Repsol o el dulce dilema de tener la caja a rebosar
La crisis energ¨¦tica, que ha encarecido el petr¨®leo y multiplicado los m¨¢rgenes de las refiner¨ªas, abre m¨²ltiples opciones de inversi¨®n para la petrolera espa?ola
La crisis de precios de la energ¨ªa, iniciada bastantes meses antes de que el primer soldado ruso cruzara la frontera con Ucrania pero agravada por la brutal y arbitraria declaraci¨®n de guerra de Vlad¨ªmir Putin, ha zarandeado los mercados f¨®siles como nunca antes en su historia. El gas marc¨® valores r¨¦cord el verano pasado y el crudo volvi¨® a traspasar la barrera de los tres d¨ªgitos por primera vez en casi una d¨¦cada. M¨²sica cl¨¢sica para los o¨ªdos de las grandes petroleras.
Repsol no es ni mucho menos ajena a esa buena marcha del sector. Al contrario: es una de las firmas occidentales del sector que mejor est¨¢ pudiendo capitalizar este giro total en el precio de los productos que pone cada d¨ªa en el mercado. Tras dos ejercicios aciagos, un 2019 en el que se vio lastrada por las provisiones para adaptar el valor de sus activos a un mundo en el que los carburantes pasan a un segundo plano, y 2020 en el que la pandemia zarande¨®, y de qu¨¦ manera, su cuenta de resultados, las tornas han cambiado. Por completo.
En 2021, el a?o de la salida del t¨²nel de la covid-19, la empresa presidida por Antonio Brufau se anot¨® su mayor beneficio en m¨¢s de una d¨¦cada: casi 2.500 millones de euros. En 2022, seg¨²n las cuentas presentadas la semana pasada, las ganancias se dispararon un 70% m¨¢s, hasta superar los 4.250 millones y convertirse en las mayores de su historia al margen de un 2010 en el que los extraordinarios cosechados con la venta parcial de su filial brasile?a al gigante chino Sinopec invalidan cualquier comparativa.
En los ¨²ltimos tiempos, Repsol se ha cruzado en el camino con varias generosas gallinas de huevos de oro. La primera es la exploraci¨®n y producci¨®n, la reina de la baraja y la fase de la cadena de valor m¨¢s sensible a los precios: cuanto m¨¢s altos, mayores son las ganancias. La segunda es el refino: el a?o pasado, la petrolera espa?ola vio c¨®mo sus m¨¢rgenes se multiplicaban por seis ah¨ª, algo m¨¢s que extraordinario. La reciente salida de la ecuaci¨®n de Rusia, hasta hace bien poco el primer suministrador europeo de di¨¦sel, no hace sino reafirmar su posici¨®n: tiene una inmensa capacidad de refino de crudos procedentes de todo el mundo; algo as¨ª como navaja suiza que brilla con especial intensidad en estos tiempos convulsos.
La tercera de esas gallinas de oro es el gas: pese a la bajada de los ¨²ltimos meses, la temporada de rellenado de dep¨®sitos para el pr¨®ximo invierno empezar¨¢ con la llegada de la primavera, y su negocio ah¨ª tambi¨¦n est¨¢ garantizado. La cuarta y ¨²ltima es la venta de gasolina y di¨¦sel al por menor: tras haber perdido cuota de mercado frente a las estaciones de servicio de bajo coste, los jugosos descuentos ofrecidos en los ¨²ltimos tiempos a trav¨¦s de su aplicaci¨®n Waylet le han permitido recuperar clientes a marchas forzadas. Algo que tampoco entraba en ninguna ecuaci¨®n hasta hace bien poco.
¡°No hay un momento de su historia reciente en el que le haya ido tan bien en pr¨¢cticamente todos sus negocios, quiz¨¢ con la ¨²nica excepci¨®n de la qu¨ªmica¡±, reconoce por tel¨¦fono Pedro Alves, analista de CaixaBank especializado en empresas energ¨¦ticas. Esta pl¨¦yade de buenas nuevas en todos los frentes ha tra¨ªdo consigo un dulce dilema para Repsol: qu¨¦ hacer con toda la caja disponible, exacerbada a¨²n m¨¢s por las recientes ventas de participaciones significativas de sus filiales de exploraci¨®n y producci¨®n, y de renovables. Ese potente caudal de caja podr¨ªa, adem¨¢s, obligar a Repsol a mover ficha y actualizar pronto su plan estrat¨¦gico, seg¨²n Alfonso Batalla, analista de Renta 4. Todo, a pesar de que esa hoja de ruta tiene apenas a?o y medio de antig¨¹edad. ¡°En el acumulado de 2021 y 2022, ya han generado el 90% de la caja que ten¨ªan prevista hasta 2025¡å, desgrana por tel¨¦fono.
