Las empresas espa?olas ante el enigma Trump

Donald Trump inici¨® ayer oficialmente su nuevo mandato. Las pol¨ªticas que adopte el 47? presidente de EE UU condicionar¨¢n en gran medida la evoluci¨®n de la actividad econ¨®mica mundial en 2025, incluida la de Espa?a. Trump lleva meses hablando de sus intenciones en diversas materias, entre ellas, la econom¨ªa, y ha anunciado que utilizar¨¢ los aranceles como herramienta de presi¨®n para negociar con socios comerciales como Canad¨¢, M¨¦xico y la Uni¨®n Europa (UE). Mario Gonz¨¢lez Garc¨ªa, consultor jefe de Banco Sabadell en Miami, estima que se avecinan cambios sustanciales en el ¨¢mbito de los negocios respecto a pol¨ªtica fiscal, normativa empresarial y comercio internacional. Gonz¨¢lez Garc¨ªa ser¨¢ uno de los ponentes que participar¨¢n en el webinar Estados Unidos: visi¨®n post elecciones 2024, de Banco Sabadell.

El debate sobre el futuro de las relaciones comerciales entre Espa?a y Estados Unidos es ahora urgente para intentar conocer c¨®mo las pol¨ªticas de Trump afectar¨¢n a los exportadores espa?oles o a las firmas que est¨¢n afincadas en el principal mercado del mundo. Manuel Corrales, profesor de Econom¨ªa y Empresa en la Universidad Europea de Madrid, cree que aunque muchas de las propuestas que lanz¨® Trump en su anterior mandato (entre 2016 y 2019) se quedaron en meros anuncios, en esta ocasi¨®n es diferente, pues el presidente cuenta, al menos hasta 2026, con la mayor¨ªa en el Congreso.

Aranceles como moneda de cambio

Pocos d¨ªas despu¨¦s de ganar las elecciones, Trump amenaz¨® a M¨¦xico y a Canad¨¢, pa¨ªses con los que mantiene un tratado de libre comercio, con imponer a sus productos aranceles del 25%. Y a China, a quien considera un competidor y que es el segundo pa¨ªs del que m¨¢s importa, con tasas de hasta del 40%. Tambi¨¦n ha anunciado un arancel general de entre el 10% y el 20%, que, de confirmarse, afectar¨ªa a las importaciones procedentes de la Uni¨®n Europea (UE) y, en consecuencia, a las espa?olas, si Bruselas no aumenta la compra de gas y petr¨®leo a EEUU.

Corrales, de la Universidad Europea, avisa que el incremento de estas tasas llevar¨ªa a una espiral de guerra comercial intensa entre pa¨ªses. ¡°Y, por tanto, supondr¨ªa un deterioro del libre comercio y de las expectativas de las empresas europeas, y como resultado, de las espa?olas¡±, explica.

Estos aranceles colocar¨ªan un palo en la rueda del crecimiento de las econom¨ªas europeas. Las empresas exportadoras ser¨ªan las m¨¢s perjudicadas, especialmente las de los sectores automovil¨ªstico, aeron¨¢utico, de las energ¨ªas renovables y hortofrut¨ªcola, los que tienen mayor vinculaci¨®n con EEUU. Trump, se?ala Corrales, no utiliza estos aranceles para conseguir rebajas en los precios de sus importaciones, sino como herramienta de negociaci¨®n y palanca de presi¨®n en otros ¨¢mbitos.

Durante su anterior mandato, Trump ya impuso aranceles a productos de la UE, despu¨¦s de que la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC) declarara que la UE concedi¨® ayudas ilegales a la empresa aeron¨¢utica europea Airbus, relata Juan Carlos Pereira, director de la C¨¢mara de Comercio de Espa?a en Estados Unidos (EE UU). Entonces, la Administraci¨®n estadounidense elabor¨® un listado de bienes de ciertos pa¨ªses europeos que pasar¨ªan a tener un recargo del 25%. Entre ellos, el aceite de oliva y las aceitunas espa?olas, cuyas exportaciones a ese pa¨ªs cayeron entre 2019 y 2020, de acuerdo con el Instituto de Comercio Exterior (ICEX Espa?a Exportaci¨®n e Inversiones).

Los productores y distribuidores espa?oles de aceituna negra y aceite, explica Corrales, intentaron compensar sus p¨¦rdidas buscando mercados alternativos, como los de Am¨¦rica Latina, Oriente Medio y Asia.

