?Qu¨¦ reclaman los profesionales tras un a?o de teletrabajo?
El n¨²mero de empleados a distancia se ha reducido, pero sigue en cotas m¨¢s altas que antes del estallido de la pandemia. Un a?o despu¨¦s, las organizaciones se plantean nuevos modelos h¨ªbridos que suavicen los problemas que genera
Casi tres millones de trabajadores se conectan desde sus hogares para cumplir con sus tareas laborales cada d¨ªa o de manera ocasional, seg¨²n datos de Adecco Group Institute. Parecen muchos, pero para poder valorar la magnitud real de la cifra hay que compararla con otros pa¨ªses del entorno. Estos casi tres millones de trabajadores representan el 14,5% de los ocupados, lo que deja claro que Espa?a est¨¢ lejos de la media europea, que alcanza el 21,5%. En cambio, aunque en la comparativa Espa?a salga perdiendo, el incremento en el a?o de la pandemia ha sido considerable. Antes del decreto de estado de alarma del 14 de marzo de 2020 este porcentaje no pasaba del 4,8%, casi 10 puntos menos, de acuerdo con las estimaciones del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).
Hoy el balance de la experiencia es positivo para la mitad de los encuestados por el Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas (CIS) en el sondeo Tendencias en la sociedad digital durante la covid. Y solo el 20% lo califica de perjudicial. Los teletrabajadores apuntan como problemas el exceso de horas y la dificultad para desconectar y para conciliar. Precisamente, las ventajas que se esperaban de esta f¨®rmula se han convertido en inconvenientes. Para contrarrestarlos, las compa?¨ªas empiezan a plantear modelos h¨ªbridos que combinan las jornadas presenciales con las conexiones en remoto.
A la cola del teletrabajo en Europa
Espa?a part¨ªa con desventaja respecto a los pa¨ªses de su entorno en cuanto a teletrabajo. En 2019 se situaba a la cola, por detr¨¢s de Alemania, Portugal, Francia y B¨¦lgica y muy lejos de Suecia y Holanda. Solo superaba a Italia. Durante la pandemia, estas diferencias se mantuvieron. De acuerdo con los datos de Adecco Group Institute, Suecia y Holanda siguen a la cabeza con un 40,9% y un 40,1%, respectivamente.
¡°[Antes del estallido de la crisis sanitaria] las grandes empresas hab¨ªan iniciado proyectos o experiencias piloto, pero la implantaci¨®n era minoritaria¡±, afirma Pedro Ribes Preckler, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Direcci¨®n y Desarrollo de Personas (Aedipe). Seg¨²n el informe Un a?o de teletrabajo realizado en Espa?a por la consultora inmobiliaria estadounidense CBRE, antes de la llegada de la covid-19, casi la mitad de los profesionales (46%) nunca hab¨ªa tenido contacto con el modelo de trabajo a distancia y menos de la mitad (39%) lo hab¨ªa experimentado de manera limitada.
Esta falta de experiencia ha pasado factura. ¡°Nos han llevado a un teletrabajo que no es tal porque lo hemos hecho de manera forzada y esto ha generado una visi¨®n distorsionada¡±, explica Guillermo Garc¨ªa, profesor de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social en la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR). Y es que, afirma el experto, no es lo mismo teletrabajar ¡ªdonde prima la flexibilidad y el desempe?o por proyectos¡ª que llevarse la oficina a casa. En marzo de 2020 las empresas tuvieron que improvisar el traslado de la actividad a los hogares para el 34% de los ocupados, de acuerdo con las estimaciones del Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas (Ivie).
¡°[La implantaci¨®n del teletrabajo] requiere de un cambio de prisma¡±, argumenta Garc¨ªa. ¡°Para que se ejecute con eficacia debe haber una labor de sensibilizaci¨®n y de formaci¨®n, tanto para el empleado como para la empresa. Ese cambio supone orientar la actividad hacia el logro de objetivos sin el encorsetamiento del horario y el efecto de calentar la silla a distancia. Si trasladamos el esquema presencial, r¨ªgido, a las formas del teletrabajo, se termina dedicando 12 horas, en vez de ocho, y se pierden ventajas como la flexibilidad y la conciliaci¨®n¡±, sentencia.
El teletrabajo en Europa ¡®versus¡¯ en Espa?a
La regulaci¨®n del teletrabajo es diferente en cada Estado miembro de la Uni¨®n Europea (UE). En Pa¨ªses Bajos, el trabajador y la empresa acuerdan un sistema en el que primen los objetivos y no los horarios; en Portugal, la regulaci¨®n, una de las m¨¢s completas, establece el control obligatorio de las condiciones que deben darse en el hogar, con especial ¨¦nfasis en la prevenci¨®n de riesgos laborales; y en B¨¦lgica, al dictar el confinamiento, se estableci¨® una cantidad econ¨®mica fija como compensaci¨®n para los empleados por los gastos generados al trabajar desde el hogar.
