El c¨®digo de Hammurabi
El pasado d¨ªa 23, al informar del atentado de Londres, pon¨ªan ustedes en la primera p¨¢gina de su diario, bajo la foto de uno de los asesinos, el texto entrecomillado: ¡°Este soldado es un ojo por un ojo¡±. Nunca hab¨ªa visto que ante un acto similar, con implicaciones pol¨ªticas o no, un diario diese la palabra a alguien que le acaba de quitar la vida a un semejante. A?adamos a este titular (que entiendo que podr¨ªa entrar perfectamente en la figura de ¡°apolog¨ªa del terrorismo¡± si lo hubi¨¦semos visto en peri¨®dicos de aqu¨ª al informar de alguno de los muchos actos terroristas que, por desgracia, hemos padecido), el significado de ese texto que impacta directamente contra los fundamentos de nuestra sociedad, que ha desterrado hace tiempo la pena de muerte y que considera solo de inter¨¦s para la paleohistoria el c¨®digo de Hammurabi.
Entiendo que con esa portada han cruzado ustedes muchas l¨ªneas rojas.¡ª Daniel Santos Serrano.
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