A la caza de Kathryn Bigelow

La pel¨ªcula La noche m¨¢s oscura est¨¢ centrada en los diez a?os de investigaci¨®n y b¨²squeda que llevaron a la caza, captura y muerte de Osama bin Laden. Hablar con su directora, Kathryn Bigelow, tambi¨¦n llev¨® su tiempo. Es la realizadora m¨¢s buscada y quiz¨¢ por ello tambi¨¦n la m¨¢s huidiza. Dos ciudades, Nueva York y Los ?ngeles, dos estudios y dos relaciones p¨²blicas (para una mujer que dice no tener m¨¢s representante que su agente y que se mueve fuera del Hollywood con may¨²sculas), adem¨¢s de una premi¨¨re, fueron necesarias para conseguir una entrevista donde Bigelow, de 61 a?os, no se siente c¨®moda. ¡°Estoy acostumbrada a estar detr¨¢s de las c¨¢maras, no a tenerlas delante, a sentirme secuestrada¡±, confiesa a pesar de su evidente seguridad.

Dio todo tipo de excusas. ?ltimos toques de posproducci¨®n; que si estaba muy ocupada con la campa?a publicitaria de esta controvertida cinta, donde siempre compareci¨® arropada por su guionista, Mark Boal¡­ Incluso hubo quien cit¨® una enfermedad futura, como si esta amazona escultural cuya planta poco dice de su edad pudiera caer enferma a voluntad. Lo ¨²ltimo fue una afecci¨®n de garganta de la que no queda rastro cuando finalmente se sienta a hablar. ¡°Supongo que uno se acostumbra a todo porque ayer perd¨ª la voz por completo¡±, se r¨ªe de sus excusas esta mujer, por lo dem¨¢s dura de pelar. Quiz¨¢ la m¨¢s dura de Hollywood. Una mujer que hizo historia. La primera realizadora que consigui¨® un Oscar en esta categor¨ªa, arrebat¨¢ndoselo a James Cameron, con quien dos decenios antes estuvo casada.

Ese triunfo data de 2010. Con En tierra hostil, adem¨¢s del Oscar a la mejor direcci¨®n, obtuvo otras cinco estatuillas, mejor pel¨ªcula incluida. En los premios de la Academia estadounidense de este a?o,?La noche m¨¢s oscura acumula cinco candidaturas, mientras que en los Globos de Oro ha competido por cuatro galardones (mejor direcci¨®n, pel¨ªcula, gui¨®n y actriz protagonista) que se han quedado en uno solo: el de mejor actriz para Jessica Chastain.

Parece evidente que esta realizadora, que tambi¨¦n trabaj¨® como modelo y actriz, no se dio tiempo a descansar tras el ¨¦xito de su anterior filme. Se sumergi¨® en la mayor operaci¨®n de caza y captura que hubo nunca centrada en el hombre m¨¢s buscado de la historia reciente: Osama bin Laden. Un proyecto en el que empez¨® a trabajar junto a Boal antes de ese 2 de mayo de 2011 que lo cambi¨® todo, cuando un equipo de ¨¦lite del Ej¨¦rcito estadounidense dio muerte al l¨ªder de Al Qaeda en Abbottabad, en la frontera de Pakist¨¢n.

