Un a?o nuevo con mejoras para los trabajadores espa?oles
Las rentas del trabajo ganar¨¢n peso sobre las del capital en este 2022 en el que habr¨¢ m¨¢s empleo y mejor remunerado
Se vislumbra un cambio hist¨®rico en nuestro sistema econ¨®mico: tras a?os de predominio del capital en el equilibrio entre capital y trabajo, el peso puede estar desplaz¨¢ndose hacia el trabajo. Esto significar¨ªa m¨¢s empleo, mejor remunerado, incluso para los empleados peor pagados. La ola parece manifestarse ya en Estados Unidos. ?Llegar¨¢ a Espa?a? ?Traer¨¢ el a?o nuevo buenas noticias para los trabajadores espa?oles?
El cambio se empieza a ver despu¨¦s de una de las mayores debacles laborales jam¨¢s registradas a ra¨ªz de la pandemia y la profunda contracci¨®n que le sigui¨®. En Estados Unido...
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Se vislumbra un cambio hist¨®rico en nuestro sistema econ¨®mico: tras a?os de predominio del capital en el equilibrio entre capital y trabajo, el peso puede estar desplaz¨¢ndose hacia el trabajo. Esto significar¨ªa m¨¢s empleo, mejor remunerado, incluso para los empleados peor pagados. La ola parece manifestarse ya en Estados Unidos. ?Llegar¨¢ a Espa?a? ?Traer¨¢ el a?o nuevo buenas noticias para los trabajadores espa?oles?
El cambio se empieza a ver despu¨¦s de una de las mayores debacles laborales jam¨¢s registradas a ra¨ªz de la pandemia y la profunda contracci¨®n que le sigui¨®. En Estados Unidos, un pa¨ªs con un mercado laboral desregulado con apoyos m¨ªnimos a los parados, 20,6 millones de personas perdieron su empleo en cuesti¨®n de semanas. En Espa?a, en s¨®lo dos trimestres el empleo total cay¨® en 1,36 millones, una cifra in¨¦dita, a pesar de que los ERTE protegieron a los m¨¢s directamente afectados por la pandemia.
En Estados Unidos la situaci¨®n mejor¨® r¨¢pidamente con las vacunas y los est¨ªmulos fiscales de los presidentes Trump y Biden. La econom¨ªa entr¨® en una r¨¢pida recuperaci¨®n y volvi¨® un 80% del empleo perdido. Pero empez¨® a notarse enseguida la situaci¨®n inversa: las empresas no encontraban trabajadores, sobre todo para los puestos peor remunerados. Ofrec¨ªan bonificaciones en met¨¢lico por el mero hecho de firmar un contrato. Simult¨¢neamente, un elevado n¨²mero de personas empezaron a abandonar voluntariamente sus puestos.
Hoy en d¨ªa en Estados Unidos s¨®lo hay 0,7 parados por cada vacante, lo que evidencia la falta de trabajadores. Al mismo tiempo, m¨¢s de un 2,5% de los estadounidenses sigue dejando su empleo cada mes, una cifra no vista en este siglo. Los expertos lo llaman The Great Resignation (la gran fuga laboral). En el Reino Unido, y en algunos otros pa¨ªses, se observa una tendencia parecida. Como consecuencia, los salarios estadounidenses suben espectacularmente.
Lo que no sabemos es por qu¨¦ se produce esta ¡°gran fuga¡±. ?Buscan algo mejor? ?Ser¨¢ porque la experiencia de meses trabajando en remoto ha permitido recuperar la vida familiar y muchos se resisten a volver a perderla? ?Es simplemente el miedo al contagio, empujado por las sucesivas olas de covid? Algunos expertos creen que las ayudas m¨¢s generosas a los parados introducidas en Estados Unidos durante la pandemia desincentivan el trabajo. Por primera vez en mucho tiempo, los trabajadores estadounidenses pod¨ªan permitirse el lujo de estudiar sus posibilidades y plantearse una transici¨®n hacia una vida profesional mejor.
?Se observan estas mismas tendencias en Espa?a? Los datos del INE apuntan a un s¨ª cualificado. Aunque la recuperaci¨®n espa?ola tard¨® en materializarse, el empleo creci¨® con bastante fuerza en 2021, mientras que la tasa de actividad arroja su mejor cifra desde 2016. Por su parte, los costes laborales suben a ritmos no vistos desde antes de la crisis financiera. El salario medio bruto subi¨® un 2,8% en 2021, a pesar de la continuaci¨®n de la pandemia. Cuando lleguen los fondos europeos, es de esperar que estos indicadores sigan mejorando.
