"Venezuela no es el nuevo santuario de ETA"
Isa¨ªas Rodr¨ªguez, embajador de Venezuela en Espa?a, atendi¨® el mi¨¦rcoles a EL PA?S durante su visita a Euskadi. Su estancia coincide con la pol¨¦mica abierta en torno a Arturo Cubillas, funcionario del Gobierno de Hugo Ch¨¢vez al que el juez Eloy Velasco de la Audiencia Nacional apunta como presunto jefe de ETA en el pa¨ªs sudamericano.
Pregunta. ?Pertenece Arturo Cubillas a los c¨ªrculos de confianza del Gobierno de Venezuela?
Respuesta. No, Cubillas es un funcionario de una categor¨ªa muy baja en nuestro pa¨ªs. ?l es un funcionario de seguridad, ni siquiera tiene acceso a las decisiones importantes, solo se encarga de custodiar a personalidades. Yo no le conozco, as¨ª que no creo que el presidente Ch¨¢vez le conozca.
Perfil
Juli¨¢n Isa¨ªas Rodr¨ªguez D¨ªaz (1942, Valle de la Pascua, Venezuela), hombre cercano al presidente Hugo Ch¨¢vez, es abogado especialista en derecho laboral, ha sido vicepresidente de Venezuela en 2000 y Fiscal General entre 2001 y 2007. La oposici¨®n ha sido muy cr¨ªtica con su labor durante esta ¨²ltima etapa. Fue nombrado embajador en Espa?a en 2009 y ahora ha presentado su candidatura a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo venezolano. Tambi¨¦n es poeta y escritor.
P. Tal vez porque su esposa [Goizeder Odriozola] trabaja con el vicepresidente se suele decir que est¨¢ bien conectado con el poder en Venezuela.
R. Si tienes esposa te dar¨¢s cuentas que las relaciones de tu esposa no son tus mismas relaciones. Por la informaci¨®n que manejo, Cubillas se cas¨® con Odriozola en 1993. La esposa estuvo vinculada a una organizaci¨®n de Derechos Humanos, Provea, cuyo director, es ahora el defensor de Cubillas, Marino Alvarado, dirigente de la oposici¨®n.
P. ?Se ha quedado tranquilo su Gobierno con las explicaciones dadas por Cubillas a ra¨ªz del auto de la Audiencia Nacional?
R. Las explicaciones tendr¨¢ que darlas en la investigaci¨®n que est¨¢ haciendo el Ministerio P¨²blico sobre ¨¦l. Esto no es un problema del Gobierno, es un problema judicial, son dos poderes diferentes. La investigaci¨®n no ha conclu¨ªdo. Ni siquiera en Espa?a hay una resoluci¨®n, simplemente hay indicios. Hay dos declaraciones [En Espa?a] y dos declaraciones de unas personas que decidieron salir de las FARC. Hay que esperar al resultado de la investigaci¨®n.
P. ?Tiene constancia el Gobierno de Venezuela de la entrada de Xabier Atristain y Juan Carlos Besance en el pa¨ªs en 2008?
R. No tengo informaci¨®n de eso.
P. Qu¨¦ interes tendr¨ªan unos detenidos por vinculaci¨®n a ETA en decir que fueron adiestrados en Venezuela si no es cierto?
R. Los primeros indicios te van orientando a lo que tu crees que es el centro de la investigaci¨®n. La conclusi¨®n puede ser esa, que efectivamente hay responsabilidad de algunas personas sobre esos hechos que supuestamente se cometieron en Venezuela, pero no lo sabemos todav¨ªa.
P. Usted dijo el pasado dia 5 que tal vez no fuesen totalmente voluntarias.
R. Yo no dije nada de eso. Yo di una informaci¨®n en los titulares me la cambiaron, en el fondo de la informaci¨®n me la dejaron intacta pero el titular me lo cambiaron. En el momento en el que estoy dando la informaci¨®n hay una repregunta y digo que conf¨ªo en la Administraci¨®n de Justicia espa?ola, eso quiere decir que en ning¨²n momento voy a pensar que en la Justicia espa?ola se maltrata o se tortura. Yo establec¨ª una informaci¨®n sobre los conceptos te¨®ricos de la confesi¨®n, pero no dije en ning¨²n momento que la confesi¨®n de ellos fuese involuntaria.