La petrolera que dirige Josu Jon Imaz no solo va por delante en flujos de caja: tambi¨¦n ha cumplido todas las recompras de acciones propias contempladas para el periodo. ¡°Tarde o temprano nos tendr¨¢n que decir algo: entiendo que quieran tener un perfil muy conservador y no generar unas expectativas muy altas, pero es que, a falta de tres a?os [para el fin del plan estrat¨¦gico] y solo les queda por generar 10% de la caja prevista para el periodo¡±, esboza Batalla. Seg¨²n sus c¨¢lculos, en las cuentas del primer trimestre de este a?o la petrolera ya habr¨¢ cumplido con las recompras de acciones previstas para todo el ejercicio.
La cautela manda
La liquidez de Repsol ronda hoy los 12.000 millones de euros. ¡°Y de esa cifra, algo m¨¢s de la mitad es caja pura¡±, remarca V¨ªctor Peir¨®, director de an¨¢lisis de GVC Gaesco. ¡°2022, en particular, ha sido un a?o excepcional, y es mucho dinero el que tienen disponible¡±. Tras la ca¨ªda sustancial de los ¨²ltimos a?os y a pesar del estir¨®n que dio durante la pandemia, a?ade, ¡°ya pr¨¢cticamente no hay deuda financiera¡±.
?Qu¨¦ hacer, entonces, con ese ingente volumen remanente de caja? ¡°Pueden seguir comprando activos o carteras de energ¨ªas verdes, tanto en Europa como en Am¨¦rica, porque la aportaci¨®n de esa l¨ªnea a su cuenta de resultados sigue siendo limitada¡±, dibuja Peir¨®. ¡°Pero, sobre todo, no tienen que tirar el dinero por la ventana, porque igual que ahora el petr¨®leo est¨¢ caro, puede estar barato: tienen que guardar para cuando lleguen los malos tiempos¡±. Nadie descarta, tampoco, un dividendo extraordinario o un nuevo aceler¨®n en la recompra de acciones, una de las f¨®rmulas preferidas por las petroleras para retribuir a sus due?os.
¡°La situaci¨®n de Repsol es muy buena, pero el negocio de una petrolera siempre es muy vol¨¢til¡±, recuerda ?lvaro Navarro, analista de energ¨ªa e infraestructuras de Bestinver. ¡°Una petrolera tiene que tener ser siempre prudente con el apalancamiento. Cuando se produjo la confiscaci¨®n de YPF [en 2012, por parte del Estado argentino], por ejemplo, le pill¨® con mucha deuda¡±. Y aunque los pr¨®ximos a?os van a ser ¡°m¨¢s intensivos en capital¡± que los anteriores, constata, la mitad del dinero ir¨¢ a parar a exploraci¨®n y producci¨®n de crudo, una actividad que ¡°sigue obligando a una inversi¨®n muy relevante¡±.
En esa l¨ªnea cautelosa es en la que se ha movido la compa?¨ªa en los ¨²ltimos tiempos. En la conferencia con analistas de la semana pasada, en la que se anunci¨® una inversi¨®n de 5.000 millones de euros en 2023, Imaz reconoci¨® sentirse c¨®modo con la etiqueta de consejero delegado ¡°aburrido¡±, alejado de los focos y del rock and roll de las operaciones corporativas multimillonarias. ?l, de hecho, las descart¨® casi de plano: los desembolsos org¨¢nicos, vino a decir, primar¨¢n sobre las compras. ¡°Si hay alguna, ser¨¢ de peque?o tama?o, m¨¢s para ganar cuota de mercado que otra cosa¡±, opina Sonia Ruiz de Garibay, analista del grupo suizo Mirabaud. ¡°Repsol tampoco puede hacer lo de hace una d¨¦cada, cuando compr¨® Talisman por m¨¢s de 10.000 millones. Si no protegen su caja ahora y hacen un movimiento muy grande, puede quedarse en una posici¨®n compleja en unos a?os, cuando el entorno de flujos de caja sea peor¡±, apunta Alves, de CaixaBank.
¡°Podr¨ªa haber operaciones peque?as o medianas, de hasta 700 u 800 millones, pero no m¨¢s. Y eso, desde el punto de vista del accionista, eso es positivo, porque una compra grande implica riesgos¡±, agrega Navarro. De producirse una gran una adquisici¨®n -¡±solo si se da una oportunidad que no puedan dejar pasar¡±, incide Batalla-, ser¨¢ siempre en econom¨ªas avanzadas (OCDE), como viene repitiendo la direcci¨®n de la petrolera desde hace tiempo. La caja est¨¢ llena, pero la seguridad manda: el pasado est¨¢ lleno de pasos en falso que Repsol no quiere repetir.
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