Hablo de la captura de Bin Laden desde la perspectiva de la gente de a pie¡±

¡°Est¨¢bamos trabajando en un proyecto sobre la captura que nunca lleg¨® a ser, cuando estuvieron a punto de darle caza en las monta?as de Tora Bora en 2001¡±. Iba a ser la historia de un fracaso. Y luego, como le gusta repetir a Bigelow, ¡°la historia se puso en nuestro camino¡±. Se refiere al mensaje del presidente estadounidense, Barack Obama, a la naci¨®n confirmando la muerte de Bin Laden. Fue un duro punto de inflexi¨®n, donde, como recuerda Boal, tuvieron dos opciones: tirarlo todo y olvidarse del proyecto o tirarlo todo y comenzar de nuevo. Bigelow, siempre dada al camino m¨¢s dif¨ªcil, opt¨® por lo segundo. ¡°Y Kathryn siempre tiene raz¨®n¡±, admite el guionista con la devoci¨®n y amistad que uno desarrolla tras dos duras pel¨ªculas juntos como En tierra hostil y La noche m¨¢s oscura. ¡°Sentimos la necesidad de contar la b¨²squeda y captura del hombre m¨¢s peligroso del mundo desde la perspectiva de la gente de a pie, de aquellos en el centro de la operaci¨®n, mujeres y hombres en el servicio secreto encargados de buscar una gran aguja, s¨ª, pero en un gran pajar. La curiosidad de desvelar con fidelidad todos los misterios y preguntas abiertas en este extraordinario viaje en el que estuvimos embarcados la ¨²ltima d¨¦cada¡±. De nuevo las palabras de Obama fueron cr¨ªticas en su decisi¨®n. Como dijo el presidente estadounidense en su mensaje a la naci¨®n ese 2 de mayo al agradecer su labor al servicio secreto y otras agencias involucradas en la operaci¨®n, ¡°el p¨²blico no ve su trabajo ni sabe sus nombres, pero hoy sienten la satisfacci¨®n de su trabajo y ven el resultado de su lucha por la justicia¡±.

Seria, aunque de sonrisa f¨¢cil. Facciones duras, suavizadas por la media melena lisa que se recoge en una coleta cuando se pone detr¨¢s de la c¨¢mara. Con una voz m¨¢s juvenil y menos grave de la que esperas de una mujer atra¨ªda siempre por los temas m¨¢s duros. Con aspecto de estricta gobernanta, Bigelow asegura que, pese a lo que se puede leer de sus ¨²ltimos trabajos, no se considera una persona pol¨ªtica. ¡°Son las historias de actualidad las que me interesan, su inmediatez, su cercan¨ªa, el hecho de que se desarrollan en el mundo en el que vivimos. Este es un momento hist¨®rico que nos ha tocado vivir y no me puedo imaginar otro igual¡±, a?ade en referencia a la trama de La noche m¨¢s oscura.

Esta es una historia tambi¨¦n dif¨ªcil, porque precisamente esa inmediatez, esa cercan¨ªa a los hechos que narra, la sit¨²an f¨¢cilmente en tierra hostil por todos los flancos. Quiz¨¢ en el ¨²nico donde se vio arropada fue el campo de la financiaci¨®n, avalada por el Oscar de su anterior trabajo y con un tema de actualidad entre manos. ¡°Pero como soy muy espec¨ªfica en el material que me interesa, la disponibilidad de fondos tampoco cambi¨® tanto¡±, reconoce sobre esta producci¨®n independiente de 30 millones de d¨®lares. Una minucia en t¨¦rminos de Hollywood, al menos para una gran producci¨®n que va encontrando hueco entre los principales premios de la industria.

Todo lo dem¨¢s fue de locos, aunque eso no lo escuchar¨¢n nunca en labios de Bigelow. ¡°Ella solo piensa en su siguiente plano, en mantenerse dentro del presupuesto. Nada m¨¢s. Pocos directores en esta ciudad ser¨ªan capaces de enfrentarse a este material con su bravura y arte¡±, a?ade el guionista, cuya camarader¨ªa con Bigelow, 20 a?os mayor que ¨¦l, har¨ªa f¨¢cil pensar en cualquier otro tipo de relaci¨®n m¨¢s all¨¢ de la profesional.

Nunca solicitamos material clasificado ni somos conscientes de que nos fuera proporcionado¡±

El profesor y la capitana, les bautizaron, respectivamente, Jessica Chastain y Edgar Ram¨ªrez, dos de los principales protagonistas de La noche m¨¢s oscura. El filme ha contado con 120 papeles con di¨¢logo, rodado en tres continentes con 112 sets, incluida una r¨¦plica de la casa fortaleza de Abbottabad construida en Jordania, cerca del mar Muerto.

