Carolina de M¨®naco defiende a su marido ante la ley

La princesa Carolina de M¨®naco ha acudido esta ma?ana a la Audiencia de Hildesheim, en Alemania, a declarar como testigo en defensa de su marido, Ernesto Augusto de Hannover, en el juicio por la agresi¨®n del arist¨®crata al propietario de una ruidosa discoteca en Kenia, diez a?os atr¨¢s.

Frente a quienes aventuraban que cancelar¨ªa su comparecencia, una semana despu¨¦s del revuelo por las fotos del pr¨ªncipe en una playa tailandesa bes¨¢ndose con una supuesta amante, Carolina se ha presentado ante la Audiencia, convocada por la defensa de su esposo para declarar respecto a ese caso.

Se trata del segundo proceso por la agresi¨®n sufrida en enero de 2000 por el due?o de un local de la isla de Lamu donde el matrimonio pasaba sus vacaciones. Seg¨²n el agredido, Ernesto Augusto se present¨® capitaneando un grupo de vecinos furiosos porque su local estorbaba su paz y le asest¨® una paliza, armado al parecer con un pu?o de hierro.

El pr¨ªncipe sostiene que tal versi¨®n es exagerada, que s¨®lo le dio un par de bofetones y que el resto fue pura escenificaci¨®n para sacar partido al incidente.

Las im¨¢genes de Brunlehner ensangrentado, en un hospital de Mombasa dieron la vuelta al mundo. El primer juicio, en 2004, se cerr¨® con una multa de 445.000 euros a Ernesto Augusto, a lo que sigui¨® una querella del pr¨ªncipe contra su defensor por haber usado como atenuante, sin su consentimiento, que actu¨® bajo los efectos del alcohol.

La declaraci¨®n de Carolina se consideraba fundamental para apuntalar la tesis de que Brunlehner exager¨®, puesto que fue testigo de lo ocurrido. La princesa, que cancel¨® una comparecencia en noviembre, argumentando problemas de agenda, puso ahora como condici¨®n que se respetase una distancia de seguridad con los medios de tres metros, dentro de la Audiencia, y de veinte, fuera del recinto judicial.