P. Insisto. ?Tendr¨ªa inter¨¦s para un detenido por vinculaci¨®n a ETA decir que fue a Venezuela a entrenar si no fuera cierto?
R. Insisto en mi condici¨®n de abogado, cuando admites los hechos tienes una rebaja de la pena. Con tu declaraci¨®n puedes manifestar hechos que te ayuden. Si son ciertos o no, lo determinar¨¢ la investigaci¨®n.
P. Si pudiera hacer de nuevo su comparecencia del d¨ªa 5, ?medir¨ªa un poco m¨¢s sus palabras teniendo en cuenta el revuelo causado? El hecho de que un embajador pronuncie la palabra tortura ante los medios...
R. Lo primero que dije es que nosotros conden¨¢bamos el terrorismo en todas sus formas. Tenemos un r¨¦gimen democratico pacifico en Venezuela, hemos insisitido en la revoluci¨®n pacifica y lo primero que condenan las revoluciones pac¨ªficas es la violencia. Lo que pasa es que t¨² eres periodista. Para m¨ª, que soy abogado, la palabra tortura no quiere decir nada. Forma parte de mi l¨¦xico jur¨ªdico. Yo soy americano, la tortura no tiene la misma significaci¨®n que tiene para los europeos. Los periodistas buscaron la palabra con la cual hacer la noticia. T¨² sabes mucho de eso, a lo mejor la noticia estaba en esa palabra.
P. ?Cree que el juez Velasco es objetivo?
R. Creo que todos los jueces en principio son objetivos.
P. El mismo Ch¨¢vez insinu¨® que detr¨¢s de la instrucci¨®n del juez Velasco estaba la extrema derecha y el franquismo.
R. La extrema derecha y el franquismo utilizaron la actuaci¨®n del juez para hacer un discurso politico y esto fue lo que lleg¨® all¨¢. ?l, como Jefe de Estado, tiene el m¨¢s leg¨ªtimo derecho a defenderse con otro discurso pol¨ªtico. Esa figura que exist¨ªa en la Biblia de poner la otra mejilla es ya muy dif¨ªcil de sostener.
P. ?Es Venezuela el nuevo santuario de ETA?
R. No, no lo es. Para algunos en Espa?a, Francia fue un santuario de ETA y despu¨¦s se dieron cuenta de que no era un santuario.
P. S¨ª que pod¨ªan moverse con total libertad hasta que hubo un cambio de actitud del Gobierno franc¨¦s.
R. Ustedes ten¨ªan raz¨®n para pensar que hab¨ªa un santuario. Aqu¨ª parece que el santuario lo estuvieran creando con una beatificaci¨®n. Lo est¨¢n creando algunos medios de comunicaci¨®n sobre la base de descalificar el proceso transformador de Venezuela.
P. Pero esto se basa en documentos judiciales.
R. Una cosa es un auto de juez y otra un auto de fe. Un auto de juez es una investigaci¨®n un auto de fe es un hecho cierto. No me convierta un auto de juez en auto de fe.
P. Los servicios de inteligencia detectan movimientos de etarras hacia Venezuela desde otros pa¨ªses latinoamericanos. Un destacado miembro de la banda [Jos¨¦ Lorenzo Ayestar¨¢n] fue detenido en Francia [este a?o] cuando se supon¨ªa que estaba en Venezuela, desvinculado de ETA.