Si esta tendencia se debiera s¨®lo a la pandemia y al rebote posterior de la econom¨ªa, no podr¨ªamos hablar de un cambio hist¨®rico. Sin embargo, hay motivos para creer que el desplazamiento de poder hacia el trabajador ser¨¢ m¨¢s duradero. El primero es la baja natalidad en los pa¨ªses desarrollados. Espa?a tiene una de las tasas m¨¢s bajas del mundo, lo que significa que cada a?o llegar¨¢n menos j¨®venes al mercado laboral. Esta situaci¨®n puede eventualmente derivar en una escasez de trabajadores si no se compensa de alguna manera.
Hasta ahora, la demograf¨ªa negativa se ven¨ªa paliando con flujos hist¨®ricos de inmigraci¨®n. Pero la pandemia y el rechazo creciente a la inmigraci¨®n en algunos pa¨ªses pueden estar produciendo un cambio de tendencia. Aunque los datos son preliminares, la OCDE sugiere que la migraci¨®n baj¨® un 30% o m¨¢s durante la crisis de la covid. En Estados Unidos, el mayor receptor de inmigrantes del mundo, el flujo baj¨® un 44% en 2020. Esto genera escasez de trabajadores, sobre todo en el Reino Unido, donde se agrava por el Brexit.
En Espa?a, donde los inmigrantes ven¨ªan compensando desde 2015 la ca¨ªda de la poblaci¨®n aut¨®ctona, los datos iniciales muestran que el n¨²mero total de inmigrantes cae por primera vez en muchos a?os. Aunque conforme gane fuerza la recuperaci¨®n econ¨®mica, esta tendencia puede suavizarse, podemos estar ante un cambio hist¨®rico para Espa?a, con consecuencias claras si persiste: habr¨¢ m¨¢s vacantes, y previsiblemente mayores sueldos para los trabajadores locales dispuestos a hacer los trabajos que antes cubr¨ªan los inmigrantes. Tambi¨¦n subir¨ªan los precios de algunos servicios, animando la inflaci¨®n.
La diferencia entre Estados Unidos y Espa?a es que, al retirarse los est¨ªmulos temporales de la crisis de la covid, la mayor¨ªa de los trabajadores norteamericanos no pueden contemplar su retirada a largo plazo del mercado laboral. En Espa?a, sin embargo, abundan y aumentan las subvenciones para no trabajar, a pesar de que los expertos advierten de que es imposible sostener un Estado de bienestar sin un n¨²mero creciente de trabajadores que paguen impuestos. Si Espa?a no corrige este desequilibrio, se ver¨¢ obligada a recurrir masivamente de nuevo a la inmigraci¨®n o sufrir una elevada presi¨®n inflacionista. Esto podr¨ªa dar alas al populismo.
Otra buena noticia del mercado laboral poscovid es la recuperaci¨®n de la productividad. Durante los ¨²ltimos a?os se ha lamentado la ralentizaci¨®n del crecimiento de la productividad en los pa¨ªses desarrollados. Ahora, los datos preliminares apuntan a un crecimiento del 2% o m¨¢s este a?o que acaba de finalizar tanto en Estados Unidos como en Espa?a. Seg¨²n algunos expertos, las subidas salariales generan esta mejora: si un empleado cuesta m¨¢s, vale la pena invertir en ¨¦l, v¨ªa formaci¨®n o equipamiento, para hacer rentable la ¡°inversi¨®n¡± en el trabajador.
En definitiva, esta dura crisis puede arrojar un cambio positivo para los trabajadores espa?oles. Podr¨ªamos ver mayores sueldos, menor precariedad y mejores condiciones laborales para fijos, temporales y aut¨®nomos. La reforma laboral abordada al final de 2021, si reduce la temporalidad y no degenera en m¨¢s rigideces, ser¨¢ una gran ayuda en este sentido. Sin embargo, para que esta mejora sea sostenible, hay que implementar pol¨ªticas que incentiven el trabajo legal, y seguir invirtiendo en formaci¨®n y en el desarrollo de sectores pujantes. El abuso de subsidios que desincentivan el trabajo legal y fomentan la econom¨ªa sumergida podr¨ªa abortar este proceso. Con la recuperaci¨®n poscovid y la llegada de los fondos europeos, Espa?a tiene delante una oportunidad hist¨®rica para hacer de esto una realidad, en el a?o nuevo y hacia el futuro.
Gayle Allard es profesora de Econom¨ªa de IE University.