¡°Esta pel¨ªcula fue como volver a la escuela por la cantidad de libros que le¨ªmos. Trabaj¨¦ mano a mano con Mark, quien estuvo a diario en el rodaje, revisando conmigo los di¨¢logos para ser lo m¨¢s fieles y correctos posible. De ah¨ª el mote¡±, recuerda la actriz, segura candidata al Oscar y probablemente a su victoria por el papel de Maya, la agente de la CIA en el centro de la investi??gaci¨®n. Un personaje que en el reciente libro Un d¨ªa dif¨ªcil (editorial Cr¨ªtica), escrito por uno de los miembros de las fuerzas especiales que formaron parte del asalto a Bin Laden, se llama Jen y est¨¢ inspirado en una o varias personas que tomaron parte en la b¨²squeda. Porque, como insisten tanto Boal, periodista antes que guionista, como Bigelow, todo lo que figura en la pel¨ªcula est¨¢ basado en testimonios obtenidos de aquellos que tomaron parte o estuvieron relacionados con la b¨²squeda y captura.

¡°Dado que En tierra hostil fue bien recibida entre estas fuerzas, hubo esa confianza de que tanto Mark como yo tratar¨ªamos la historia con respeto y fidelidad. Y Mark escribi¨® un guion magn¨ªfico, que fue un regalo que me puso en las manos. Los realizadores, al igual que los periodistas, tenemos un deber cuando tratamos la historia que nos rodea, la que se est¨¢ desarrollando mientras rodamos¡±, insiste Bigelow. Un trato preferente que en ning¨²n caso hace referencia a la pol¨¦mica que rodea a este trabajo en EE UU, donde desde su concepci¨®n fue acusado de contar con acceso a informaci¨®n clasificada. Algo que tanto Boal como la directora niegan categ¨®ricamente. ¡°Nunca solicitamos material clasificado ni somos conscientes de que nos fuera proporcionado¡±, es la cr¨ªptica frase en la que ambos se escudan.

Tambi¨¦n aseguran que, pese a lo repetido entre la oposici¨®n a Obama en este a?o electoral, la pel¨ªcula nunca tuvo ¡°una agenda pol¨ªtica¡±, y que, dentro de la fidelidad a lo que ocurri¨®, no es un documental ni lo pretende ser. Protege los secretos y la identidad de aquellos que participaron. Pero ambos coinciden en que el personaje de Maya, o Jen, o comoquiera que se llame la persona en la que est¨¢ inspirada, existe y es una mujer. ¡°Esa fue mi mayor sorpresa. Saber que era una mujer la persona en el centro de esta operaci¨®n, maravillarme de ello y sorprenderme de mi sorpresa porque era una mujer¡±, afirma Bigelow. ¡°Con esa idea de Jason Bourne / James Bond que tenemos en la cabeza cuando hablamos del servicio secreto, la importancia que tienen las mujeres en la CIA tambi¨¦n fue una sorpresa para m¨ª¡±, corrobora Boal.

Lo de capitana se lo invent¨® el actor venezolano Edgar Ram¨ªrez y es f¨¢cil de ver cuando Bigelow da ejemplos de un rodaje que tambi¨¦n utiliz¨® India como doble de Pakist¨¢n. ¡°Era cine de guerrilla. Kathryn y yo tuvimos que huir literalmente de uno de los sets cuando se organiz¨® una manifestaci¨®n en contra de la pel¨ªcula (por parte del grupo de ultraderecha hind¨² Vishwa Parishad), fruto de las tensiones entre Pakist¨¢n e India. Nos largamos y seguimos filmando en otras calles, sin que cortaran el tr¨¢fico ni nada, con Kathryn y su camar¨®grafo en la furgonetita en la que yo iba con los actores¡±, recuerda el actor de su l¨ªder, a quien admira desde los tiempos de Le llaman Bodhi. ¡°Luego, en el rodaje, es una mujer muy s¨®lida que sabe exactamente lo que quiere. Mantiene un balance perfecto entre mostrarse fuerte y directa con ser dulce y generosa. Y siempre segura. Ese es su secreto: sabe mantener la calma porque tiene muy claro lo que quiere¡±.

