Rio+20: Econom¨ªa verde si, capitalismo verde no

Por Isabel Ortigosa, Responsable de Incidencia de InspirAction

Hablar de R¨ªo+20 implica casi inevitablemente hablar del concepto de la 'econom¨ªa verde', sea para criticarlo o para apoyarlo. El sector privado tiene un inter¨¦s particular en este enfoque de 'crecimiento verde' que se debate estos d¨ªas en la Cumbre de Sostenibilidad de Naciones Unidas en R¨ªo de Janeiro. De hecho, una de las grandes diferencias con R¨ªo 92 es la fuerte presencia de empresas en la cumbre oficial. Un lobby que, en la b¨²squeda de nuevos mercados para productos y servicios 'verdes', parece estar consiguiendo sus objetivos en R¨ªo.

Pero el sector empresarial es s¨®lo uno de los actores que tiene algo que decir en el debate en torno a la econom¨ªa verde. En la Marcha convocada ayer por la Cumbre de los Pueblos, a la que seg¨²n c¨¢lculos de la organizaci¨®n asistieron m¨¢s de 80.000 personas, la econom¨ªa verde fue duramente criticada. Los movimientos sociales consideran que cuando en R¨ªo Centro, la sede en la que se concentran los negociadores oficiales, se habla de econom¨ªa verde, en el fondo lo que se quiere decir es ¡°capitalismo verde¡±, con el riego que esto implica para la mercantilizaci¨®n de la vida y de la naturaleza. Los grandes lemas de la Marcha coincid¨ªan en la necesidad de cuestionar el actual modelo econ¨®mico y de desarrollo, buscando alternativas que garanticen el bienestar y la prosperidad para todos, dentro de los l¨ªmites ecol¨®gicos del planeta.

No podemos seguir embarcados en un proyecto de futuro basado en el crecimiento a toda costa, porque a estas alturas del viaje, est¨¢ claro que no funciona. Que no nos vendan ¡°econom¨ªa verde¡± cuando quieren decir ¡°capitalismo verde¡±, reclaman los movimientos sociales. Todo modelo econ¨®mico deber¨ªa poner las necesidades de la persona y del planeta en primer lugar, por delante de los beneficios. Porque una econom¨ªa que no se base en los principios de equidad, justicia, sostenibilidad, rendici¨®n de cuentas, respeto al medio ambiente y participaci¨®n de todos, especialmente de los m¨¢s pobres y la sociedad civil, podr¨¢ ser verde, pero no ser¨¢ justa. Por lo tanto necesitamos un cambio de mentalidad en el sector privado, as¨ª como un cambio legislativo que impida abusos y facilite resultados justos y sostenibles.

Desde su inicio el d¨ªa 15, en la Cumbre de los Pueblos se han denunciado una y otra vez las falsas soluciones que, en la b¨²squeda desenfrenada de crecimiento y lucro, acaban provocando graves da?os sociales o ambientales: el mercado internacional de carbono es s¨®lo un ejemplo de ganancias logradas a expensas de las personas y del planeta. Es necesario construir enfoques integrales y sostenibles, con claras salvaguardas ambientales y sociales, que superen el extractivismo y respeten los derechos y la autonom¨ªa de los pueblos. ?Escuchar¨¢n, los l¨ªderes llegados a R¨ªo, el clamor de los pueblos?