Los inmigrantes marroqu¨ªes en Espa?a est¨¢n menos integrados que en el resto de Europa

Los inmigrantes marroqu¨ªes en Espa?a est¨¢n algo menos integrados -el fen¨®meno es tambi¨¦n m¨¢s reciente- que en el resto de Europa, pero se sienten, sin embargo, menos rechazados que en otros pa¨ªses europeos como Holanda o Italia. Son, en mayor proporci¨®n, varones y de origen rural. Frecuentan con m¨¢s asiduidad la mezquita -un 23% acude a diario, el doble de la media europea- y desean en mayor medida (83%) que sus hijos se casen con musulmanes y a ser posible marroqu¨ªes (74%).

El Consejo de la Comunidad Marroqu¨ª en el Extranjero (CCME), un ¨®rgano consultivo nombrado por el rey Mohamed VI, encarg¨® al instituto de sondeos franc¨¦s BVA la primera encuesta sobre la inmigraci¨®n marroqu¨ª en seis pa¨ªses europeos -Espa?a, Francia, Italia, B¨¦lgica, Holanda y Alemania- basada en una muestra de casi 3.000 personas. Driss el Yazami, presidente del CCME, dio a conocer sus resultados esta tarde en Casablanca.

En Europa hay unos 3,5 millones de inmigrantes marroqu¨ªes de los que aproximadamente el 20% residen en Espa?a. Constituyen la segunda comunidad extranjera despu¨¦s de los rumanos. A los 729.000 marroqu¨ªes instalados legalmente en Espa?a -sobre todo en Catalu?a, Madrid, Valencia, Murcia y Almer¨ªa- hay que a?adir varias decenas de miles que est¨¢n empadronados, pero no poseen permiso de trabajo ni de residencia. Unos 64.000 marroqu¨ªes han adquirido adem¨¢s la nacionalidad espa?ola en los ¨²ltimos a?os.

"Los marroqu¨ªes que viven en Espa?a presentan un perfil particular (...)", subrayan los autores de la encuesta. Constituyen, como en Italia, una inmigraci¨®n reciente y son adem¨¢s de origen rural. Uno de cada tres posee tierras en su pa¨ªs. Trabajan como obreros (40%) y tienen la sensaci¨®n de estar en una situaci¨®n de "gran precariedad". No en balde el 61% ha estado en paro en alg¨²n momento.

El 32% habla espor¨¢dicamente en casa el castellano o catal¨¢n -el uso del idioma del pa¨ªs de residencia asciende al 64% en Europa-, pero el grueso de las conversaciones familiares se desarrollan en ¨¢rabe dialectal. Sus relaciones personales son endog¨¢micas: el 75% frecuenta casi exclusivamente a marroqu¨ªes. En Europa ese porcentaje cae al 62%. Muestran tambi¨¦n un menor inter¨¦s por la vida pol¨ªtica -el 59% no la sigue- que sus compatriotas en el resto del Viejo Continente.

La pr¨¢ctica religiosa de la inmigraci¨®n marroqu¨ª en Espa?a -el 55% frecuenta la mezquita con asiduidad- es seis puntos m¨¢s alta que la media europea. El 53% se queja de que no hay bastantes templos y el 46% de que no son lo suficientemente grandes. Uno de cada tres sigue tambi¨¦n programas religiosos en las televisiones ¨¢rabes. Pero el 45% -un porcentaje sin parang¨®n en Europa- sostiene que a los musulmanes les es m¨¢s f¨¢cil practicar su religi¨®n en Espa?a que al resto de la poblaci¨®n.

Pese a la religiosidad de sus padres, el 70% de los menores marroqu¨ªes no acude a clases islam y el 71% ni siquiera participa en actividades organizadas por mezquitas o asociaciones religiosas. El 66% tampoco estudia el ¨¢rabe.

Marruecos es el pa¨ªs peor valorado a ojos de la opini¨®n p¨²blica, pero el 64% de los marroqu¨ªes afincados en Espa?a creen, no obstante, que los espa?oles tienen "buena imagen" de su pa¨ªs. El 44% afirma incluso que en su pa¨ªs de acogida la inmigraci¨®n marroqu¨ª goza tambi¨¦n de buena imagen.

Esa percepci¨®n halag¨¹e?a que atribuyen a los espa?oles se resquebraja cuando se pregunta a los inmigrantes si se les discrimina a la hora de acceder a un empleo (el 80% responde positivamente) o de encontrar una vivienda (el 67% afirma que s¨ª). La arbitrariedad desaparece cuando se trata de recibir asistencia m¨¦dica -el 37% opina incluso que le resulta m¨¢s f¨¢cil que a los espa?oles- o de seguir una formaci¨®n profesional.

La mitad de los marroqu¨ªes residentes en Espa?a aseguran que mantienen con sus remesas a familiares en Marruecos, el 69% conf¨ªa jubilarse en su pa¨ªs de origen -la media en Europa es del 52%-, pero el 58% tiene antes la intenci¨®n de solicitar antes la nacionalidad espa?ola.

Con relaci¨®n a su propio pa¨ªs el 73% sostiene que la evoluci¨®n econ¨®mica ha sido positiva y un 52% afirma lo mismo a prop¨®sito de los derechos humanos.