Cos, el rigor europeo y solidario
La traza del gobernador y de su equipo en el Banco de Espa?a ha impregnado en todo o en parte momentos clave del Banco Central Europeo
Un joven rebelde. Un amante del ca?¨®n Berta de la paz. Un viajante hacia todos los vermeer que desconoce. Un partidario de escuchar m¨¢s que de hablar. Un tipo a quien el jueves le homenajearon sus solemnes colegas del BCE, al despedirse de Fr¨¢ncfort, con una camiseta de su club (el Atl¨¦tico de Madrid) firmada por todos. Alguien as¨ª tiene alma. Pablo Hern¨¢ndez de Cos no es un tecn¨®crata cualquiera.
Sab¨ªa de n¨²meros y arrib¨® al servicio de estudios del Ba...
Un joven rebelde. Un amante del ca?¨®n Berta de la paz. Un viajante hacia todos los vermeer que desconoce. Un partidario de escuchar m¨¢s que de hablar. Un tipo a quien el jueves le homenajearon sus solemnes colegas del BCE, al despedirse de Fr¨¢ncfort, con una camiseta de su club (el Atl¨¦tico de Madrid) firmada por todos. Alguien as¨ª tiene alma. Pablo Hern¨¢ndez de Cos no es un tecn¨®crata cualquiera.
Sab¨ªa de n¨²meros y arrib¨® al servicio de estudios del Banco de Espa?a, una joya intelectual creada bajo la dictadura por el sabio republicano Joan Sard¨¤. Empoll¨® pol¨ªtica monetaria real. Y le toc¨® ejercer como gobernador del Banco de Espa?a por h¨¢bil decisi¨®n de un solvente, aunque breve, ministro del PP, Rom¨¢n Escolano.
En su sexenio pleno de Fr¨¢ncfort ¡ªy en los a?os previos¡ª Cos ha consagrado el prestigio internacional de su entidad. Considerado como el delf¨ªn de Mario Draghi, fue su discreto ariete en pro de la pol¨ªtica monetaria expansiva (riego de liquidez, compra de bonos contra la crisis) convenciendo con dominio t¨¦cnico a m¨¢s de un halc¨®n.
Y ha desplegado gran activismo apoyando a la inicialmente dubitativa Christine Lagarde y modulando su posterior af¨¢n restrictivo. Muchas veces, en complicidad con otros palomas moderados, el irland¨¦s y economista-jefe Philip Lane, el gobernador franc¨¦s Fran?ois Villeroy, los portugueses Carlos Costa y M¨¢rio Centeno. Moralmente cerca, pero en versi¨®n de rigor t¨¦cnico inatacable, de griegos e italianos, esos palomas impetuosos.
La traza de Cos, y de su equipo en el BdE, que encabez¨® ?scar Arce, ha impregnado en todo o en parte momentos clave del BCE. El 20 de marzo de 2020 ayud¨® a la jefa reci¨¦n estrenada a enmendar su infeliz frase en el inicio de la pandemia ¡ª¡±no estamos aqu¨ª para reducir las primas de riesgo¡±¡ª que provoc¨® una tormenta, resuelta con sus precisiones y las de Lane y Villeroy.
Con desenlace ejemplar: el Programa de compras pand¨¦micas (PEPP, por sus siglas en ingl¨¦s) se multiplic¨® en una semana de 120.000 millones a 750.000 millones, y a¨²n se ampli¨® luego en otros 600.000. Un total de 1,35 billones de euros, que sumados al plan fiscal Next Generation, salvaron a la UE de la par¨¢lisis econ¨®mica.
Y de la brecha Norte-Sur: la introducci¨®n del principio de ¡°flexibilidad¡± entre ¡°jurisidicciones¡± ayud¨® a las nacionales en funci¨®n de sus necesidades (m¨¢s apoyo para vulnerables que para s¨®lidas) en vez de repartirlas seg¨²n la consabida clave de su cuota de capital. ?El principio de la cohesi¨®n solidaria en pol¨ªtica monetaria! Pero vehiculado apelando a la necesaria estabilidad financiera que evitase turbulencias para todos. El BdE contribuy¨® con varios papers, demostrando que eso era m¨¢s eficiente. Desembolsar gota a gota solo lo imprescindible es m¨¢s barato que regar a granel.
El siguiente hito clave fue la nueva Estrategia monetaria (8/7/2021), menos restrictiva: fij¨® el objetivo de inflaci¨®n en el 2% ¡°a medio plazo¡± (en vez del r¨ªgido ¡°por debajo del 2%¡±), pero de forma ¡°sim¨¦trica¡±, tolerando desviaciones tanto por arriba (lo nunca asumido) como por abajo (lo ortodoxo habitual) e inaugurando su implicaci¨®n en la lucha contra el cambio clim¨¢tico. Por desgracia, algunos la ignoran.
Y despu¨¦s, la decisiva condici¨®n sine qua non para aceptar el 21 de julio de 2022 el inicio de la secuencia de alzas de tipos de inter¨¦s: la creaci¨®n del Instrumento para la Protecci¨®n de la Transmisi¨®n de la pol¨ªtica monetaria. Dar¨ªa barra libre, si conven¨ªa, a deudas p¨²blicas nacionales asediadas por los mercados. Impulsado por Fabio Panetta y secundado por Cos, ha sido tan eficaz en evitar la fragmentaci¨®n del euro que permanece virgen, como las OMT de 2012 que concretaron la frase m¨¢gica de Draghi: ¡°El BCE har¨¢ todo lo que sea necesario, y cr¨¦anme, ser¨¢ suficiente¡±.
Despu¨¦s, Cos ha peleado por suavizar el ritmo restrictivo, y adelantar las reducciones de tipos de inter¨¦s. Se despide culminando la primera de ellas.
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