Gonz¨¢lez Garc¨ªa, de Banco Sabadell, se?ala que, si bien se espera que sectores como los fabricantes de veh¨ªculos y los productos qu¨ªmicos sean los m¨¢s afectados, se teme que la industria de aceite de oliva pueda sufrir de nuevo un golpe. En EEUU, un aumento de los aranceles, explica Corrales, puede llevar a una subida de los precios y a una nueva crisis inflacionaria, que generar¨ªa una p¨¦rdida de poder de compra de los estadounidenses, por lo que Trump tendr¨¢ que jugar sus cartas para encontrar un equilibrio entre ambos factores, explica Corrales.

El Banco de Espa?a ha simulado el impacto que la pol¨ªtica arancelaria tendr¨ªa en la econom¨ªa estadounidense y ha determinado que la inflaci¨®n corre el riesgo de subir entre 0,6 y 1,6 puntos m¨¢s de lo previsto y su Producto Interior Bruto (PIB) crecer¨ªa entre 0,4 y 1,2 puntos menos en 2025. De acuerdo con la previsi¨®n de la instituci¨®n, el impacto de estas pol¨ªticas en Espa?a har¨ªa subir una d¨¦cima la inflaci¨®n, que estima en un 2,1%, y rebajar¨ªa una d¨¦cima las previsiones de crecimiento, fijado en un 2,5 por el Gobierno.

Oportunidades de negocio

El mercado estadounidense siempre ha ofrecido multitud de atractivos para las empresas espa?olas. Es uno de los m¨¢s grandes del mundo, con m¨¢s de 330 millones de potenciales consumidores que, adem¨¢s, cuentan con un alto poder de compra, explica Pereira, de la C¨¢mara de Comercio. Por eso, es uno de los destinos elegidos por muchas empresas nacionales. ¡°El inter¨¦s por acceder a este mercado es constante y solo se vio ralentizado por la incertidumbre de las elecciones. Pero, una vez conocido el resultado, ha recuperado el ritmo. Se est¨¢n cerrando muchos proyectos que estaban en pausa¡±, resume el director.

Pereira explica que han detectado que muchas empresas se han interesado en entrar en Estados Unidos a partir del resultado electoral, pues esperan que el entorno empresarial ser¨¢ m¨¢s amigable para las compa?¨ªas. Gonz¨¢lez Garc¨ªa, de Banco Sabadell, explica que Trump ha prometido bajar el impuesto corporativo por debajo del 21%. Y, como el pol¨ªtico anunci¨® a principios de noviembre en el Club Econ¨®mico de Nueva York, ser¨¢ del 15% para las empresas que fabriquen sus productos en EE UU. Si lo cumple, puntualiza Pereira, ¡°ser¨¢ muy atractivo para ese tipo de compa?¨ªas¡±.

Las empresas espa?olas que solo exportan a Estados Unidos se ver¨¢n perjudicadas por los aranceles, en caso de que lleguen a establecerse. Mientras que las nacionales que ya est¨¢n afincadas en el pa¨ªs norteamericano o planeen hacerlo saldr¨¢n beneficiadas. ¡°Por las informaciones que ha dejado Trump, dar¨¢ prioridad a los productos fabricados en EEUU, por lo que si soy un fabricante espa?ol cuyo destino final es ese pa¨ªs me va a convenir fabricar all¨ª, pues no habr¨¢ coto para ello. De hecho, hemos comprobado un aumento significativo en el inter¨¦s de las empresas espa?olas en instalarse aqu¨ª¡±, explica.

?Qu¨¦ har¨¢ falta en 2025 para acceder al mercado estadounidense?

Los requisitos para iniciar cualquier negocio en EEUU no van a cambiar, por el momento, con la llegada de Trump, con la salvedad de los aranceles. Pereira destaca que en un mercado con tanta oferta es esencial que el producto o el servicio que se quiere introducir aporte alguna ventaja sobre sus competidores. ¡°Si no, tiene poco sentido traerlo porque es un mercado muy saturado¡±, explica. El empresario ha de tener en cuenta que el comienzo ser¨¢ duro y largo por lo que deber¨¢ armarse de paciencia, y preparar un presupuesto lo suficientemente abultado para aguantar, al menos, uno o dos a?os. ¡°Durante el primero tendr¨¢ que cultivar relaciones, ganarse la confianza de los potenciales clientes y socios comerciales¡±. Ha de asumir, resume Pereira, que no va a obtener resultados inmediatamente, sobre todo si, como ha avisado Trump, se da prioridad a las empresas que produzcan en el pa¨ªs, lo que requiere muchos m¨¢s recursos y tiempo que si solo se exporta desde Espa?a.