La zarzuela se instala en Sabatini

Los Veranos de la Villa apuestan por la zarzuela en los Jardines de Sabatini con una producci¨®n de El Barberillo de Lavapi¨¦s de la compa?¨ªa ?pera C¨®mica, que se sirve del Teatro Real especialmente iluminado como tel¨®n de fondo del espect¨¢culo. La obra l¨ªrica, del maestro Francisco Asenjo Barbieri con libreto de Luis Mariano de Larra y que fue estrenada en el Teatro de la Zarzuela de Madrid en 1974, estar¨¢ en cartel desde hoy d¨ªa 11 al 28 de julio.

Con direcci¨®n esc¨¦nica de Francisco Matilla, la batuta de Lorenzo Ramos -un maestro vien¨¦s pero madrile?o de adopci¨®n-, y con la concepci¨®n coreogr¨¢fica de Marco Berriel, este montaje cuenta con un elenco formado por Carmen Gonz¨¢lez, Milagros Mart¨ªn, Sonia Munc, Enrique Ferrer y Juan Lomba, entre otros. La compa?¨ªa present¨® el lunes este espect¨¢culo junto al director del festival veraniego, Manuel Guti¨¦rrez, quien explic¨® la apuesta de Los Veranos de la Villa por la zarzuela en los Jardines de Sabatini, espacio al aire libre que ha visto aumentar su escenario y su aforo para abordar esta programaci¨®n l¨ªrica.

"No es polvoriento ni alejado"

Estrenada el 19 de diciembre de 1874, El Barberillo de Lavapi¨¦s es una partitura de Francisco Asenjo Barbieri con libreto de Luis Mariano de Larra -el hijo del c¨¦lebre periodista Mariano de Larra-, cuyo argumento pone en escena dos historias de amor con las intrigas palaciegas de fondo. La compa?¨ªa consider¨® que esta pieza era la m¨¢s apropiada para representar en los Jardines, puesto que est¨¢ ambientada en el Madrid de Carlos III. "Lo que tiene este lugar de especial es el Palacio Real", comentaba el director de escena, quien ha optado por un montaje de corte cl¨¢sico y en el marco del "teatro de verano", es decir, basado en la m¨²sica, la luz, sin cambios de escenograf¨ªa y "sin tapones que impidan la visi¨®n" del emblem¨¢tico edificio iluminado.

Esta producci¨®n retoma la que realiz¨® la compa?¨ªa apera C¨®mica hace 10 a?os en Santiago de Chile, aunque totalmente renovada. "Es un espect¨¢culo cl¨¢sico, no es transgresor, pero no es polvoriento ni alejado del p¨²blico", a?ad¨ªa Francisco Matilla, quien hizo hincapi¨¦ en la calidad del vestuario "casi historicista" y en el movimiento coreogr¨¢fico de Marco Berriel, que respetando el trasfondo de la pieza, ha huido de los t¨®picos y ha buscado resaltar su ritmo y dinamismo.

"Pese a haber nacido en Viena me considero madrile?o de adopci¨®n y soy casi del barrio", comentaba el maestro Ramos, quien subray¨® que esta pieza es una "de las grandes zarzuelas del g¨¦nero y del autor". En esta producci¨®n, Carmen Gonz¨¢lez dejar¨¢ de ser la Marquesita -un papel al que ha dado vida en muchas ocasiones- para interpretar a Paloma, un personaje noble y que se enamora del barbero Lamparilla, a quien encarnar¨¢ Enrique Ferrer, quien subray¨® la inteligencia de un personaje extremadamente veloz.