?C¨®mo sentirse motivado en el trabajo en la nueva normalidad?

Ning¨²n trabajador de ning¨²n sector se ha librado de cambios en su actividad profesional como consecuencia de la crisis del coronavirus. La adopci¨®n de medidas sanitarias, la ca¨ªda de las ventas, la implantaci¨®n del teletrabajo o el aumento de la carga de tareas, entre otros, son algunos de los escollos que han tenido (y tienen) que superar. Estos acontecimientos, unidos a la incertidumbre sobre el futuro de la econom¨ªa, ponen en la cuerda floja la motivaci¨®n de los empleados, uno de los pilares en el funcionamiento de cualquier empresa.

Seg¨²n el informe de Adecco Resetting: redefiniendo la nueva era del trabajo, el 53% de los trabajadores espa?oles asegura que no ha perdido el ¨¢nimo durante la crisis del coronavirus. Aunque es un dato optimista, a¨²n hay casi otra mitad de profesionales en activo que no se manifiesta tan motivados, y eso es una raz¨®n para alarmarse. ¡°Implementar pol¨ªticas de motivaci¨®n en las empresas puede tener grandes beneficios y, en estos meses de inestabilidad, puede convertirse en algo que haga que todos remen en la misma direcci¨®n¡±, afirma Mayte Tortosa, fundadora de YuCoach, plataforma de coaching profesional.

Un trabajador motivado aumenta su rendimiento y, por tanto, su productividad y es capaz de aportar nuevas ideas. Adem¨¢s, se siente bien, lo que refuerza su deseo de continuar en la compa?¨ªa. Una pol¨ªtica empresarial a favor del empleado y de su motivaci¨®n es la mejor forma de retener el talento. Para lograrlo, los expertos proponen abrir espacios para la comunicaci¨®n y la expresi¨®n de las emociones, flexibilizar los horarios y los turnos para facilitar la conciliaci¨®n, fomentar la cohesi¨®n y ofrecer incentivos al margen del salario.

Gestionar las emociones

Ahora que buena parte de los profesionales sigue trabajando desde casa, es necesario que los responsables de las empresas est¨¦n especialmente receptivos para detectar si alguien est¨¢ pasando por una mala etapa o tiene problemas. ¡°Si esto ocurre, no est¨¢ de m¨¢s recopilar datos sobre esa persona e informarse de su situaci¨®n para saber qu¨¦ puede pasar¡±, expone Tortosa. Para Jon Segovia, profesor de Deusto Business School, emoci¨®n y motivaci¨®n van de la mano. ¡°Dejemos de preguntar a los empleados c¨®mo est¨¢n, que es una pregunta cerrada, y pasemos a interesarnos por c¨®mo se sienten, que es una pregunta abierta. Esto supone un cambio espectacular en la relaci¨®n. Escuchar es motivar¡±.

Es importante renovar el salario emocional, una remuneraci¨®n que se nutre de retribuciones no econ¨®micas, como la confianza, el respeto o la consideraci¨®n, entre otras. Su fin es mejorar la calidad de vida del empleado. ¡°La situaci¨®n ha cambiado y las prioridades, tambi¨¦n. Es el momento de revisarlo¡±, apunta Mayte Tortosa. Ofrecer formaci¨®n, ayudar a conciliar la vida familiar y reconocer los logros son pautas que contribuyen.

Desarrollar pol¨ªticas flexibles

Que los empleados cuenten con diferentes opciones a la hora de desempe?ar sus funciones reduce el absentismo. En esta situaci¨®n, las organizaciones deben implantar nuevos modelos de trabajo, si no lo han hecho ya, como, por ejemplo, los que dan importancia al logro de objetivos antes que al presentismo.

¡°Es clave gestionar desde valores, objetivos y confianza y no desde horarios o tareas¡±, corrobora Andr¨¦s Raya, colaborador acad¨¦mico del Departamento de Direcci¨®n de Personas y Organizaci¨®n de la escuela de negocios Esade.

¡°Tambi¨¦n funciona flexibilizar los horarios de entrada o salida, eliminar burocracias y respetar la desconexi¨®n digital¡±, a?ade Tortosa. Este tipo de desconexi¨®n consiste en no responder a cuestiones laborales a trav¨¦s del m¨®vil o el correo electr¨®nico una vez que se ha terminado la jornada laboral. Un fen¨®meno que se regul¨® en Espa?a por primera vez en 2018.

