Biden contra los amigos del coronavirus
El presidente podr¨ªa hacer campa?a contra los republicanos cuya postura antivacunas est¨¢ poniendo en peligro la econom¨ªa del pa¨ªs y las vidas de miles de personas
El presidente Biden ha terminado su primer a?o de mandato con una mala nota. Las encuestas muestran la desaprobaci¨®n por parte de la opini¨®n p¨²blica de su gesti¨®n de, bueno, casi todo. Por supuesto, estamos oyendo un sinf¨ªn de comentarios sobre sus errores pol¨ªticos, junto con alg¨²n que otro reconocimiento de que las expectativas de la ciudadan¨ªa eran demasiado altas dada la estrech¨ªsima mayor¨ªa dem¨®crata en el Congreso.
Sin embargo, creo que no se hace suficiente hincapi¨¦ en hasta qu¨¦ punto el presidente se ha visto perjudicado por la fatigosa perseverancia de la pandemia. Vale, es verdad que los mensajes podr¨ªan haber sido m¨¢s claros, que se podr¨ªa haber proporcionado m¨¢s pruebas y m¨¢s mascarillas, etc¨¦tera. Pero el mayor error de Biden en relaci¨®n con la covid-19 ha sido subestimar la crueldad de sus adversarios, que han hecho todo lo que han podido para socavar la respuesta del pa¨ªs a la crisis sanitaria.
Antes de entrar en las pol¨ªticas en torno a la respuesta a la covid, hablemos de c¨®mo la persistencia de la pandemia impregna el estado de ¨¢nimo del pa¨ªs.
Algunos efectos son directos y evidentes. Sin duda, la mayor¨ªa de los estadounidenses, aunque no hayan desarrollado s¨ªntomas, conocen a personas que han enfermado gravemente o han muerto.
Adem¨¢s, la covid sigue haciendo dif¨ªcil la vida. Los colegios cerrados fueron una pesadilla para muchos padres, y aunque en la mayor¨ªa de los sitios han vuelto a abrir, siguen expuestos a cierres imprevisibles. El mundo laboral tambi¨¦n sigue alterado. Seg¨²n la ¨²ltima Encuesta del Pulso de los Hogares de la Oficina del Censo, 8,7 millones de estadounidenses no trabajaban porque estaban enfermos de coronavirus o cuidando a alguien que lo estaba, y otros 3,2 millones por miedo a contraer o propagar el virus. Adem¨¢s, la covid empeora nuestros problemas econ¨®micos. El miedo al contacto ha desviado el gasto de los consumidores de los servicios a los bienes, lo cual ha tensionado las cadenas de suministro y ha alimentado la inflaci¨®n. El temor a infectarse y el agotamiento de los trabajadores probablemente sean los principales factores determinantes de la escasez de mano de obra, que tambi¨¦n est¨¢ contribuyendo a la inflaci¨®n.
Uno de los enigmas que rodean los ¨²ltimos sondeos es por qu¨¦ la opini¨®n p¨²blica valora tan mal la econom¨ªa a pesar de la ca¨ªda del desempleo. Es verdad que el alza de los precios ha restado valor a los salarios reales, pero George H.W. Bush hizo campa?a en 1988 con el argumento de una econom¨ªa fuerte a pesar de que los salarios hab¨ªan bajado a lo largo de la mayor parte del segundo mandato de Ronald Reagan. Y como hemos observado algunos, existe una gran desconexi¨®n entre la valoraci¨®n que los estadounidenses hacen de su propia situaci¨®n econ¨®mica ¡ªque es bastante positiva¡ª y su pesimista apreciaci¨®n de ¡°la econom¨ªa¡±.
Sin duda, el partidismo desempe?a un papel importante, ya que los republicanos afirman que la econom¨ªa est¨¢ tan mal ahora como a principios de 2009, cuando perd¨ªamos 700.000 puestos de trabajo al mes. Pero la pandemia tambi¨¦n ensombrece las percepciones: adem¨¢s de una sensaci¨®n general de malestar, la gente ve tiendas cerradas y edificios de oficinas vac¨ªos, con lo cual las cosas parecen peores de lo que son.
Lo que hace todo esto especialmente desmoralizante es que 2021 empez¨® con la esperanza de que unas vacunas milagrosas acabaran con la epidemia mundial. A pesar de la eficacia de los preparados para prevenir la enfermedad grave, las expectativas no se cumplieron ni siquiera en los pa¨ªses con altas tasas de vacunaci¨®n. Pero en Estados Unidos la situaci¨®n es particularmente mala porque no es un pa¨ªs con un alto porcentaje de inmunizados; tras un buen comienzo, su campa?a de vacunaci¨®n qued¨® muy por detr¨¢s de las de otros pa¨ªses ricos.
Y si bien hay distintas razones por las que determinadas personas no se vacunan, a escala nacional el atraso tiene que ver con la pol¨ªtica. En los Estados dem¨®cratas, las tasas de vacunaci¨®n son similares a las de otros pa¨ªses avanzados, mientras que en los Estados republicanos est¨¢n muy por debajo. A nivel de condado se da una asombrosa correlaci¨®n negativa entre el porcentaje de votos a favor de Donald Trump en 2020 y el de personas inmunizadas.
?Por qu¨¦ muchos republicanos rechazan la vacuna? Porque reciben un flujo constante de desinformaci¨®n de los medios de comunicaci¨®n de derechas, al mismo tiempo que los pol¨ªticos de ese sector han pasado paulatinamente de afirmar que estaban contra la obligatoriedad de la inmunizaci¨®n a ser directamente antivacunas. Por ejemplo, hace poco el director del departamento de Salud del condado de Orange, en Florida, fue suspendido de empleo solo por animar al personal a que se vacunara, no por exigirle que lo hiciera.
Pero, ?por qu¨¦ las ¨¦lites de derechas son tan hostiles a las vacunas? ?Ser¨¢ que han examinado detenidamente las pruebas? No digamos tonter¨ªas. Su verdadera motivaci¨®n es el deseo de evitar que los dem¨®cratas logren ninguna clase de ¨¦xito pol¨ªtico. ?Y resulta del todo inveros¨ªmil la insinuaci¨®n de que algunas figuras destacadas de la derecha quieren hacer lo que est¨¦ en sus manos para que las cosas empeoren, en la creencia de que la opini¨®n p¨²blica culpar¨¢ a Biden?
Aunque la opini¨®n p¨²blica, en efecto, tiende a culpar a los presidentes de todo lo malo que ocurre bajo su mandato, estos pueden contraatacar. En 1948, Harry Truman logr¨® hacer campa?a con ¨¦xito contra los republicanos que bloqueaban su programa econ¨®mico. Biden podr¨ªa hacer campa?a contra los republicanos cuya postura antivacunas est¨¢ poniendo en peligro la econom¨ªa del pa¨ªs y las vidas de miles de estadounidenses.
?Dar¨ªa resultado? Nadie lo sabe. Lo que sabemos es que un a?o intentando conciliar e integrar no ha funcionado. Ha llegado la hora de que Biden presente batalla.
Paul Krugman es premio Nobel de Econom¨ªa. ? The New York Times, 2022. Traducci¨®n de News Clips.
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