La crispaci¨®n mata

Hac¨ªa pocas semanas que el joven Cl¨¦ment M¨¦ric, de 18 a?os, sindicalista y estudiante de primer curso de Ciencias Pol¨ªticas, se hab¨ªa manifestado en Par¨ªs con una pancarta que rezaba ¡°La homofobia mata¡±. Trataba de alertar de esa forma sobre los peligros de la dura campa?a emprendida por la extrema derecha francesa, con la ayuda de la Iglesia cat¨®lica, contra la ley que reconoce el matrimonio entre personas del mismo sexo. Le acababan de dar una brutal paliza a un joven homosexual y se hab¨ªan producido innumerables actos de violencia contra locales y sedes del movimiento gay.

Ten¨ªa raz¨®n el joven M¨¦ric y ¨¦l mismo acab¨® siendo v¨ªctima de esa violencia cuando ¨¦l y unos amigos que iban de compras se toparon con un grupo de skinheads. Despu¨¦s de intercambiar improperios, el joven fue golpeado con un pu?o americano por uno de los rapados, un joven de origen espa?ol nacionalizado franc¨¦s. La agresi¨®n le caus¨® la muerte instant¨¢nea. El suceso, por el que hay siete detenidos, ha conmocionado a la sociedad francesa, cada vez m¨¢s asustada por el aumento de la crispaci¨®n, que ahora se ha cebado en la ley del matrimonio homosexual pero que puede adoptar muchas otras formas.

La emergencia de grupos neonazis que predican y practican la violencia, como la que empa?¨® la celebraci¨®n de la victoria del Par¨ªs Saint Germain en la Liga de f¨²tbol francesa, es un s¨ªntoma de la alarmante radicalizaci¨®n de ciertos segmentos de la extrema derecha. Aunque la l¨ªder del Frente Nacional, Marine Le Pen, ha dicho que los asesinos de M¨¦ric no tienen nada que ver con su formaci¨®n y que esta expulsa a los violentos, lo cierto es que muchos cabezas rapadas acuden a sus m¨ªtines, y que el discurso que practica alimenta las actitudes intransigentes.

El sistema electoral franc¨¦s, de corte mayoritario, enmascara en gran parte el crecimiento sociol¨®gico de la extrema derecha, que se est¨¢ haciendo fuerte en barriadas perif¨¦ricas de las grandes ciudades, antes feudo de la izquierda. La inseguridad provocada por la recesi¨®n econ¨®mica se est¨¢ convirtiendo en un excelente caldo de cultivo para ese crecimiento, que a su vez alimenta la emergencia de grupos neonazis muy peligrosos como la Juventud Nacionalista Revolucionaria.