Detenido el preso que se fug¨® por segunda vez de prisi¨®n falsificando un fax judicial

Jos¨¦ Carlos Serna, de 57 a?os, se escap¨® por segunda vez de prisi¨®n el pasado diciembre. Estaba en la c¨¢rcel de Estremera (Madrid) por ser el cabecilla de una red que secuestr¨® en 2008 a un empresario espa?ol que fue liberado 15 d¨ªas despu¨¦s de su cautiverio en el Algarve portugu¨¦s. Serna no solo ha logrado fugarse dos veces, sino que encima lo ha hecho por el mismo m¨¦todo: un falso fax supuestamente remitido por la Audiencia Provincial de Madrid. Serna lo hizo en diciembre y apenas tres meses antes, el 15 de octubre de 2010, cuando se evapor¨® del centro penitenciario de Valdemoro. Seg¨²n informa la Jefatura Superior de la Polic¨ªa de Madrid en un comunicado, Jos¨¦ Carlos Serna ha sido detenido por tercera vez.

Fue en su domicilio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid), una vivienda completamente enrejada y de dif¨ªcil acceso, en la que se cre¨ªa seguro. Sobre todo, pensaba que era un buen escondite porque la casa hab¨ªa sido d¨ªas atr¨¢s registrada por la Polic¨ªa y en ella se hab¨ªa detenido a su mujer, autora de la falsificaci¨®n documental y compinche en su huida de prisi¨®n. Serna pensaba que esta era raz¨®n suficiente para que los agentes no volver¨ªan al lugar. Sin embargo, s¨ª que lo hicieron. Investigadores del Grupo de Secuestros y Extorsiones de la UDEV Central, de la Comisar¨ªa General de Polic¨ªa Judicial, le localizaron ayer all¨ª, escondido bajo un sof¨¢ que ten¨ªa preparado para ocultarse. Los polic¨ªas tuvieron que acceder al inmueble por el tragaluz del tejado.

Un fax y una funcionara de pega

Su segunda fuga se produjo cuando estaba punto de celebrarse el juicio oral por el secuestro por el que fue detenido. El Juzgado de Instrucci¨®n de Guardia de Arganda del Rey recibi¨®, a las dos de la tarde del 30 de diciembre, justo antes de cerrar la oficina judicial de Arganda durante cuatro d¨ªas por el puente de fin de a?o, un fax con membrete oficial procedente de la Secci¨®n 23 de la Audiencia Provincial de Madrid en el que se ordenaba la libertad del interno. O eso creyeron. Adem¨¢s, llam¨® una mujer que dijo ser funcionaria judicial de dicha secci¨®n para reiterar el contenido del escrito. El Juzgado de Instrucci¨®n de Arganda revis¨® las formalidades del fax e intent¨® contactar con la Secci¨®n 23, pero nadie contest¨® al tel¨¦fono. Al recibir una segunda llamada de la funcionaria, el juzgado extendi¨® el auto de libertad. Todo parece correcto y dos agentes de la oficina judicial de Arganda, responsable de la situaci¨®n del reo, acuden a la c¨¢rcel para liberarlo. Pero el fax y la funcionaria eran falsos.

Por segunda vez, y utilizando el mismo procedimiento, Serna se escapaba de prisi¨®n en un taxi que le esperaba. Sin embargo, su primera fuga dur¨® apenas tres d¨ªas, la segunda se ha prolongado tres meses. El caso caus¨® un tremendo revuelo y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid orden¨® una investigaci¨®n para determinar c¨®mo se pudo falsificar un documento y enviarlo por fax desde la Audiencia. La trama result¨® ser m¨¢s compleja y menos arriesgada.

Las investigaciones policiales pronto apuntaron a su mujer, Gema Mar¨ªa S.R, como autora de la falsificaci¨®n del documento p¨²blico. Desde un locutorio de Alcorc¨®n, con su propio ordenador, simul¨® un tel¨¦fono de la Audiencia Provincial, se hizo pasar por funcionaria y remiti¨® el fax que facilit¨® la huida a su marido. Gema fue detenida el 3 de marzo y se decret¨® su prisi¨®n provisional. En el registro de su vivienda se encontraron resguardos de ingresos que permitieron ir descubriendo la red de apoyos que Serna hab¨ªa tejido para permanecer oculto y seguro de la investigaci¨®n policial.

El fugitivo hab¨ªa adoptado medidas impensables en delincuencia com¨²n: hab¨ªa alquilado habitaciones en pisos de Madrid y una casa en Boadilla; hab¨ªa contratado conductores; ten¨ªa diversos terminales telef¨®nicos y cambiaba continuamente sus tarjetas. Dispon¨ªa, adem¨¢s, de una red de contactos a los que identificaba con abreviaturas. Con ellos contactaba por email y les daba instrucciones. Se hac¨ªa pasar por catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad italiana de Bolonia y dec¨ªa que ven¨ªa a contactar con profesores de las universidades madrile?as.

Seg¨²n la declaraci¨®n de sus conductores, estos creyeron su historia y en m¨¢s de una ocasi¨®n le llevaron a la Universidad Complutense y a la Aut¨®noma donde pensaban se citaba con otros profesores. A pesar de la extra?eza, ¨¦l sosten¨ªa que adoptaba estas medidas para evitar ser v¨ªctima del espionaje industrial. La investigaci¨®n policial fue estrechando el c¨ªrculo sobre el secuestrador fugado. Se establecieron dispositivos continuos de vigilancia durante diez d¨ªas en varios lugares en los que hab¨ªa estado, pero a los que nunca volvi¨®. Finalmente se le ubica en su domicilio familiar donde ayer fue arrestado. De nuevo, Jos¨¦ Carlos Serna ingresa en prisi¨®n.