Defensa de la m¨²sica
Me encantar¨ªa hacer una lectura positiva y optimista con respecto a la nueva ley de la educaci¨®n, que se va a imponer en un pa¨ªs en el que cada Gobierno quiere dejar grabado su paso grabando con fuego, cual letra escarlata, su punto de vista con respecto a la educaci¨®n p¨²blica de nuestros hijos. Me agradar¨ªa decir que es una ley con unas argumentaciones pedag¨®gicas sumamente interesantes y unos valores tan altos que suplen los errores anteriores, con ideas brillantes, pero no puedo hacerlo. Siendo sincero he de decir que me aburren soberanamente este tipo de documentos tan mal redactados y prefiero disfrutar de un buen libro o de la realidad del aula, pero por lo que he le¨ªdo, la parte en la que aparece, como por casualidad, mi asignatura, la M¨²sica, no me ha sorprendido que pasemos a ser una optativa entre las optativas, o una simple casualidad en el curr¨ªculo y tampoco me extra?ar¨ªa que poco a poco nos fueran eliminando, pues la cultura del pueblo no entra entre las prioridades de nuestros apreciados pol¨ªticos. Desconozco su biograf¨ªa ¡ªy pretendo seguir haci¨¦ndolo¡ª, pero llego a la conclusi¨®n de que quiz¨¢ este caballero que dirige los designios de nuestra educaci¨®n no cant¨® en el coro de su colegio, no bail¨® en las fiestas de su pueblo o simplemente no haya experimentado el placer que la m¨²sica puede ofrecer en una escucha activa. El trabajo en equipo, el respeto, la solidaridad, la inspiraci¨®n, la cultura musical, aprender a actuar ante un auditorio y, por tanto, a expresarse en p¨²blico, emocionar, emocionarse, disfrutar, aparte de los ya constatados beneficios que tiene la m¨²sica en el cerebro, no parecen suficientes motivos para que nuestros insignes creadores de leyes tengan en cuenta que es una asignatura imprescindible en la mayor parte de los pa¨ªses de los que ellos dicen inspirarse. Beethoven dijo: ¡°Nunca rompas el silencio, si no es para mejorarlo¡±. Ya s¨¦ que fue simplemente un cascarrabias, un loco y un mis¨¢ntropo, pero a lo mejor nos ir¨ªa mucho mejor a todos si lo escuch¨¢ramos m¨¢s a menudo.¡ª Pedro Jos¨¦ Ba?os M¨¢rquez.
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