Del aula a la naturaleza: as¨ª comenzar¨¢n 100.000 alumnos de Primaria unas clases con enfoque medioambiental
El proyecto Naturaliza, de Ecoembes, impulsa la educaci¨®n medioambiental en los centros de una manera transversal a sus asignaturas, saliendo al entorno y aprendiendo de ¨¦l
En Pedrosa de Valdeporres (Burgos), Vera de Diego trabaja con un peque?o grupo de 14 alumnos de tres a 12 a?os. Ense?a a los de Infantil y primero y segundo de Primaria, mientras que el interino que cada a?o llega a su escuela (siempre alguien diferente) se ocupa del resto de cursos, hasta sexto. En las aulas del Centro Rural Agrupado Rosa Chacel, utilizar el entorno natural viene de serie: ¡°Inevitablemente tengo que usar el medio, porque me lo est¨¢ dando. En vez de usar el libro para ver el tema de la fotos¨ªntesis, o de la ca¨ªda de las hojas en oto?o, lo trabajas fuera, porque el medio te invita a ello (¡). Las posibilidades de exploraci¨®n, de descubrimiento, de movimiento, de nuevas habilidades... Hay ni?os que, cuando est¨¢n en el aula, se comportan de una forma y fuera de otra. Es muy interesante y muy bonito de ver¡±.
Su centro es uno de los 1.300 colegios de Espa?a que forman parte de la red Naturaliza, una iniciativa de Ecoembes que pretende impulsar la educaci¨®n medioambiental en las escuelas de forma interactiva y transversal a asignaturas como Matem¨¢ticas, Lengua y Literatura, Ciencias Sociales y, por supuesto, Ciencias de la Naturaleza. En este comienzo de curso, son ya 2.200 docentes los que se han formado a trav¨¦s de su plataforma, y unos 100.000 los ni?os y ni?as que, gracias a ello, aprender¨¢n sobre aspectos tan importantes como la sequ¨ªa, la biodiversidad, la deforestaci¨®n, el cambio clim¨¢tico, la contaminaci¨®n o la basuraleza.
¡°Se trata de introducir el medio ambiente en las aulas, pero tambi¨¦n de sacar las aulas al medio ambiente, de una manera bidireccional. [Cuando comenzamos] nos encontramos con ni?os que estaban muy poco naturalizados: muy tecnol¨®gicos, s¨ª, con mucho idioma, pero medioambientalmente hu¨¦rfanos en much¨ªsimos colegios de Espa?a¡±, recuerda Nieves Rey, directora de Comunicaci¨®n y Marketing de Ecoembes. ¡°Los ni?os cada vez est¨¢n m¨¢s lejos de la naturaleza; ya no van a la sierra, no van al parque... La tecnolog¨ªa pr¨¢cticamente lo cubre todo¡±, a?ade. Pero a la vez tambi¨¦n vieron que hab¨ªa muchos docentes que ten¨ªan la inquietud de ir m¨¢s all¨¢ de los t¨ªpicos talleres de reciclaje, y ello les motiv¨® a poner en marcha la iniciativa.
Aprender en el medio natural
El objetivo es estudiar y aprender del medio ambiente, pero siempre de una forma natural, ¡°sin meterlo con calzador¡±, se?ala desde Ceuta Rafael Carlos Falc¨®n, tutor y docente de 4? de Primaria en el CEIP Lope de Vega: ¡°Para integrar la educaci¨®n medioambiental, hay que trabajarlo de una forma globalizada, m¨¢s que compartimentando cada asignatura. Que el alumno trabaje un tema medioambiental y que necesite utilizar esos contenidos para llegar al resultado que quieres¡±. En su caso, y dada su ubicaci¨®n geogr¨¢fica (es la zona de Europa donde m¨¢s tortugas marinas se rescatan, ¡°sobre todo la tortuga boba, la tortuga verde y la la¨²d¡±), trabajando precisamente con estos animales.
