Gates y Slim contra la polio

No hay empresa peque?a ni objetivo menor para los grandes magnates. Los dos hombres m¨¢s ricos del mundo, Carlos Slim (73.000 millones de d¨®lares) y Bill Gates (67.000), se han aliado para erradicar la polio de la faz de la Tierra. Si lo consiguen, ser¨¢ la segunda gran enfermedad, despu¨¦s de la viruela, que la humanidad logra hacer desaparecer. Para ello Bill Gates ha lanzado un plan de seis a?os y 5.500 millones de d¨®lares, de los que 1.800 ir¨¢n a su cargo, y ha convencido al magnate mexicano Carlos Slim para que aporte 100 millones a un proyecto que combina la osad¨ªa y el sentido de la oportunidad con el rigor y la eficiencia en la gesti¨®n.

O ahora o nunca, dijeron en su presentaci¨®n, en Abu Dabi. Gracias a los esfuerzos hechos, la polio ha retrocedido hasta quedar enquistada en solo tres pa¨ªses: Nigeria, Pakist¨¢n y Afganist¨¢n. Nunca hab¨ªa estado tan d¨¦bil y por eso ahora es posible la erradicaci¨®n, pero si no se act¨²a r¨¢pido y con decisi¨®n, podr¨ªa volver a expandirse. El ejemplo de las dos primeras fortunas ha seducido a otros magnates, como el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg.

Pero Bill Gates siempre mira m¨¢s all¨¢. El esp¨ªritu innovador que le llev¨® a crear Microsoft impregna ahora los postulados filos¨®ficos de la Fundaci¨®n Melinda y Bill Gates. En su conferencia anual celebrada en Seattle, abander¨® la idea de la disrupci¨®n positiva para el cambio global, un concepto que propugna ¡°desafiar¡± las estructuras tradicionales para lograr cambios que permitan transformar el mundo. Ejemplo de estructura tradicional en la lucha contra el sida ser¨ªa la Iglesia cat¨®lica cuando se opone al uso del preservativo. Y ejemplo de disrupci¨®n positiva ser¨ªa, en un pa¨ªs islamista, garantizar que las ni?as contin¨²en en la escuela. La filantrop¨ªa no puede quedarse en las buenas obras. Ha de servir para cambiar el mundo, sostiene.

La forma de ayudar no es neutra. Hace unos d¨ªas, otro magnate que dedica gran cantidad de dinero a filantrop¨ªa, George Soros, fue preguntado en Barcelona qu¨¦ opinaba de los para¨ªsos fiscales. Y vino a responder que los utiliza porque le permiten ganar m¨¢s dinero, y poder luego invertir en sus Open Society. Aunque el fin sea loable, la forma de conseguirlo no parece muy disruptiva.