El ministro Castells culpa a Moncloa de su invisibilidad medi¨¢tica

Desde el 23 de abril, que dio su primera rueda de prensa como ministro, Manuel Castells (Hell¨ªn, Albacete-1942) no hab¨ªa convocado otra, as¨ª que la celebrada este jueves ha sido casi un hito para los medios. ¡°Es leyenda urbana que estoy desaparecido¡±, ha asegurado el responsable de Universidades. Y ha encontrado un culpable: la Secretar¨ªa de Estado de Comunicaci¨®n, es decir Moncloa: ¡°Ten¨ªamos una conferencia de prensa al mes cada ministerio y luego cambi¨® todo con el estado de alarma¡±. Asegura que La Moncloa ten¨ªa ¡°otras prioridades¡± medi¨¢ticas. Pero en realidad, el confinamiento se decret¨® el 15 de marzo y hasta entonces Castells no hab¨ªa realizado ninguna de esas comparecencias mensuales.

El acto ha servido para escenificar junto a los rectores ¡ªrepresentados por su presidente, Jos¨¦ Carlos G¨®mez Villamandos¨D que su ministerio no ha dejado de trabajar, en colaboraci¨®n con estos, en la preparaci¨®n del nuevo curso. Este diario tiene constancia de que su secretario general de Universidades, Jos¨¦ Manuel Pingarr¨®n, se ha reunido con los rectores y estudiantes cada semana, en muchas ocasiones con Castells. Pero hace 10 d¨ªas, los universitarios llenaron Twitter con decenas de miles de mensajes pregunt¨¢ndose d¨®nde se hab¨ªa metido el ministro a punto de iniciarse el curso, mientras la ministra de Educaci¨®n, Isabel Cela¨¢, abr¨ªa todos los telediarios.

Castells ha contestado a las preguntas de los periodistas de forma telem¨¢tica desde casa, con una pared tapizada de diplomas como fondo, pues se recupera de una intervenci¨®n a la que se someti¨® hace seis d¨ªas. G¨®mez Villamandos, que se ha desplazado desde C¨®rdoba, lo ha hecho desde la sede del Ministerio de Universidades. El ministro no cree que su escasa vida p¨²blica le vaya a pasar factura, aunque el l¨ªder de Podemos y vicepresidente, Pablo Iglesias, tuvo ya que salir a defenderle en abril manifiestamente inc¨®modo: ¡°Comparecer¨¢ muy pronto para dar cuenta del enorme trabajo que su ministerio est¨¢ llevando a cabo¡±. Castells ha sido vehemente: ¡°No tengo miedo a una factura. A m¨ª lo que me importa es poder hacer cosas al servicio de los estudiantes, al servicio de la sociedad, del pa¨ªs. Yo no soy pol¨ªtico y, por lo tanto, el rumor medi¨¢tico me da igual, me trae sin cuidado¡±.

El afamado soci¨®logo ha recordado que ha aceptado 11 entrevistas desde marzo: ¡°No se la he dado a su medio, cierto [en referencia a EL PA?S], pero s¨ª a otros medios muy importantes: La Vanguardia [diario en el que ha seguido escribiendo como columnista], La Sexta, Telemadrid...¡±. Las entrevistas a peri¨®dicos han sido todas contestadas por cuestionario.

La semana que viene Castells se re¨²ne con los sindicatos para discutir sobre el estatuto PDI (personal docente e investigador) ¨Dlos ¨¢nimos est¨¢n muy caldeados¨D y con los 17 consejeros del ramo para hablar sobre los 400 millones de euros del fondo covid destinados a educaci¨®n superior. El ministro asegura que por ¡°ley¡± las comunidades est¨¢n obligadas a invertirlos en esa etapa formativa, mientras los rectores han denunciado p¨²blicamente que los gobiernos auton¨®micos les racanean los fondos pues prefieren gastarlos en los colegios. G¨®mez Villamandos ha se?alado que la situaci¨®n est¨¢ mejorando despu¨¦s de que los medios ¨Dentre ellos EL PAIS¨D dieran cuenta del desprecio.

Castells ha alabado el modelo bimodal acordado con los rectorados ¡ªpr¨¢cticas en los campus y clases magistrales alternando por semanas el aula y la videoconferencia¡ª y ha dejado claro que ¡°no hay un plan B¡±. Aunque si C ¡°de cat¨¢strofe¡±. Y es que solo se volver¨ªa, seg¨²n ¨¦l, al 100% virtual si hubiese un nuevo confinamiento y no cree que esto ocurra.

La sinton¨ªa con Castells, reconoce G¨®mez Villamandos, se rompe cuando se habla del reglamento universitario franquista de 1953 que el ministerio quiere anular sin un texto de sustituci¨®n. ¡°Lo vamos a derogar y seguir negociando¡±, ha avanzado el ministro. Los rectores creen que va a producirse un vac¨ªo legal y recuerdan que no tienen herramientas para sancionar a alguien sin mascarilla. La polic¨ªa necesita autorizaci¨®n para entrar salvo en caso de delito.

La tensi¨®n ha ido a m¨¢s y ha llegado al m¨¢ximo al pregunt¨¢rsele por si podr¨ªa ser sustituido en una eventual crisis de Gobierno: ¡°No tengo la menor idea de lo que me habla¡±. Aunque, conciliador, ha terminado con un ¡°muchas gracias, nos veremos en breve en una rueda de prensa¡±.

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