Marbella renace de sus estrellas

Bajo las herrumbrosas letras con el mensaje Auditorio Marbella que, a la manera de Hollywood se despliegan sobre una colina a las afueras de la ciudad malague?a (solo que estas, en vez de dejar leer el mensaje lo dejan intuir, al estar la mitad ca¨ªdas), pasaron ayer varias decenas de famosos del panorama patrio y for¨¢neo. Y con su presencia, desataron el acontecimiento m¨¢s glamuroso del verano: la gala Starlite, que cumpl¨ªa su tercera edici¨®n. La raz¨®n de tanta concentraci¨®n de celebrities por metro cuadrado de alfombra roja fue la de una voluntad com¨²n, metaf¨®ricamente emparentada con esas letras derrumbadas que yacen frente a una vieja cantera hoy en desuso: la de levantar algo nuevo de entre los escombros. Recuperar la Marbella que un d¨ªa fue sin¨®nimo de lujo y refinamiento, y que poco a poco se fue disolviendo en un miasma de exceso y decadencia abanderado por los protagonistas del caso Malaya y de otros tantos esc¨¢ndalos y corruptelas a lo largo de las ¨²ltimas d¨¦cadas. Y, por supuesto, todo con fines ben¨¦ficos.

Nombres en el candelero como los de Pastora Soler o Carmen Lomana; apariciones del pasado como John Secada o ?ngel Gar¨®; asiduas del cuore nacional como Ana Obreg¨®n o Mar¨ªa Pineda; castas de rancio abolengo como los Hohenlohe o los Von Bismarck¡­ Todos atravesaron a trompicones, detenidos a cada paso por los reporteros, el camino del photocall hacia la sala donde les esperaban unos blancos sillones y unos aperitivos previos a la cena de Paco Roncero servida por ElBulli c¨¢tering. Y todos quedaron eclipsados por la presencia en may¨²sculas, la del tr¨ªo m¨¢s esperado que, como si pudiera pasar de inc¨®gnito, apareci¨® en ¨²ltimo lugar y completamente equipado de negro: Antonio Banderas, el anfitri¨®n del evento, escoltado por su mujer, Melanie Griffith, y la hija de ambos, Stella del Carmen. Tal fue la expectaci¨®n y la impaciencia por verlos, que se produjo incluso un conato de trifulca entre un paparazzo ¨¢vido de proximidad con los protagonistas de la velada y los guardas de seguridad.

Solo dos figuras, quiz¨¢s, pudieron hacer algo de sombra a la familia que, reunida, disipaba los recientes rumores de ruptura matrimonial. Por un lado, la actriz estadounidense Daryl Hannah, que recib¨ªa el Premio Humanitario Starlite 2012 por su labor de preservaci¨®n del medio ambiente, y que cuadraba el tri¨¢ngulo amoroso perge?ado por Fernando Trueba hace casi 18 a?os en la pel¨ªcula Two Much. Por el otro, el cantante almeriense David Bisbal, encargado de amenizar la velada con algunos temas. Eva Longoria, anfitriona de honor junto a Banderas en las pasadas ediciones, fue la notable ausencia de la noche, debido, seg¨²n asegur¨®, a problemas de agenda.

Gestionada desde este a?o por Avory Celebrity Access, una empresa de desarrollo de proyectos con famosos, la fiesta de Starlite, con 500 cubiertos disponibles bien por 800 o 1.000 euros, destina su recaudaci¨®n a dos fundaciones que apoyan a menores desfavorecidos: Ni?os en Alegr¨ªa y L¨¢grimas y Favores, esta ¨²ltima creada por Banderas. En este 2012, de un d¨ªa de gala como se hizo los dos a?os anteriores, se ha pasado a un mes entero de conciertos de estrellas con solera. Entre el 13 de julio al 14 de agosto, han pasado o pasar¨¢n por Marbella cantantes de la enjundia de Julio Iglesias, Paul Anka o Armando Manzanero. Y entremedias, se mantiene esta cena ben¨¦fica, que adem¨¢s recauda dinero a trav¨¦s de una ¡°subasta de experiencias¡±, en la que los famosos sacan a puja un rato en su compa?¨ªa.

Cena, concierto y subasta fueron a puertas cerradas. Pero solo con la alfombra roja, el acontecimiento dio de s¨ª. Todos felices, todos encantados, todos entusiasmados de colaborar con una causa justa, los famosos derrocharon sonrisas, comentarios y poses para los periodistas apostados al otro lado de la cinta de seguridad. ¡°Siempre somos solidarios¡±, dec¨ªa Antonio Carmona. ¡°Hay que tratar de devolver un poquito lo que uno ha recibido¡±, contraatacaba Bisbal. ¡°Estoy esperando a que se acaben los fantasmas y empiecen las hadas¡±, exhortaba Banderas. Aunque quiz¨¢, nada tan enigm¨¢tico como el comentario de ?gatha Ruiz de la Prada, que acudi¨® a la fiesta sin su pareja, Pedro J. Ram¨ªrez, director de El Mundo. ¡°No est¨¢ aqu¨ª porque est¨¢ con mucho l¨ªo en Madrid. Ma?ana van a tener una portada de esas hist¨®ricas¡±, asegur¨®. Lujo, glamur, solidaridad¡­ e intriga.