En Espa?a se aprob¨® en septiembre de 2020 la ley del teletrabajo (vigente desde octubre) que se aplica a aquellos empleados que desempe?en, al menos, el 30% de sus horas semanales a distancia durante un trimestre, lo que supone un m¨ªnimo de dos jornadas a la semana. Adem¨¢s de ser voluntario, el acuerdo entre el asalariado y la empresa debe quedar por escrito para que tenga validez. En ¨¦l debe figurar el inventario de equipos y herramientas que utiliza y la manera en que queda registrado el horario. La ley espa?ola deja para el convenio colectivo las decisiones sobre el reparto de los gastos del empleado y la forma de cuantificarlos. Esta ley no se aplica, sin embargo, a quien est¨¢ teletrabajando debido a la pandemia. Estos profesionales seguir¨¢n bajo la normativa ordinaria, pero sus empresas deber¨¢n proporcionarles los medios y los equipos necesarios, aunque no tienen la obligaci¨®n de compensar otros gastos.
?Qu¨¦ demandan los teletrabajadores?
Con el paso del tiempo, las prioridades de los empleados a distancia han cambiado. ¡°Al principio, el objetivo era mantener su actividad y minimizar las consecuencias que la falta de presencialidad pudiera suponer en su trabajo. Al poco tiempo, aument¨® la preocupaci¨®n por separarlo del descanso y la desconexi¨®n¡±, se?ala Joan Pi?ol, psic¨®logo y director general de la Fundaci¨®n Salud y Persona, entidad que presta servicios de atenci¨®n psicol¨®gica en organizaciones.
La UE est¨¢ buscando legislar sobre el derecho a la desconexi¨®n, que se define como el hecho de no realizar actividades o comunicaciones relacionadas con el trabajo por medio de herramientas digitales, directa o indirectamente, fuera del horario laboral. El Parlamento Europeo aprob¨® a principios de febrero una resoluci¨®n al respecto que ahora debe convertir en ley la Comisi¨®n.
En Espa?a existe una ley desde 2018 que garantiza a los trabajadores el derecho de que sus empleadores respeten su descanso, sus permisos y sus vacaciones. Pero su implantaci¨®n a¨²n es minoritaria, ya que gran parte de las empresas no cuenta con mecanismos para aplicarla. El informe del CIS recoge que las horas de m¨¢s se perciben como uno de los aspectos m¨¢s negativos del teletrabajo, mientras que el sondeo de CBRE destaca que el 68% de los encuestados trabaja, de media, una hora m¨¢s al d¨ªa.
La conciliaci¨®n entre el desempe?o profesional y la vida personal se ve comprometida. Y todo ello en el contexto actual de pandemia que est¨¢ provocando un empeoramiento en la salud mental de los trabajadores, seg¨²n los expertos. ¡°Es primordial cuidar de la plantilla porque la har¨¢ m¨¢s competitiva. Solo hay que recordar que las bajas por estr¨¦s, ansiedad o depresi¨®n representan m¨¢s de un 30%¡±, se?ala Pi?ol.
Banco Sabadell ha puesto a disposici¨®n de sus empleados psic¨®logos para afrontar los nuevos escenarios. ¡°De la mano del equipo sanitario de Aspy, contamos con un protocolo de actuaci¨®n para ayudar a nuestros empleados en la gesti¨®n del estr¨¦s emocional que puede provocar esta situaci¨®n. El primer paso es rellenar un cuestionario que permitir¨¢ valorar el grado de estr¨¦s del trabajador o de la trabajadora y, a partir de los resultados, se le llamar¨¢ por tel¨¦fono o videollamada para iniciar la atenci¨®n psicol¨®gica¡±, explica Joan Lluch, director de Prevenci¨®n de Riesgos Laborales de Banco Sabadell.
?Qu¨¦ va a pasar con el teletrabajo?
Ribes Preckler, de Aedipe, cree que el teletrabajo camina hacia un nuevo modelo h¨ªbrido que combinar¨¢ las labores a distancia con la presencialidad. ¡°Pero no ser¨¢ uniforme ni entre sectores ni en las propias empresas porque depender¨¢ de las funciones que se realicen¡±, se?ala.
Esta transformaci¨®n llegar¨¢ antes a los puestos cuyo rendimiento se eval¨²e por objetivos, a?ade. La encuesta The rise of the hybrid workplace (El aumento del lugar de trabajo h¨ªbrido), promovido por la empresa estadounidense de soluciones para videoconferencias Cisco Webex, refleja que los trabajadores apoyan la implantaci¨®n del modelo h¨ªbrido, que reportar¨ªa m¨²ltiples beneficios: facilitar¨ªa la flexibilidad y la conciliaci¨®n y, a la vez, neutralizar¨ªa los problemas derivados de la falta de comunicaci¨®n y de socializaci¨®n con los compa?eros.
Este modelo h¨ªbrido se ver¨¢ beneficiado de otra f¨®rmula que ya han empezado a probar empresas como Amazon, Uber o Apple: las oficinas sat¨¦lites o hub-and-spoke. Este sistema, valorado positivamente por el 62% de los encuestados en el informe de CBRE, permite a las organizaciones mantener una oficina central en paralelo a varias sat¨¦lite dispersas por la ciudad. As¨ª, el trabajador puede elegir d¨®nde trabajar, lo que reduce los tiempos de desplazamiento y a?ade los beneficios de socializar con otros miembros de la organizaci¨®n.