La polic¨ªa capt¨® conversaciones de implicados en el 11-M pero no descubri¨® lo que tramaban

El jefe de la Polic¨ªa de Madrid para asuntos de droga y crimen organizado ha explicado hoy ante la comisi¨®n parlamentaria que investiga los atentados del 11 de marzo que, en las conversaciones telef¨®nicas intervenidas antes del ataque, el confidente de la Guardia Civil Raf¨¢ Zouhier —en prisi¨®n desde el 24 de marzo por colaboraci¨®n con banda armada— y uno de los presuntos cabecillas de la c¨¦lula terrorista, Jamal Ahmidam, El Chino, no hablaron de explosivos sino s¨®lo de drogas. Sin embargo, s¨ª ha reconocido que ¨¦ste ¨²ltimo dijo cosas que no pudieron ser interpretadas pero que en cualquier caso no les llevaron a sospechar lo que tramaba.

Juan Manuel Calleja es ahora jefe de la Brigada Provincial de Polic¨ªa Judicial de Madrid, pero antes de los atentados era el comisario jefe de la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Madrid responsable de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (la UDYCO). "Si hubi¨¦semos interpretado de esas conversaciones que pod¨ªa existir tr¨¢fico de armas o explosivos, habr¨ªamos actuado con inmediatez, aunque el objeto de la investigaci¨®n fuera distinto", ha afirmado hoy.

Y es que la polic¨ªa investigaba desde el 12 de diciembre de 2003 a una red de presuntos delincuentes agrupados bajo el liderazgo de una persona que ha identificado como Lofti y dedicados, seg¨²n cre¨ªan, al tr¨¢fico de drogas. Lofti, vecino de Alcal¨¢ de Henar¨¦s, mantuvo a finales de febrero o principios de marzo de 2004 una conversaci¨®n con Zouhier —"un personaje del mundo de la noche", seg¨²n el mando policial—, quien le ofreci¨® sus servicios para distribuir drogas y encargarse de cobros "dif¨ªciles".

La polic¨ªa tir¨® de este hilo investigando a Zouhier, sin saber eso s¨ª que era confidente de la Guardia Civil. El 12 de marzo, un d¨ªa despu¨¦s de los atentados, solicit¨® una autorizaci¨®n judicial para intervenir su tel¨¦fono, que obtuvo tres d¨ªas despu¨¦s. De esta forma los agentes pudieron escuchar una conversaci¨®n que mantuvo a las 23.13 del 17 de marzo con Victor —que a la saz¨®n era su persona de contacto en la Guardia Civil— que demostraba a su juicio que ten¨ªa informaci¨®n sobre el 11-M. Calleja se lo comunic¨® a sus superiores al d¨ªa siguiente, y el d¨ªa 19 Zouhier fue detenido.

Tambi¨¦n los tel¨¦fonos de El Chino fueron intervenidos por llamar a uno de los presuntos miembros —Otman El Gnaoui— de la red de narcotr¨¢fico dirigida por Lofti. Pero en cualquier caso ni ¨¦ste ni Zouhier mencionaron en ning¨²n momento nada que tuviera que ver con armas o explosivos. La investigaci¨®n judicial realizada por el magistrado de la Audiencia Nacional Juan del Olmo establece que El Chino convers¨® telef¨®nicamente con ese lugarteniente de Lofti el 17, el 28 y el 29 de febrero de 2004.

Las dos ¨²ltimas se produjeron los d¨ªas en los que presuntamente se realiz¨® el transporte en camioneta de los explosivos usados en los atentados de Avil¨¦s a Madrid. En esas conversaciones, escuchadas por la polic¨ªa, se hace menci¨®n a una "furgoneta" y a la obligaci¨®n de El Gnaoui de recoger a los presuntos miembros de la "c¨¦lula de Morata" para ir con ellos a Burgos. Seg¨²n se desprende de la investigaci¨®n judicial, as¨ª lo hizo: fue con dos implicados en los atentados — Rachid Oulad Akcha y Asrih Rifaat Anouar— a buscar los dos veh¨ªculos que transportaban los explosivos.

Sin embargo, la polic¨ªa no interpret¨® esas se?ales como signo de lo que pod¨ªa haber en realidad detr¨¢s, seg¨²n ha reconocido Calleja, y tampoco conoc¨ªa el informe de la Guardia Civil con fecha del 27 de febrero en el que, con datos proporcionados por Zouhier, se aseguraba que el asturiano Antonio Toro —cu?ado del ex minero Emilio Su¨¢rez Trashorras— dispon¨ªa de 150 kilogramos de dinamita que intentaba cambiar por droga en Madrid. La polic¨ªa no relacion¨® su investigaci¨®n con el 11-M hasta escuchar la conversaci¨®n de Zouhier con Victor el 17 de marzo.

Calleja fue preguntado tambi¨¦n por los presuntos v¨ªnculos entre los integrantes de la c¨¦lula terrorista responsable del 11-M con miembros de ETA —tesis sostenida por el Partido Popular y algunos medios de comunicaci¨®n—. No le consta que existan, y carece de datos al respecto.