Arabia Saud¨ª y Espa?a: cuando el negocio amenaza los derechos humanos
Esta entrada ha sido escrita por Mar¨ªa del Pozo Sierra, responsable de Pol¨ªtica Exterior en Amnist¨ªa Internacional Espa?a.
Carro de combate Leopard 2E de fabricaci¨®n espa?ola. Fuente: Regimientofarnesio.es
Nadie niega el derecho de un gobierno a apoyar la presencia exterior de sus empresas. Pero, cuando se trata de derechos humanos y del respeto a la vida, este apoyo tiene l¨ªneas rojas que no debemos cruzar. El caso de Arabia Saud¨ª ha hecho saltar las alarmas en muchas ONG y medios de comunicaci¨®n.
En los pocos meses que llevamos de legislatura sorprende la inusitada frecuencia de encuentros y visitas entre representantes del Estado espa?ol y el Reino de Arabia Saud¨ª. Adem¨¢s del contrato del AVE y de otros negocios que desconocemos, es constante el rumor sobre la posibilidad de cerrar el mayor contrato armament¨ªstico de la industria militar espa?ola: nada m¨¢s y nada menos que unos 250 carros de combate Leopard valorados en unos 3.000 millones de euros. Seg¨²n informaciones aparecidas en prensa, este contrato garantizar¨ªa la importante cifra de unos 250 puestos de trabajo en seis a?os.
?No hay otras alternativas? ?Estamos dispuestos a pagar el precio que puede conllevar esta venta?
No estoy hablando de que no se exporte ning¨²n producto armament¨ªstico a Arabia Saud¨ª, ni de hacer listas negras de pa¨ªses. Es mucho m¨¢s sencillo y obvio: se trata de no exportar seg¨²n qu¨¦ productos a aquellos lugares en los que exista un riesgo sustancial de que puedan ser usados para cometer o facilitar violaciones de derechos humanos.
El Gobierno espa?ol dice que analiza los contratos caso por caso y que se adoptan las necesarias garant¨ªas. Sr. Moren¨¦s: teniendo en cuenta que Arabia Saud¨ª bombarde¨® en 2009 a poblaci¨®n civil en Yemen y que no hace ni un a?o mand¨® tanques a Bahr¨¦in para ayudar a aplastar las protestas en demanda de reformas, ?en base a qu¨¦ elementos considera que no existe ese riesgo? ?En base a qu¨¦ an¨¢lisis considera que esta posible venta ser¨ªa acorde a la legislaci¨®n espa?ola? ?C¨®mo puede garantizar que en el futuro no tendremos que lamentar la utilizaci¨®n de esos productos espa?oles en violaciones de derechos humanos?
Al responder a las preocupaciones sobre el estado de los derechos humanos en este pa¨ªs, el Ministro de Defensa ha dicho que cree que ¡°hay una evoluci¨®n, desde su idiosincrasia¡±. Pero, seg¨²n Amnist¨ªa Internacional, en Arabia Saud¨ª las violaciones de los derechos humanos incluyen la pena de muerte, la tortura, la flagelaci¨®n, las amputaciones, la discriminaci¨®n de la mujer o la represi¨®n de las protestas pac¨ªficas. Sin poder olvidarnos del contexto, tanto presente como pasado, en el que se encuentra la regi¨®n.
Los derechos humanos, Sr. Ministro, no se miden por ¡°idiosincrasias¡±. Los derechos humanos se caracterizan por ser absolutamente universales. Es decir, aspiramos a que los saud¨ªes, yemen¨ªes y bahrein¨ªes disfruten exactamente los mismos derechos humanos que los espa?oles y las espa?olas. Y ni la crisis ni la terrible realidad del paro nos pueden llevar a justificar lo injustificable.
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