Los halagos son precisamente lo ¨²nico para lo que Bigelow no est¨¢ preparada. En lugar de aceptarlos con gracia o desmentirlos entre muestras de falsa modestia, la californiana prefiere no darse por aludida. ¡°No s¨¦ c¨®mo responder a algo as¨ª¡±, es lo ¨²nico que articula ante la cr¨ªtica de la revista Time sobre La noche m¨¢s oscura, donde Richard Horliss describe a Bigelow como la realizadora ¡°con m¨¢s cojones¡± en EE UU. Antes prefiere atribuir halagos a su reparto, especialmente a Chastain, cuyo trabajo conoce desde Coriolanus y de quien dice que es ¡°una persona que no le teme a nada¡± y es a la vez capaz de ¡°humanizar¡± esta caza con su amplio registro para los peque?os detalles.

Tambi¨¦n tiene palabras de amor para el resto de sus actores una directora conocida por sacar lo mejor de cada uno en sus filmes. Es la mujer que descubri¨® a Keanu Reeves como un actor de acci¨®n con Le llaman Bodhi, mostr¨® las sutilezas de un Ralph Fiennes en D¨ªas extra?os y dio una carrera a Jeremy Renner con En tierra hostil. ¡°Siempre busco buenos actores, con una s¨®lida carrera, pero especialmente en esta ocasi¨®n no quer¨ªa que su nombre o interpretaciones pasadas interfirieran con lo que ves en la pantalla¡±. Aun as¨ª, Chastain prefiere recordar la generosidad de esta capitana. ¡°El rodaje de La noche m¨¢s oscura fue muy duro, por el lugar donde rodamos, por las escenas de tortura y sobre todo porque el personaje es completamente diferente a m¨ª. Yo soy todo risas, y Maya solo tiene una idea en la cabeza: capturar a Osama bin Laden. Pero Kathryn fue genial. Sab¨ªa de mi amor por los animales, lo mismo que ella, y no hac¨ªa m¨¢s que mandarme v¨ªdeos de perros adoptados o cosas as¨ª. Es incapaz de perder su humanidad. Bajo ninguna circunstancia¡±.

?Kathryn Bigelow viendo v¨ªdeos de gatitos en Youtube? Una imagen dif¨ªcil de asimilar. Pero la realizadora ha demostrado en todos estos a?os ser una mujer de contrastes. Alguien que nunca pens¨® en dedicarse al cine y encontr¨® en la pintura su salida art¨ªstica, centr¨¢ndose en el estudio y producci¨®n de piezas conceptuales bajo el ojo cr¨ªtico de Susan Sontag o Richard Serra. ¡°De ah¨ª que mi conocimiento de cine sea limitado¡±, dice, ahora s¨ª que con falsa modestia. Porque Bigelow es una de esas mujeres que parecen haberlo visto todo, aunque no presuma como un Tarantino. Adem¨¢s de reconocer entre sus influencias a cl¨¢sicos como Stanley Kubrick, Akira Kurosawa, Sergio Leone o Alfred Hitch?cock, hablando con ella aflora su deseo por descubrir nuevos talentos en todo lo que comen sus ojos. ¡°Tambi¨¦n me dejaron una profunda huella pel¨ªculas como Apocalypse now! o El cazador¡±, acepta quien utiliz¨® p¨¢ginas del guion de Todos los hombres del presidente en sus pruebas de casting para encontrar el reparto adecuado. ¡°Lo interesante de esas pel¨ªculas, de los filmes de Vietnam, es que informaron as¨ª de un tema que nunca habr¨ªa tenido la oportunidad de conocer de primera mano. Me iluminaron y me educaron. De ah¨ª que veo clara la responsabilidad social y el compromiso del cine que quiero hacer, ese en el que muestre la realidad del mundo en que vivimos o de estos momentos extraordinarios que nos ha tocado vivir¡±.

