Ingenier¨ªa anticonsumo

Los todoterrenos compactos son de los pocos coches que registran todav¨ªa aumentos de ventas. Mazda quiere su parte del pastel y acaba de presentar el nuevo CX-5, que busca hacerse un hueco entre la ingente competencia que compone una de las categor¨ªas m¨¢s disputadas del mercado: Nissan Qashqai, Ford Kuga, Toyota RAV4, Hyundai ix35, Kia Sportage, VW Tiguan, Honda CR-V, Mitsubishi ASX¡­ y as¨ª hasta m¨¢s de 15 modelos diferentes.

El CX-5 mide 4,55 metros de largo y es una de las propuestas m¨¢s grandes. De esta forma, marca la diferencia por su amplitud, porque incluye un interior muy desahogado, con espacio para todas las tallas tanto delante como detr¨¢s, y tambi¨¦n un buen maletero de 463 litros (cargado hasta la bandeja). Tiene cinco plazas y a?ade detalles muy pr¨¢cticos como el respaldo posterior abatible en tres partes (40/20/40), en vez de las dos habituales (60/40), que permite cargar bultos largos en el centro y mantener dos buenas plazas a los lados.

Aparte de su funcionalidad como familiar, el CX-5 sobresale tambi¨¦n por su bajo consumo, porque es el todoterreno compacto que menos gasta: desde solo 4,6 litros con motor 2.2 turbodiesel de 150 CV y desde seis con el 2.0 de gasolina y 165 CV. Estas cifras marcan un nuevo r¨¦cord entre los 4x4 de tama?o medio y dejan bien atr¨¢s a los Audi Q3 y BMW X1 con motor 2.0 turbodi¨¦sel (140 y 143 CV), que compart¨ªan el registro anterior de 5,2 litros.

La cifra de consumo lograda por Mazda tiene un m¨¦rito especial por el mayor tama?o de su modelo frente a la competencia y tambi¨¦n porque sus motores cuentan con mayor cilindrada y potencia. Para que estos aspectos no supongan un inconveniente, la marca ha reducido al m¨¢ximo el peso del coche y ha afinado tambi¨¦n hasta el ¨²ltimo detalle la aerodin¨¢mica y los motores. Mazda denomina como Skyactiv a todo este conjunto de medidas de ahorro de combustible.

El CX-5 m¨¢s ligero, con tracci¨®n delantera y motor de gasolina, pesa 1.420 kilos, incluidos los 75 kilos de conductor y equipaje que marca la normativa europea. Con mec¨¢nica turbodiesel sube a 1.520 kilos. En ambos casos, es unos 100 kilos m¨¢s liviano que los modelos similares. La clave est¨¢ en que aplica una mayor cantidad de aceros de resistencia alta y ultra alta, lo que permite utilizar piezas de menor grosor en la carrocer¨ªa sin comprometer la rigidez y resistencia estructurales.

En los motores hay asimismo avances interesantes. Para empezar, las mec¨¢nicas de gasolina y gas¨®leo tienen la misma relaci¨®n de compresi¨®n o presi¨®n interna de funcionamiento: 14 a 1. Esta relaci¨®n es muy baja para un motor di¨¦sel y muy alta para uno de gasolina, y en los dos casos permite optimizar la combusti¨®n e incrementar la eficiencia. Son los ¨²nicos propulsores del mercado con esta caracter¨ªstica.

Adem¨¢s, el motor 2.2 turbodi¨¦sel cumple ya la futura norma de emisiones europea UE6 (2014), que restringir¨¢ al m¨ªnimo las emisiones de ¨®xidos de nitr¨®geno (NOx) que pueden expulsar los motores di¨¦sel. La novedad est¨¢ en que Mazda ha conseguido satisfacer la UE6 sin tener que incluir un dep¨®sito de urea adicional, que es la soluci¨®n que aplican el resto de fabricantes para eliminar los NOx y que implica un mayor peso y un mayor coste.

En marcha, el nuevo CX-5 satisface en todos los escenarios. As¨ª, en autopista tiene aplomo y resulta c¨®modo por su baja sonoridad y suavidad de rodadura, y en carreteras de curvas se desenvuelve casi como un buen turismo y ofrece una agilidad destacable. No alcanza el dinamismo de un X1, ni tampoco el impecable tacto de mandos de un Q3, pero se acerca bastante y se sit¨²a entre los mejores en la mayor¨ªa de apartados.

Como es habitual en Mazda, el CX-5 tiene unos precios un poco m¨¢s altos que la media de sus competidores, aunque estas tarifas se asocian a un equipamiento de serie superior que compensa el sobre coste. Los dos motores descritos est¨¢n disponibles con cambio manual y autom¨¢tico, ambos de seis marchas, y tambi¨¦n con tracci¨®n delantera y 4x4.

El propulsor 2.0 de gasolina se vende con acabado Style en dos versiones: tracci¨®n delantera (165 CV y 24.790 euros) y 4x4 (160 CV y 27.790 euros). Tambi¨¦n se ofrece con el equipamiento superior Luxury, aunque en este caso solo con tracci¨®n 4x4 y cambio autom¨¢tico (32.890 euros). Este motor sorprende por su buen funcionamiento y, si no se hacen muchos kil¨®metros, puede ser una alternativa interesante al turbodi¨¦sel.

La mec¨¢nica 2.2 turbodi¨¦sel rinde 150 CV, empuja con alegr¨ªa y funciona con suavidad. Con acabado Style se ofrece con las cuatro configuraciones posibles: cambio manual y tracci¨®n delantera (26.990), manual y 4x4 (29.990), cambio autom¨¢tico y delantera (28.990) y autom¨¢tico y 4x4 (31.990).

Tambi¨¦n est¨¢ disponible con la terminaci¨®n Luxury, aunque siempre con tracci¨®n 4x4: manual (33.090) y autom¨¢tico (35.090).

El tope de gama es una variante de 175 CV del motor 2.2 turbodi¨¦sel con cambio autom¨¢tico, tracci¨®n 4x4 y acabado Luxury: cuesta 35.690 euros.

El equipamiento Style viene ya con todo de serie y no exige desembolsos adicionales: control de estabilidad y seis airbags, climatizador dual, ordenador de viaje, llantas de aleaci¨®n de 17 pulgadas, radio CD/MP3, puerto USB para archivos musicales, sensores de lluvia y luces, regulador de velocidad y hasta bluetooth para el m¨®vil.

El acabado Luxury suma tapicer¨ªa de cuero, asiento del conductor de ajuste el¨¦ctrico, sensor de aparcamiento, acceso y arranque sin llave, retrovisores con sistema de alerta de veh¨ªculo en el ¨¢ngulo ciego, equipo de m¨²sica de alta fidelidad de la marca Bose y llantas enormes de 19 pulgadas.

En las dos terminaciones, puede montarse como opci¨®n techo solar (770 euros), navegador (500) y otros detalles.