Una banda
El tribunal Supremo salvadore?o le ha denegado a Beatriz la posibilidad de abortar, una resoluci¨®n indecente
No soy creyente, pero pienso que la espiritualidad no es una prerrogativa de las religiones, sino una cualidad esencial del ser humano. Respeto las creencias religiosas en tanto en cuanto no me sean impuestas ni impongan a otros abusos aberrantes (como la lapidaci¨®n de la shar¨ªa).Conozco a cat¨®licos maravillosos, a curas y monjas heroicos que se dejan la piel trabajando en lugares terribles y que mejoran el mundo calladamente. Siento mucha menos simpat¨ªa por la jerarqu¨ªa cat¨®lica, que ejerce un poder que a menudo me parece retr¨®grado y abusivo. Aun as¨ª, casi siempre procuro hacer un esfuerzo de moderaci¨®n y convivencia porque no quiero herir a los cat¨®licos decentes, que son muchos.
Pero hoy quiero hablar del caso de Beatriz, la salvadore?a de 22 a?os que, embarazada y muy enferma (lupus eritematoso discoide, eclampsia e insuficiencia renal grave), puede morir si no interrumpe la gestaci¨®n cuanto antes: cada d¨ªa que pasa su estado empeora. Ya se sabe que el Tribunal Constitucional salvadore?o le ha denegado la posibilidad de abortar, una resoluci¨®n doblemente indecente cuando sabemos que al feto le falta medio cerebro y es inviable. Pero dentro de este cruel relato de horrores hay algo que me parece todav¨ªa peor que esos cuatro jueces demenciales, y es que la Conferencia Episcopal de El Salvador se ha felicitado por el fallo y ha mantenido todo el tiempo una radical oposici¨®n a la operaci¨®n que salvar¨ªa la vida de Beatriz. Y digo que esta actitud es peor porque los obispos no han sido desautorizados por el Vaticano; porque la Iglesia cat¨®lica es una instituci¨®n poderosa y enorme y no un pu?adito de magistrados ultras; porque ese fanatismo feroz que salva un feto sin cerebro y mata a la madre es la ant¨ªtesis del humanismo cristiano; porque esto te obliga a suponer, para desolaci¨®n de todos, que la Iglesia cat¨®lica es una banda de criminales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.