"Estaba orgulloso de lo que hac¨ªa all¨ª"

Ten¨ªa dos pasiones, la Guardia Civil, en la que llevaba m¨¢s de una d¨¦cada, y el deporte. Abraham Leoncio Bravo Picallo, nacido en 1977 en la localidad coru?esa de Vimianzo, tuvo claro desde muy jovencito que quer¨ªa hacer carrera en el instituto armado. "Fue una vocaci¨®n, era muy apasionado, muy patriota y muy profesional", relataba tras la tragedia su t¨ªo, Jes¨²s Picallo, al comentar que el alf¨¦rez asesinado en Afganist¨¢n era el primero y ¨²nico en la familia que estaba en la Guardia Civil. "Lo m¨¢s parecido fue un abuelo suyo que fue marinero del Juan Sebasti¨¢n Elcano".

Abraham Bravo estaba soltero y viv¨ªa en el cuartel de Logro?o del Centro de Adiestramientos Especiales de la Unidad de Acci¨®n Rural (UAR), en la que estaba destinado desde 2008. Antes hab¨ªa estado en Negreira (A Coru?a) y Sep¨²lveda (Segovia). Su ¨²ltimo destino ha resultado ser Afganist¨¢n.

Abraham era ni?o cuando su familia se instal¨® en Aranda de Duero (Burgos), donde sigue viviendo su madre. Pero regres¨® a Galicia, su primer destino cuando comenz¨® su carrera como "agente raso" de la Guardia Civil. "Fue ascendiendo r¨¢pidamente y se especializ¨® en grupos antiterroristas, por lo que tampoco nos pod¨ªa dar muchos detalles de su trabajo, pero era su pasi¨®n, se volcaba en ello, de eso s¨ª que presum¨ªa", cuenta su t¨ªo horas antes de partir para Aranda de Duero, donde la madre de Abraham, viuda, estaba ayer recibiendo atenci¨®n psicol¨®gica por la fuerte conmoci¨®n que sufri¨® al enterarse del asesinato de su hijo.

"Era su orgullo, su estrella, lo exaltaba mucho y es incapaz de digerir la noticia", explica Jes¨²s Picallo desde Cee (A Coru?a), a donde Abraham acud¨ªa con regularidad para visitar a sus familiares. Sus dos hermanas tambi¨¦n se trasladaron por la tarde hasta la ciudad burgalesa para esperar con su madre el traslado del cad¨¢ver.

El joven alf¨¦rez, condecorado con una medalla de la OTAN tras especializarse en la ense?anza de t¨¦cnicas policiales antiterroristas, fue voluntario a Afganist¨¢n hace seis meses. Era su primera misi¨®n como instructor "y estaba orgulloso de lo que estaban haciendo all¨ª", subraya su t¨ªo.

Abraham combinaba su pasi¨®n laboral con su otra gran afici¨®n, el deporte. Gan¨® varios premios de atletismo y "era otra cosa de lo que estaba orgulloso, le encantaba".