El jurado declara culpable al acusado por asesinar a una mujer que le rechaz¨® en matrimonio
El veredicto pide rechazar la enajenaci¨®n mental incluso como atenuante
Culpable por asesinarla en plenas facultades mentales. Es el veredicto por unanimidad del jurado popular que ha juzgado a Mohamed Balkhir, acusado de asesinar a una mujer que se resist¨ªa a casarse con el asesino. Sanae Haddadi, que falleci¨® desangrada a cuchilladas en marzo de 2008 , fue atacada por Balkhir de forma predemitada y consciente, ha subrayado el jurado. La decisi¨®n tumba la tesis de la defensa, que solicitaba la absoluci¨®n del acusado por haber actuado bajo los efectos de un ataque de ansiedad que le habr¨ªa producido una enajenaci¨®n mental.
El jurado ha solicitado al magistrado que rechace esta posibilidad incluso como atenuante. "El acusado no hab¨ªa perdido el control de sus facultades mentales", ha concluido el jurado. El juez puede condenarle hasta 26 a?os de c¨¢rcel, seg¨²n la petici¨®n realizada por la Fiscal¨ªa.
Haddadi, de 27 a?os, muri¨® a manos del hombre al que hab¨ªa rechazado en matrimonio. El condenado pidi¨® la mano de la v¨ªctima a su familia, quien dio la decisi¨®n final a Hadidi, que declin¨® contraer ning¨²n tipo de compromiso. Obstinado en la boda, el acusado sigui¨® preparando el convite al tiempo que acos¨® y amenaz¨® a la fallecida hasta la noche del crimen. Balkhir esper¨® durante horas a que la v¨ªctima saliera del trabajo, la arrincon¨® contra una valla y le dio muerte. Luego emprendi¨® una huida hasta Lleida, donde fue detenido cuatro d¨ªas despu¨¦s. "Ella se iba a casar conmigo o no se casar¨¢ con nadie. La quer¨ªa mucho pero no recuerdo su cara ni qu¨¦ pas¨®", declar¨® el acusado durante el juicio.
El acusado ha asistido a la vista exhibiendo un aire desorientado hasta el extremo, respondiendo siempre con otra pregunta que en poco ten¨ªa que ver con la interrogaci¨®n que le hab¨ªan formulado. La actitud del presunto asesino cuadr¨® con el argumento de la defensa y crisp¨® al fiscal. Hasta que declararon los forenses psiqui¨¢tricos que examinaron al acusado en la c¨¢rcel. Estos se?alaron que el asesinato no se produjo en el trance de un trastorno ni de cualquier otra alteraci¨®n mental.
"Sufri¨® un trastorno de estr¨¦s postraum¨¢tico, pero despu¨¦s de cometer el delito", a?adieron para lamentar la puesta en escena del acusado durante su presencia en la sala. "Intenta simular delirios totalmente magnificados", alertaron los psiquiatras al jurado popular que ha dictado sentencia condenatoria.
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