¡°En clase hemos trabajado en equipo, preparando y haciendo entrevistas, investigando sobre las tortugas, yendo a verlas y exponiendo los resultados en clase, adem¨¢s de aprovechar ese d¨ªa para acercarnos a una playa y recoger residuos¡±. Otra de las actividades en las que ha implicado a sus alumnos (esta conjuntamente con otro centro) es el conocimiento del medio rural a trav¨¦s del senderismo, aprovechando no solo para estudiar las plantas sino tambi¨¦n, por ejemplo, la historia, gracias a la presencia de una fortaleza en el monte Hacho, donde suele llevar a sus alumnos. Gracias a la iniciativa de Ecoembes, Falc¨®n (que tambi¨¦n tiene un canal de YouTube, El mundo a contraluz, que utiliza habitualmente con sus alumnos) ha aprendido a programar con un enfoque medioambiental, ya que, aunque trabajan por asignaturas, muchas cosas se hacen transversalmente.
¡°?Por qu¨¦ no estudiar, en Matem¨¢ticas, un problema de cambio clim¨¢tico, donde el enunciado ya est¨¦ hablando de crisis clim¨¢tica? O, por ejemplo, al estudiar el cuerpo humano y el aparato respiratorio, ?por qu¨¦ no explicarles tambi¨¦n que hay problemas con la calidad del aire?¡±, se pregunta Rey. ¡°Con solo un peque?o giro¡±, explica, ¡°se pueden introducir mensajes muy potentes; no solo en Ciencias Naturales¡±. Estudiar el ciclo del agua, por ejemplo, puede dar pie para tratar el tema de la sequ¨ªa: ¡°No lo aislemos, d¨¦mosle un punto de reflexi¨®n. No solamente hablemos del ciclo de la condensaci¨®n; hablemos tambi¨¦n del por qu¨¦, para que el aprendizaje no se quede cojo. Est¨¢ muy bien saber c¨®mo se forman las nubes, pero hay que conocer el problema de la sequ¨ªa que vamos a tener en muchos pa¨ªses, por la falta de agua (...). Sin educaci¨®n medioambiental no hay avance posible¡±, a?ade.
Ast¨¦rix, Ob¨¦lix y un castro celta
El aprendizaje medioambiental va muchas veces ligado a proyectos de Aprendizaje Servicio (ApS) como los que vienen desarrollando en Pedrosa de Valdeporres. All¨ª, el peque?o grupo del CRA Rosa Chacel aprovecha el entorno no solo para hablar de aspectos como el reciclaje, los pl¨¢sticos o el cuidado del medio. Hace dos cursos, sin ir m¨¢s lejos, desarrollaron una de estas iniciativas de ApS: ¡°Quisimos recurrir al medio para hacer investigaciones sobre el castro celta de Brizuela, con la ayuda de un exalumno del cole que es historiador. Ligamos lo natural con lo social y con la historia del pueblo, y nos lanzamos al proyecto Los hijos de Ast¨¦rix y Ob¨¦lix vivieron en Valdeporres¡±. Cogieron el libro de Ast¨¦rix, ambientado en el 50 a.C., y relacionaron la historia de los celtas que vivieron all¨ª con las ¨²ltimas guerras c¨¢ntabras. Porque tambi¨¦n hubo unos c¨¢ntabros que se resistieron, como los famosos galos de los tebeos frente al invasor romano, en el 19 a.C.
¡°Los chavales hicieron un c¨®mic, visitamos el castro celta, invitamos a toda la comunidad e hicimos unos carteles informativos que pusimos por todos los pueblos de la merindad, para que vecinos y turistas conocieran la historia (¡). Lo que yo vi como profesora es que no solo es el medio ambiente el que nos da; tambi¨¦n el pueblo ofrece muchas cosas. La gente tiene mucha sabidur¨ªa y me parece muy importante que, desde el colegio, ense?emos a los ni?os a conocer, valorar y cuidar su medio, para que puedan amarlo. Para que, cuando salgan a seguir estudiando fuera, les quede esa vinculaci¨®n con el medio rural y lo pongan en valor¡±, explica De Diego.
El curso pasado, el proyecto que desarrollaron desde el centro consisti¨® en una plantaci¨®n de ¨¢rboles aut¨®ctonos. Para ello, los ni?os y ni?as tuvieron que investigar preguntando a los padres, los abuelos y los vecinos del pueblo sobre sus usos y costumbres; de d¨®nde sal¨ªan esos ¨¢rboles; cu¨¢l era su h¨¢bitat, qu¨¦ animales habitan en esas zonas... ¡°Al investigar, los ni?os lo tienen que escribir o, si son muy peque?os, dibujar. Y luego lo tienen que poner en com¨²n con sus compa?eros, con lo que tambi¨¦n practican la expresi¨®n oral¡±, cuenta la docente. Ahora vendr¨¢n, para seguir desarrollando el proyecto, unos carteles con c¨®digo QR que lleven la ficha de investigaci¨®n que ha hecho el alumnado, para que la gente que pasee por all¨ª o vaya a la plantaci¨®n pueda consultarla.
