Casi ocho de cada diez beneficiarios potenciales del bono social el¨¦ctrico no lo reciben
Un tercio de los hogares acogidos a ¨¦l no es de renta baja, en su mayor¨ªa familias numerosas. Solo el 9% de los jubilados con pensi¨®n m¨ªnima obtiene este descuento
Una buena herramienta, pero mucho ¡ªmuch¨ªsimo¡ª menos efectiva de lo deseable: casi ocho de cada diez beneficiarios potenciales del bono social el¨¦ctrico no lo recibe. Una tasa de cobertura que, aunque ha crecido en los tres ¨²ltimos a?os, es particularmente peque?a en los hogares de renta baja (los m¨¢s necesitados, donde ronda el 20%) y sube con fuerza en el caso de las familias numerosas, algunas de ellas de renta media o media-alta. As¨ª se desprende de un monogr¨¢fico publicado este jueves por EsadeEcPol y la ONG Oxfam Interm¨®n, seg¨²n el cual cerca de la mitad (el 45,5%) de las unidades familiares con tres o m¨¢s hijos recibieron este descuento en su recibo, con una prevalencia superior en las de ingresos medios o altas que en las que menos ganan.
¡°Una buena parte de los que s¨ª se benefician de ¨¦l no son familias vulnerables¡±, se lee en el informe que firman Natalia Collado Van-Baumberghen y ?ngel Mart¨ªnez Jorge, y que pide una reforma de esta herramienta con tres pilares: que se centre m¨¢s en las familias vulnerables, que el peso de la solicitud se traslade m¨¢s a la Administraci¨®n que al perceptor potencial y que se armonice de forma ¡°efectiva¡± con otras ayudas p¨²blicas. Seg¨²n sus cifras, la tercera parte de los perceptores no son de renta baja. ¡°De hecho, entre los hogares de familia numerosa de ingreso medio-alto, m¨¢s del 60% recibe el bono frente al 40% de los de ingreso bajo¡±, apuntan.
Asimetr¨ªas por hogares
Ser familia numerosa tiene, seg¨²n el estudio, el mayor efecto positivo sobre la probabilidad de recibir el bono social el¨¦ctrico: aumenta en un 27% las opciones de acogerse exitosamente a ¨¦l. Pertenecer al colectivo de renta baja, en cambio, solo las eleva en un magro 4%. En sentido contrario, ser de origen extranjero ¡ªun factor que aumenta la incidencia de la pobreza energ¨¦tica¡ª reduce la probabilidad de lograrlo: las familias con al menos un miembro nacido fuera de Espa?a tienen un 12% menos probabilidad de recibirlo. Tambi¨¦n los hogares monoparentales tienen una tasa de cobertura menor que el resto (tres puntos porcentuales menos), a pesar de que tanto el propio bono social el¨¦ctrico como la evidencia emp¨ªrica reconocen su mayor vulnerabilidad.
El r¨¦gimen de tenencia de la vivienda y el lugar de residencia incide, igualmente, en la probabilidad de acogerse a este descuento en la factura de la luz. Pese a la ¡°significativa¡± correlaci¨®n entre vivir en propiedad y los ingresos ¡ªa m¨¢s altos, m¨¢s probable es residir en una vivienda adquirida y no de alquiler¡ª, la tasa de cobertura del bono social es casi nueve puntos menor en quienes viven de alquiler (17,4% frente a 26%).
Pobreza energ¨¦tica
Tal como est¨¢ dise?ado desde 2017, para recibir el bono social un hogar tiene que tener una renta m¨¢xima de 8.106 euros, ser familia numerosa o estar formado por jubilados que reciban la pensi¨®n m¨ªnima y que no reciban ingresos adicionales de m¨¢s de 500 euros anuales. La potencia contratada no puede superar los 10 kilovatios (KW), mucho m¨¢s de lo necesario en el hogar promedio, y estar en el mercado regulado, en el que el precio de la luz var¨ªa hora tras hora y en el que el margen de ganancia de las el¨¦ctricas est¨¢ fijado por ley. En abril del a?o pasado, este descuento ¡ªfluct¨²a entre el 25% y el 40%, seg¨²n las caracter¨ªsticas del hogar y su grado de vulnerabilidad, aunque puede alcanzar el 100% en el caso de las familias en riesgo de exclusi¨®n social¡ª la recib¨ªan un total de 1,45 millones de unidades familiares.
En 2023, seg¨²n las cifras de la oficina estad¨ªstica comunitaria (Eurostat), casi la quinta parte de los hogares no pudo mantener una temperatura adecuada en su hogar. Es el mayor porcentaje de toda la UE, junto con la vecina Portugal, y sit¨²a a Espa?a en el grupo de pa¨ªses donde m¨¢s ha aumentado la pobreza energ¨¦tica.
A eso se suma, como recuerdan los investigadores de EsadeEcPol, que una de cada diez unidades familiares incurrieron en alg¨²n retraso en el pago de sus facturas y que el n¨²mero de viviendas que consumen menos energ¨ªa de la requerida por no disponer de suficientes recursos econ¨®micos ¡ªla llamada ¡°pobreza energ¨¦tica oculta¡±¡ª se duplic¨® entre 2020 (el a?o de la pandemia) y 2022 (el de la crisis energ¨¦tica y el ¨²ltimo que contempla el estudio).
Propuestas de reforma
El estudio propone tres medidas de aplicaci¨®n inmediata para mejorar el dise?o del bono social: que sea la Administraci¨®n la que se coordine con las el¨¦ctricas para identificar qu¨¦ hogares son susceptibles de recibirlo, en base a las bases de datos de Hacienda y de la Seguridad Social; que se agilice su concesi¨®n a quienes reciben el Ingreso M¨ªnimo Vital (IMV, el ¨²ltimo salvavidas frente a la pobreza m¨¢s aguda) y que se introduzca un tope m¨¢ximo de renta para las familias numerosas que quieran acogerse a ¨¦l, ¡°definido de manera que solo excluya a los hogares que claramente no necesitan de ning¨²n apoyo monetario¡±. Es decir, para aquellas de ingresos altos.
El Gobierno, por boca de la vicepresidenta tercera y ministra para la Transici¨®n Ecol¨®gica y el Reto Demogr¨¢fico, Teresa Ribera, anunci¨® en marzo del a?o pasado la introducci¨®n de criterios de renta para la concesi¨®n del bono social a las familias numerosas. Sus palabras, sin embargo, no han cristalizado en hechos.
En un horizonte m¨¢s amplio, el estudio del centro de estudios de la escuela de negocios Esade y Oxfam Interm¨®n aboga por el uso de pol¨ªticas fiscales ¡°m¨¢s efectivas y unificadas¡±, como impuestos negativos sobre la renta, ¡°que permitan abordar las situaciones de pobreza de forma integral, con informaci¨®n fiable y menos tr¨¢mites administrativos¡±. Y llama a las Administraciones a ¡°salir a buscar¡± a los hogares vulnerables que podr¨ªan beneficiarse de ayudas para mejorar la eficiencia energ¨¦tica de su casa (rehabilitaci¨®n, mejora del aislamiento, instalaci¨®n de renovables...), as¨ª como enfocar los recursos disponibles en los hogares con menor renta. ¡°Esto permitir¨ªa no solamente responder al reto de la pobreza energ¨¦tica, sino tambi¨¦n a los objetivos de descarbonizaci¨®n¡±, exponen.
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