Una de las claves del dise?o esbozado por el Ministerio de Transici¨®n Ecol¨®gica est¨¢ en evitar que el precio del gas se contagie al resto de la energ¨ªa y empezar a remunerar a cada fuente en funci¨®n de sus costes de generaci¨®n. El sistema actual de formaci¨®n de precios, sin embargo, es marginalista y hace que la ¨²ltima tecnolog¨ªa que se incorpora en el mercado para generar electricidad a diario marque el precio del 100% de la energ¨ªa. Cuando esa tecnolog¨ªa es el gas, algo muy habitual, ¨¦ste impacta de forma extraordinaria en el conjunto del mercado.

¡°El problema fundamental del sistema actual no es que sea o no marginalista: el problema es que apenas hay un mercado de largo plazo desarrollado y que el mercado mayorista de corto plazo es el que fija el precio, con much¨ªsima volatilidad¡±, explica un experto en regulaci¨®n del mercado el¨¦ctrico bajo condici¨®n de anonimato. ¡°No s¨¦ si esta es la v¨ªa, pero lo que tengo claro es que hay que conseguir como sea que los desarrolladores firmen contratos a largo plazo y que vendan mucha menos energ¨ªa directamente a mercado, por el bien de los consumidores¡±.

Mayor peso de las renovables

¡°El modelo actual no est¨¢ en condiciones de aguantar un estr¨¦s como el de ahora ni, probablemente, sirva como modelo de futuro¡±, ha dicho la vicepresidenta tercera y ministra para la Transici¨®n Ecol¨®gica, Teresa Ribera, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes. La ¨²ltima referencia es clave: a medida que las renovables van ganando peso en la matriz de generaci¨®n, crecen tambi¨¦n las voces del sector que abogan por un sistema de retribuci¨®n m¨¢s estable, en el que se evite la enorme oscilaci¨®n entre precios pr¨¢cticamente cero y m¨¢ximos hist¨®ricos. Una volatilidad que ha quedado especialmente patente en los ¨²ltimos tiempos y que a largo plazo no beneficia a nadie: ni a los consumidores, que se ven sometidos a picos y valles de precios; ni a los generadores, que buscan, ante todo, ingresos predecibles a largo plazo y no constantes dientes de sierra en su retribuci¨®n.

El mercado el¨¦ctrico actual se dise?¨® hace dos d¨¦cadas y ha quedado obsoleto, seg¨²n el Gobierno, porque no recoge de forma adecuada la profunda transformaci¨®n acontecida desde entonces. La solar, la e¨®lica y el resto de fuentes renovables sumaban apenas el 10% de la producci¨®n el¨¦ctrica en 1998. Hoy rondan el 50%, y las previsiones oficiales apuntan a un 74% en 2030. Una meta que, salvo giro inesperado, se cumplir¨¢ bastante antes.