Bigelow asegura que no es su tarea juzgar los acontecimientos vividos que inspiran su obra. Su deseo, insiste, es ser honesta con lo que ocurri¨® y socialmente responsable. Razones todas ellas por las que su nueva pel¨ªcula arranca con una pantalla en negro y el documento sonoro de lo que ocurri¨® en las Torres Gemelas el 11 de septiembre de 2001, que a continuaci¨®n contrasta con el trato de abusos y tortura ¨Co ¡°t¨¦cnicas mejoradas de interrogatorio¡±, eufemismo con el que prefiere describir lo que ocurri¨® en Guant¨¢namo¨C a los detenidos. Aqu¨ª Boal lleva la voz cantante al hablar de las diferentes reacciones o la controversia que generar¨¢n estas im¨¢genes ¡°en Estados Unidos o en Espa?a¡±. Como dice, nunca fue su intenci¨®n ni la de Bigelow mostrar la versi¨®n de la Casa Blanca. ¡°Estas instancias son parte de nuestra historia. Y entre los m¨²ltiples m¨¦todos utilizados en la b¨²squeda de Osama bin Laden, este fue uno de ellos¡±.

Bigelow ha sido censurada a menudo por su gusto hacia un mundo de violencia expl¨ªcita. Reconoce que su contacto cercano en sus ¨²ltimas pel¨ªculas con los diferentes operativos, ya sean militares o del servicio secreto, le han dado otra visi¨®n hacia ellos. ¡°He sentido de cerca la psicolog¨ªa, dedicaci¨®n e inteligencia que existe entre estos grupos de fuerzas especiales, con una capacidad de tomar decisiones de vida o muerte en una fracci¨®n de segundo. Me dejaron impresionada¡±.

Sin embargo, si algo sorprende de la operaci¨®n en su nueva pel¨ªcula es lo poco que se ve. Haciendo honor a su t¨ªtulo, la ofensiva est¨¢ filmada en la m¨¢s completa oscuridad, utilizando en las c¨¢maras las mismas gafas nocturnas que utilizaron las fuerzas especiales durante el asalto. ¡°Mark escribi¨® un verdadero testamento de lo que ocurri¨® en esa b¨²squeda, una narrativa que conf¨ªo que el p¨²blico disfrute, adem¨¢s de que conozca as¨ª la historia. Porque todos sabemos el final, pero no lo que pas¨® hasta llegar a ese momento¡±.

Como dice Bigelow, el final de la caza y captura es por todos conocido. Pero quiz¨¢ no as¨ª el final abierto por el que la directora y el guionista optan para la cinta, con una inocente pregunta sin respuesta a la protagonista de esta b¨²squeda. ¡°Y ahora, ?qu¨¦? ?Ad¨®nde vamos?¡±. ¡°Es una pregunta importante. Como pa¨ªs, como cultura, ?ad¨®nde nos dirigimos ahora?¡±, reflexiona una mujer que admite siempre estar dispuesta a mantener el di¨¢logo vivo, a preguntar lo que haga falta desde el podio que representan sus pel¨ªculas. ¡°Tambi¨¦n estoy fascinada por c¨®mo funciona el mundo y sigo siempre a la b¨²squeda de respuestas. Y por supuesto que soy una optimista, adem¨¢s de alguien que vive siempre con esperanza¡±, resume la cineasta, en lo m¨¢s parecido que su cerraz¨®n personal le permite presentar como una declaraci¨®n de principios.