Alternancia mexicana

Si las encuestas aciertan ¡ªy apuntan a una distancia clara en favor del candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Pe?a Nieto¡ª, los mexicanos decidir¨¢n hoy una alternancia en la presidencia de la Rep¨²blica tras 12 a?os de predominio del Partido de Acci¨®n Nacional (PAN) en periodo democr¨¢tico. No son las encuestas las que votan, sino los ciudadanos. Pero si se confirman los vaticinios, no significar¨¢ una vuelta atr¨¢s. El PRI de hoy no es el que gobern¨® durante setenta a?os en la llamada dictadura perfecta, ni M¨¦xico es el mismo, pese a persistir un alto grado de corrupci¨®n. Aunque la pol¨ªtica mexicana est¨¦ a¨²n demasiado distanciada de la ciudadan¨ªa, esta es una democracia abierta.

M¨¦xico ha cambiado profundamente, pero los seis primeros a?os del PAN, con el presidente Vicente Fox, fueron econ¨®mica y socialmente mucho m¨¢s provechosos que los del mandato siguiente de Felipe Calder¨®n. Este se ha enfrentado a una crisis econ¨®mica, no ha sabido reducir la desigualdad econ¨®mica y su guerra contra los narcotraficantes, en la que no han entrado los candidatos, no solo no ha tenido ¨¦xito, sino que ha elevado el nivel de violencia en el pa¨ªs.

El relevo en la presidencia no se producir¨¢ hasta el 1 de diciembre. Cinco meses de transici¨®n son un periodo demasiado largo, aunque el nuevo Congreso se constituir¨¢ tres meses antes, en sus dos c¨¢maras, que tambi¨¦n se eligen este domingo, con una importancia crucial. Pues si, como le ha ocurrido a los tres ¨²ltimos, el pr¨®ximo presidente no cuenta con una mayor¨ªa en el Parlamento, no podr¨¢ hacer las reformas que M¨¦xico necesita con urgencia, sobre todo en materia energ¨¦tica, laboral, fiscal y educativa.

La candidata del PAN, Josefina V¨¢zquez Mota, ha llevado a cabo una campa?a plagada de errores, conservadora, demasiado pegada a la Iglesia cat¨®lica y sin atractivo. Puede arrastrar en su ca¨ªda a su partido. Ahora bien, no ser¨ªa bueno para la profundizaci¨®n de la democracia mexicana que el PRI se quedara sin una oposici¨®n real a su derecha, con solo a su izquierda la voz cr¨ªtica del PRD (Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica), cuyo candidato Andr¨¦s L¨®pez Obrador va segundo en las encuestas, y si no gana es m¨¢s que posible que discuta el resultado. M¨¦xico, sin embargo, no puede permitirse otra presidencia con sombra de ilegitimidad.