Gracias a su participaci¨®n en Naturaliza, tanto ellos como el resto de los 2.200 docentes inscritos tienen acceso a una biblioteca con m¨¢s de 2.000 recursos educativos gratuitos, ¡°que les ayudan a acercar a los m¨¢s peque?os al cuidado del medio natural de una forma pr¨¢ctica y amena¡±, se?alan desde Ecoembes. Desde la basuraleza a la huella ambiental del colegio y c¨®mo medirla a campa?as de ahorro energ¨¦tico o actividades relacionadas con el consumo responsable y de proximidad, entre muchas otras.
Los profesores que quieran, como ellos, participar en esta iniciativa tienen a su disposici¨®n una plataforma virtual con una microformaci¨®n de 15 horas que pueden completar al ritmo que necesiten, y que est¨¢ organizada en torno a cuatro bloques tem¨¢ticos: cambio global, huella humana, sostenibilidad y metodolog¨ªas activas. Una formaci¨®n que, reconoce De Diego, ense?a a los docentes a programar con una visi¨®n m¨¢s amplia y los anima a hacerse preguntas y ¡°estudiar, por ejemplo, los servicios que da el medio, ahora a nosotros y entonces a los celtas; los pros y los contras; la industrializaci¨®n; la globalizaci¨®n; la contaminaci¨®n... Antes viv¨ªan con lo que ten¨ªan y no hab¨ªa pl¨¢sticos ni contaminaci¨®n, ni las cosas ven¨ªan de China. Al hacer que todo eso llegue a los chavales, les est¨¢s dando no solo educaci¨®n medioambiental, sino tambi¨¦n social, de consumo...¡±.
?Por qu¨¦ es la educaci¨®n medioambiental tan importante?
¡°Yo siempre digo que nuestra casa es nuestro planeta. Veo que hay mucha defensa del medio ambiente, pero muchas veces son un poco cosas de cara a la galer¨ªa, superficiales. Tiene que ser algo que el ni?o interiorice, y que lo incorpore a sus h¨¢bitos¡±, esgrime Falc¨®n. Antes de llegar al centro en el que ense?a actualmente, perteneci¨® al equipo directivo de otro colegio que reconvirtieron en ecoescuela, a pesar de que entonces la red de ecoescuelas no llegaba hasta Ceuta. El objetivo de este tipo de centros es (entre otros) reducir su huella de carbono y conseguir un entorno educativo m¨¢s sostenible en todos los ¨¢mbitos, trabajando con ni?os y ni?as en acciones concretas que involucren a su propia comunidad y que les sirvan para entender el impacto que la acci¨®n humana tiene en el medio ambiente. Esta iniciativa, que comenz¨® en Espa?a en 1998, involucra ya a 579 centros de 15 comunidades aut¨®nomas y la ciudad aut¨®noma de Melilla (e, internacionalmente, a 59.000 centros de 68 pa¨ªses).
?Hasta d¨®nde se puede llegar? ¡°Se trata de que, al igual que hicieron otros, cuando la tecnolog¨ªa y los idiomas se fueron colando por la vida de nuestros hijos en los colegios, nosotros podamos llegar a ese nivel. ?Por qu¨¦ no? A m¨ª me encantar¨ªa que fuera as¨ª, los ni?os ser¨ªan mucho m¨¢s reflexivos y mucho m¨¢s conscientes¡±, afirma Rey, que hace hincapi¨¦ en la necesidad de que este tipo de educaci¨®n se desarrolle a lo largo de toda la trayectoria educativa de los alumnos. ¡°Lo que sucede es que tenemos a los chicos y chicas de Primaria muy concienciados, pero luego llegan a Secundaria y lo van perdiendo. Lo saben porque lo han estudiado, pero notas cierta desafecci¨®n hacia otros temas¡±, a?ade.
Otro de los proyectos que lideran desde Ecoembes es, por ejemplo, el de las Aulas Libera, en la que alumnos de Secundaria apadrinan un espacio natural, recogiendo basura y manteni¨¦ndolo limpio.
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