Ecuador arriesga con Assange

Hace ocho semanas, Julian Assange ¡ªel fundador de Wikileaks y autodenominado v¨ªctima de una imaginada conspiraci¨®n pol¨ªtica internacional¡ª, busc¨® asilo en la Embajada ecuatoriana en Londres. (¡­) La ¨²ltima semana Ecuador le concedi¨® su petici¨®n. (¡­)

(...) El se?or Assange afirma que la extradici¨®n a Suecia resultar¨¢ en su entrega a Estados Unidos, que, debido a su bochorno con los cables diplom¨¢ticos y diarios militares que Wikileaks hizo p¨²blicos, podr¨ªa someterle a la pena de muerte. En una especie de conferencia de prensa el domingo, en la que Assange tuvo cuidado de no salirse mucho del balc¨®n de la Embajada, lleg¨® a reclamar a Estados Unidos el fin de su caza de brujas contra la organizaci¨®n.

Rafael Correa, presidente de Ecuador declaradamente antiamericano, (¡­) es consciente de que Estados Unidos ni ha acusado al fundador de Wikileaks de ning¨²n crimen ni ha reclamado su extradici¨®n. ?Por qu¨¦ ofrecerle asilo entonces? (¡­)

El se?or Correa (...) puede imaginar que proteger a Assange le dar¨¢ un muy necesitado impulso a su reputaci¨®n internacional. Pero tambi¨¦n le podr¨ªa acarrear consecuencias econ¨®micas desastrosas a su pa¨ªs. Estados Unidos, que Correa tanto desprecia, (¡­) mantiene unos 400.000 empleos en un pa¨ªs de 14 millones de personas y constituye un tercio de las ventas externas de Ecuador. El Congreso podr¨ªa f¨¢cilmente decidir disminuir ese acceso privilegiado comercial. (...)

Merece realmente el se?or Assange correr ese riesgo?

Washington, 21 de agosto