La conciliaci¨®n entre la vida personal y la profesional es otro de los pilares que sustentan la motivaci¨®n. Durante los ¨²ltimos meses, han surgido situaciones que pueden conducir a la desmotivaci¨®n, como trabajar al mismo tiempo que se cuida de los hijos o de personas dependientes. En estos casos, la flexibilidad de horarios ayuda a que los trabajadores se organicen seg¨²n sus obligaciones.

La posibilidad de facilitar servicios de guarder¨ªa cerca de las oficinas es una tendencia al alza. En tiempos de teletrabajo, existen aplicaciones que, de alguna manera, pueden suplir circunstancialmente la funci¨®n de los centros infantiles, como Nannyfy, un servicio que conecta por videollamada a canguros con familias y que ofrece a los menores clases a distancia de yoga, guitarra, canto, dibujo o matem¨¢ticas, entre otras.

Mejorar el espacio de trabajo

Es imprescindible crear un buen entorno laboral, tanto en los centros como en el hogar. En las oficinas conviene respetar al m¨¢ximo la seguridad y la comodidad de los empleados. Especialmente, es necesario implementar las medidas de prevenci¨®n sanitarias con firmeza para que desplazarse hasta el lugar de trabajo y relacionarse con los compa?eros no haga sentir a los empleados que est¨¢n poniendo en riesgo su salud.

Para los que teletrabajan, se ha vuelto b¨¢sico facilitar elementos de ayuda como una silla ergon¨®mica o un equipo inform¨¢tico adaptado.

Fomentar la comunicaci¨®n

El intercambio de informaci¨®n de la direcci¨®n con los empleados, los proveedores y los socios es clave en estos momentos de incertidumbre en los que hay en marcha expedientes de regulaci¨®n temporal de empleo (ERTE) y planea la sombra de los expedientes de regulaci¨®n de empleo (ERE).

Cuando se trabaja en remoto se pasa mucho tiempo aislado y esto puede crear cierto vac¨ªo de informaci¨®n. ¡°Es necesario crear procesos ¨Creuniones virtuales o presenciales si son posibles¨C para que toda la plantilla se sienta igual de atendida, se est¨¦ en la oficina o en casa, y as¨ª evitar rumores. Se impone explicar peri¨®dicamente d¨®nde estamos y a d¨®nde vamos¡±, asevera Andr¨¦s Raya. La transparencia y la empat¨ªa son aspectos clave para que esta comunicaci¨®n fluya.

Ofrecer incentivos

En las ¨²ltimas d¨¦cadas el concepto de incentivo no econ¨®mico como reconocimiento ha ganado importancia por su relaci¨®n directa con el incremento de la productividad. Es el caso de la retribuci¨®n flexible, un tipo de pago en especie. Se trata de productos y servicios que contrata la empresa para sus empleados a mejor precio que el de mercado al hacerlo de manera colectiva. Suponen, a la vez, un ahorro para el trabajador y una reducci¨®n en los impuestos que debe pagar. Por ejemplo, si la empresa contrata los servicios de un seguro m¨¦dico para buena parte de su personal, podr¨¢ negociar un mejor precio que si cada empleado lo hace individualmente. Al tomarse de su salario, este se reduce ligeramente y, por tanto, se rebaja tambi¨¦n el IRPF que debe pagar.

Las perspectivas de promoci¨®n tambi¨¦n funcionan. Por eso, muchas empresas establecen programas en los que se eval¨²a peri¨®dicamente la labor del empleado para ascenderlo dentro de la compa?¨ªa. ¡°Valorar las tareas que est¨¢ haciendo para que el trabajador se sienta importante es la mejor motivaci¨®n¡±, apunta Jon Segovia.

Organizar (y mantener) h¨¢bitos

Cuando todos los empleados trabajan de forma presencial es habitual que se generen reuniones espont¨¢neas. Sin embargo, los turnos de trabajo en las oficinas para evitar que todo el personal coincida en los centros laborales y el teletrabajo imposibilitan las relaciones personales y naturales entre compa?eros.

Por ello, es necesario crear momentos, aunque sea de manera virtual, que faciliten las conexiones informales. ¡°Esos espacios permiten mantener los v¨ªnculos y desconectar unos minutos¡±, asegura Tortosa. ¡°En estas reuniones, que deben celebrarse de forma peri¨®dica¡±, comenta Jon Segovia, ¡°se pueden poner normas como, por ejemplo, prohibir hablar de trabajo¡±.