Caf¨¦ en el Ayuntamiento
FOTOS: Jorge L¨®pez Conde
Desde hace unas semanas es posible desayunar, o merendar, muy cerca del alto mando, en uno de los edificios m¨¢s privilegiados de Madrid. Dos de los arquitectos m¨¢s creativos de esta ciudad, Luis D¨ªaz-Mauri?o y Luis ?rculo, han resuelto con ingenio, decisi¨®n y sobriedad la idea de tomar caf¨¦ en casa del alcalde (alcaldesa ahora). Y han centrado su talento en conseguir llevar sutileza a un inmueble imponente convertido hoy en ayuntamiento emblem¨¢tico. Apaciguar la diversidad y ocultar muchas de las instalaciones del antiguo Edificio de Correos, proyectado por Antonio Palacios, ha sido clave para poder apreciar los matices. De tranquilidad luminosa y matices est¨¢ hecha esta cafeter¨ªa Colecci¨®n Cibeles.
La idea era convertir un palacio en un espacio dom¨¦stico sin perder monumentalidad pero ganando cercan¨ªa. Y es en esa voluntad parad¨®jica donde sentidos como la vista y el tacto se combinan con la percepci¨®n on¨ªrica que consigue el grafismo de las alfombras ideadas por ?rculo -y tejidas en la India-, la altura de las salas y la levedad de la iluminaci¨®n con aires flotantes ideada por Fabi¨¢n Asunci¨®n, un arquitecto de Barcelona que durante a?os trabaj¨® con Enric Miralles.
As¨ª, el planteamiento es reversible. Los arquitectos han vestido el edificio de Palacios con nuevas pieles: de madera en la antigua capilla -hoy comedor (que ocupa un torre¨®n con vistas a Cibeles)-. Junto a ella, una sala, amueblada con barras de arce macizo, funciona como cafeter¨ªa. Y entre ambas, los accesos solo precisaron pintura.
Que la tradici¨®n revive actualizada lo demuestra no solo el traje sereno pero vitalista de la nueva cafeter¨ªa. Tambi¨¦n las sillas Thonet puestas al d¨ªa en dos versiones negro mate y el dise?o de todas las piezas, que ha corrido a cargo de los arquitectos pero podr¨ªan haber estado siempre en un sal¨®n vien¨¦s.
El blanco que impera en los 325 metros cuadrados de las dos salas tiene matices. Los paramentos de mobiliario y paredes combinan dos tejidos: los pliegues picudos de la madera de pino pintada de blanco y las telas blanco-gris para escenarios de la empresa danesa Kvadrat, que es a las telas lo que el celo a la cinta adhesiva: una marca convertida en nombre.
Los espacios de transici¨®n est¨¢n realizados en tabl¨®n de pino macizo tambi¨¦n pintado en blanco. Y las paredes de las antesalas, adem¨¢s del techo del sal¨®n donde est¨¢n las barras, est¨¢n pintados de gris oscuro para camuflar las instalaciones. El proyecto gr¨¢fico de Luis ?rculo incluye una barra luminosa que reproduce un gabinete de curiosidades. Y una idea similar en el ne¨®n de la antesala. Las alfombras tramadas en blanco y negro dan continuidad al suelo y, desde tan bajo, se convierten en el rostro del proyecto.
Comentarios
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.