Rajoy y G¨¦nova cierran filas con Camps

Mientras el partido entra en ebullici¨®n a la espera de que Francisco Camps haga algo frente al varapalo judicial, la direcci¨®n nacional, encabezada por Mariano Rajoy, ha decidido respaldarlo pase lo que pase, y esperar que sea ¨¦l quien decida su futuro. Si quiere dimitir, nadie se lo impedir¨¢, pero si quiere seguir, y desde luego en este momento esa parece ser su opci¨®n, no ser¨¢ Rajoy ni la direcci¨®n quien le pedir¨¢ lo contrario. El l¨ªder del PP se encerr¨® en su despacho en cuanto conoci¨® la noticia, durante la sesi¨®n de control al Gobierno, y sali¨® para comer acompa?ado de sus m¨¢s estrechos colaboradores, Jorge Moragas y Carmen Mart¨ªnez Castro, evitando en todo momento a la prensa.

Sin embargo, fuentes de la direcci¨®n insisten en que todos los mensajes que han trasladado tanto Rajoy en conversaci¨®n con el propio Camps como el resto de la direcci¨®n han ido en un mismo sentido: el apoyo se mantiene, la decisi¨®n del Supremo es un claro varapalo pero el l¨ªder del PP mantiene su compromiso personal y pol¨ªtico con el valenciano, uno de sus principales respaldos en los momentos dif¨ªciles, tras las derrota electoral de 2008. El PP insiste ahora en la estrategia de ganar tiempo.

De momento los dirigentes nacionales dicen que no est¨¢ imputado, cuando lo est¨¦ formalmente dir¨¢n que a¨²n no se ha sentado en el banquillo, y cuando se siente dir¨¢n que a¨²n no ha sido condenado. De hecho, la direcci¨®n, siempre optimista, a¨²n trabaja con la posibilidad de que finalmente no se siente en el banquillo. En cualquier caso, la estrategia fundamental es dejar en manos de Camps la decisi¨®n. Si no aguanta la presi¨®n y dimite, como hizo el ex tesorero Luis B¨¢rcenas despu¨¦s de un a?o de esc¨¢ndalos, Rajoy siempre podr¨¢ decir que ¨¦l apoy¨® a Camps hasta el final. Y ser¨¢ cierto.