Ciudadan¨ªa asim¨¦trica
Preocupa el distinto d¨¦ficit auton¨®mico, pero tambi¨¦n los ingresos son dispares
Est¨¢ visto que ser ciudadano espa?ol tiene prerrogativas y derechos diferentes, seg¨²n el territorio en el que vives. Lo preferible es ser vasco o navarro. Despu¨¦s te va mucho mejor si eres c¨¢ntabro, riojano o extreme?o. Has ca¨ªdo en desgracia ¡ªsin embargo¡ª si vives en el arco mediterr¨¢neo.
Si est¨¢s entre los primeros, el Estado te proporciona m¨¢s recursos para que tu comunidad aut¨®noma te ofrezca servicios p¨²blicos esenciales: sanidad, educaci¨®n y prestaciones sociales, y m¨¢s oportunidades de desarrollo: infraestructuras, pol¨ªtica industrial y tecnol¨®gica, promoci¨®n econ¨®mica, etc¨¦tera. Si perteneces a los segundos, parece que te habr¨¢s de buscar la vida pag¨¢ndote la provisi¨®n de servicios complementarios privados y si no puedes ¡ªporque tu renta per capita est¨¢ por debajo de la media¡ª res¨ªgnate a ser espa?olito de segunda.
Tenemos bastantes presidentes auton¨®micos escandalizados con esto del d¨¦ficit asim¨¦trico. Est¨¢n muy alterados con lo marginal y tan panchos con lo principal. No les escandaliza lo m¨¢s m¨ªnimo la injustificable asimetr¨ªa de los ingresos por habitante entre comunidades aut¨®nomas.
Hasta donde yo s¨¦, el d¨¦ficit es la diferencia entre ingresos y gastos. Puede alardear de eficiencia y sacrificios comparativos la Administraci¨®n que, teniendo los mismos ingresos, gasta menos que otra. Pero es dif¨ªcil digerir que presidentes de comunidades aut¨®nomas (Pa¨ªs Vasco, Navarra, Cantabria, La Rioja, Extremadura, Asturias,¡), que disponen de unos ingresos por habitante superiores en m¨¢s de 600 euros a los de la Comunidad Valenciana y que adem¨¢s incurren en d¨¦ficits de m¨¢s de 200 euros por habitante, acusen de manirrotos a los del furg¨®n de cola, que aun gastando menos que ellas se ven incurriendo en d¨¦ficits que, de tener esos 600 euros de m¨¢s en ingresos por habitante ser¨ªan inexistentes.
?Por qu¨¦ las regiones bien financiadas deben tener el mismo desequilibrio que las mal financiadas?
La Generalitat Valenciana gasta un 9,8% menos en servicios sanitarios, educativos y prestaciones sociales que la media de las comunidades aut¨®nomas y un 38% menos en el resto de pol¨ªticas de gasto: infraestructuras, impulso econ¨®mico, cultura, vivienda, etc¨¦tera. Fue la segunda comunidad que menos gast¨® por habitante de todas en 2012, y ¡ªsin embargo¡ª tiene un d¨¦ficit estratosf¨¦rico ?Por qu¨¦ ser¨¢? ?Quiz¨¢s porque tiene una financiaci¨®n por habitante muy inferior a la media? ?Quiz¨¢s porque esa infrafinanciaci¨®n estructural, arrastrada desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas, le ha llevado a acumular un endeudamiento desde hace 20 a?os para intentar proveer paulatinamente a sus ciudadanos de servicios educativos y sanitarios similares ¡ªaunque todav¨ªa inferiores¡ª a los de otros espa?oles?
Si durante la ¨²ltima d¨¦cada los extreme?os hubieran recibido la media de la financiaci¨®n por habitante del sistema de financiaci¨®n auton¨®mica, hubieran recibido 3.500 millones de euros menos, un 21% de su PIB. Mientras esta y otras regiones (Cantabria un 24,8%, Arag¨®n un 9,4%, Castilla y Le¨®n un 12,3%, Galicia un 9,9%) han recibido este ¡°extra¡± para financiar sus competencias auton¨®micas, otras como la valenciana han recibido en ese mismo periodo 11.000 millones de euros menos, un 11% de su PIB, que si su financiaci¨®n hubiera sido igual a la media. ?Carecen todos estos datos de relevancia cuando se trata de dise?ar una pol¨ªtica de ajuste del d¨¦ficit?
Parece m¨¢s justificado plantear la contraria ?Por qu¨¦ raz¨®n las regiones bien financiadas deben de tener el mismo d¨¦ficit que las mal financiadas? Si alguna de estas siete regiones tan molestas con el d¨¦ficit asim¨¦trico (Pa¨ªs Vasco, Navarra, Cantabria, Extremadura, Asturias, Castilla y Le¨®n y Galicia) piensa que nuestra situaci¨®n es de privilegio, que no tengan dudas. Los valencianos les cambiamos ¡ªa ciegas¡ª nuestra financiaci¨®n por habitante por la suya, les autorizamos nuestro d¨¦ficit por habitante sin rechistar y ¡ªacostumbrados como estamos a gastar menos que ellos¡ª nos comprometemos a tener menos d¨¦ficit que el suyo este mismo a?o.
Estos que se ahuecan la voz con lo de ¡°los espa?oles deben tener derecho al mismo d¨¦ficit en cualquier territorio¡±, tienen un curioso concepto de espa?olidad. Resulta alarmante que no consideren la igualdad de los derechos de ciudadan¨ªa, en t¨¦rminos de ¡°los espa?oles deben tener derecho al acceso al mismo nivel de servicios p¨²blicos esenciales en cualquier territorio¡± y ¡ªen consecuencia¡ª los mismos recursos por habitante para prestar los servicios p¨²blicos esenciales. ?Responden los ingresos auton¨®micos a este principio? Rotundamente no y esta asimetr¨ªa s¨ª que es urgente, muy urgente, corregirla. La actual financiaci¨®n auton¨®mica tiene resultados injustos, err¨¢ticos y representa un peligro cierto para la cohesi¨®n de Espa?a. Por ejemplo, de no existir la ¡°anomal¨ªa de la financiaci¨®n foral¡±, Catalu?a no estar¨ªa en la din¨¢mica que est¨¢.
Asombrosamente, casi nadie cuestiona el desempe?o de la Administraci¨®n central, que sigue reteniendo muchos recursos en competencias ya completamente transferidas y que ha protagonizado una gesti¨®n muy deficiente (la peor de la UE) de los ingresos tributarios durante la crisis. Alguien tendr¨¢ que explicar alg¨²n d¨ªa por qu¨¦ las comunidades aut¨®nomas son las paganas de esa gesti¨®n de la Administraci¨®n central de los ingresos tributarios, que ha sido ¡ªy sigue siendo¡ª responsable de una gran parte de su d¨¦ficit. Porque, repito, el d¨¦ficit es la diferencia entre ingresos y gastos.
Jos¨¦ Antonio P¨¦rez Garc¨ªa es economista y fue director general de Presupuestos de la Generalitat Valenciana de 1987 a 1995.
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