R. Venezuela no solamente ha colaborado ahora, incluso en un momento le dio salida y le entreg¨® a Espa?a dos miembros de esa organizaci¨®n a trav¨¦s de un proceso jur¨ªdico. Si ocurri¨® en ese momento, podr¨ªa ocurrir en otro. Un alto funcionario de la polic¨ªa fue a Venezuela y obtuvo toda la colaboraci¨®n del pa¨ªs. Tambi¨¦n se impidi¨® la entrada en el pa¨ªs de alguien que pod¨ªa tener contacto con ETA y se le envi¨® a Francia [Walter Wendelin]. Ha existido plena disposici¨®n a colaborar.
P. ?Se puede esperar a largo plazo la misma colaboraci¨®n de Venezuela que se obtuvo de Francia?
R. Con toda seguridad la pueden esperar.
P. ?Entiende usted el dolor y la rabia que puede generar en algunas v¨ªctimas de ETA el ver c¨®mo Cubillas sugiere que algunas victimas han asesinado y torturado a miles de vascos?
R. No solamente lo entiendo, lo comparto. Esas palabras no solamente estaban fuera de lugar, estaban fuera de contexto. Si fuera su abogado, lo ¨²ltimo que le hubiera aconsejado es que dijera eso.
P. El juez Velasco solicit¨® ayer al Gobierno que pida la extradici¨®n de Cubillas y sugiri¨® que se le retire la nacionalidad venezolana antes para facilitarla.
R. Para la extradici¨®n este es el tr¨¢mite que debe realizarse. Lo otro me imagino que es una petici¨®n de Gobierno a Gobierno para que se d¨¦ un acto administrativo. Espa?a lo solicitar¨¢ y Venezuela, de conformidad con los razonamientos y la motivaci¨®n con la que se exprese el Estado espa?ol, dar¨¢ la respuesta oportuna.
P. ?Qu¨¦ piensa Venezuela del alto el fuego de ETA?
R. Es un problema que no es nuestro y tenemos mucho cuidado de no tener injerencias en la politica de otros pa¨ªses, as¨ª como pedimos que no haya injerencias en la nuestra.
P. La izquierda abertzale les tiene como referente en panorama de la izquierda. ?Usted percibe esta sinton¨ªa?
R. Es la primera noticia que tengo. S¨¦ que para Izquierda Unida, y el Partido Comunista espa?ol somos una referencia. He visto tambi¨¦n que entre ellos hay algunas diferencias con la izquierda a la que t¨² te refieres. No conoc¨ªa esto, de ahora en adelante lo procesar¨¦.
P. ?Se ha reunido usted con representantes de Batasuna o la izquierda abertzale?
R. No, y no est¨¢ previsto reunirse.
P. La brecha con el PP sigue creciendo. Usted pidi¨® al partido que clarifique su posici¨®n.
R. La pregunta la hice porque el PP le sugiere al Gobierno de Zapatero que rompa relaciones con Venezuela. Si propone eso, el PP deberia se?alarle a sus electores si cuando ellos lleguen al poder, parte de su programa de gobierno ser¨¢ romper las relaciones con Venezuela. A efectos nuestros, si no rompimos las relaciones despu¨¦s del golpe de estado de 2002, no las romper¨ªamos si el PP llega a ser parte de las instituciones del Reino de Espa?a o del Estado de Espa?a.
P. ?Qu¨¦ opina del nombramiento de Trinidad Jim¨¦nez como nueva ministra de Asuntos Exteriores?
R. Es una decisi¨®n muy especial para Am¨¦rica Latina. A¨²n cuando tenemos las mejores opiniones de la conducci¨®n de la politica exterior por parte de Moratinos, de manea especial con Am¨¦rica Latina, al fin y al cabo era especialista en Israel y Oriente Medio. Y ahora Zapatero ha nombrado una especialista en America Latina. Nuestra opini¨®n es muy favorable.
P. ?Cree usted necesaria una revoluci¨®n socialista en la Europa del siglo XXI?
R. Cada pa¨ªs tiene su momento hist¨®rico y tiene que tomar una decisi¨®n en ese momento. Para nosotros ha llegado ese momento.
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