Rikki, un anillo con el que puedes pagar como si llevaras la tarjeta

Hay anillos con poderes m¨¢gicos, como el de El se?or de los anillos; otros que esconden intrigas y conspiraciones, como el de Los tres mosqueteros, y otros m¨¢s modernos que, lejos de romanticismos o guiones cinematogr¨¢ficos, sirven para medir nuestras constantes vitales. Pero pocos permiten lo que Rikki ha conseguido: pagar con un simple gesto en cualquier parte del mundo y prescindir de la tarjeta o el m¨®vil. ¡°No lo recargas con una cantidad, el gasto va a tu cuenta directamente¡±, explica Elena Yorda, confundadora de Rikki, junto a Elena Fuenmayor.

Emprendedoras de largo recorrido, ambas han conseguido dise?ar un anillo con esta prestaci¨®n, despu¨¦s de experimentar con el lanzamiento en M¨¦xico de una pulsera que permit¨ªa pagar y abrir la puerta de la habitaci¨®n en determinados hoteles. ¡°Fue un fracaso rotundo, as¨ª que cuando volvimos a Espa?a pensamos que hab¨ªa que reenfocar lo que hab¨ªamos aprendido y surgi¨® la idea del anillo¡±, resume Yorda.

Con unos 200.000 euros de inversi¨®n, el pasado a?o ya estaba en el mercado. Dise?ado en porcelana hipoalerg¨¦nica y en distintos colores y grosores, en su interior contiene un chip NFC de seguridad bancaria, certificado por Visa y MasterCard que encripta los datos. Se puede vincular a una o m¨¢s tarjetas a trav¨¦s de la aplicaci¨®n de Curve, una fintech inglesa que sirve de puente entre el anillo y cualquier banco europeo. ¡°Lo hicimos as¨ª para no tener que negociar banco por banco, lo que ser¨ªa una tarea larga y complicada. De momento, si tienes tarjeta Revolut te puedes saltar este paso¡±, apunta Yorda.

Rikki no necesita recarga de bater¨ªa, y si se pierde, se bloquea en la aplicaci¨®n de la compa?¨ªa. ¡°No se puede resetear ni introducir otros datos. Tambi¨¦n se puede mojar y sumergir sin problema, llevar a la playa o la piscina o correr una marat¨®n¡±.

Con siete empleados, en 2023 facturaron 150.000 euros y aspiran a multiplicar por tres la cifra en este a?o. Sin rondas de financiaci¨®n a la vista, prefieren ir de momento en solitario. ¡°Hay negocios en los que hay que evitar inversores externos al principio. Su inter¨¦s suele ser r¨¢pido, y si se quema la empresa a ellos no les afecta, pero a nosotras, s¨ª¡±, subraya Yorda.

Con un precio desde 100 euros, de momento solo se vende a trav¨¦s de su tienda online. ¡°Hemos tenido ofertas de grandes retailers, pero no estamos preparadas. Estamos en una fase de entusiasmo¡±, sonr¨ªe la cofundadora.

Tienen muchos proyectos en marcha, como llevar el producto a Portugal y a Latinoam¨¦rica. ¡°Hay mucho inter¨¦s all¨ª, pero su mercado bancario es un poco complicado¡±, concreta.

Tambi¨¦n tienen en cartera ampliar las prestaciones de su producto, como incluir las llaves para cerraduras electr¨®nicas, hacer dise?os en plata, un metal que hasta ahora frenaba su uso al bloquear las ondas electromagn¨¦ticas, lo que imped¨ªa el pago. ¡°Estamos en v¨ªas de solucionarlo¡±, comenta. Barajan lanzar nuevos productos, como una pulsera para ni?os y mayores, tambi¨¦n sin bater¨ªa, que incluya un localizador y que se pueda recargar con dinero para los m¨¢s peque?os.

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