Las recientes movilizaciones que se extendieron por todo Brasil fueron, sin lugar a dudas, inesperadas. Su origen y sus consecuencias escapan a cualquier an¨¢lisis simplista y precipitado. Nadie, tampoco el gobierno de Dilma Rousseff, imaginaba que se estaba gestando tan alto grado de descontento social y que la manifestaciones callejeras ser¨ªan el medio identificado por j¨®venes y no tan j¨®venes para expresarlo. Un descontento que se produce tras una d¨¦cada de conquistas democr¨¢ticas profundas, caracterizadas por una significativa ampliaci¨®n de los derechos y las oportunidades sociales, especialmente promovidos entre los sectores m¨¢s pobres.
Puede parecer parad¨®jico, pero no lo es.
Brasil es un pa¨ªs marcado por la desigualdad. Y, aunque las cosas hayan comenzado a cambiar significativamente, suponer que la gente deber¨ªa salir a la calle para agradecer una d¨¦cada de progreso, de consolidaci¨®n de los derechos ciudadanos y de promoci¨®n de la justicia social, no pasa de una pretensi¨®n c¨¢ndida y petulante. Tambi¨¦n lo es la ingenua presunci¨®n de que el importante apoyo electoral que ha tenido (y quiz¨¢s seguir¨¢ teniendo) el Partido de los Trabajadores, le brindar¨¢ una inmunidad eterna a la protesta y a la movilizaci¨®n callejeras.
Cuando los derechos se ampl¨ªan, la gente quiere m¨¢s. Se trata de una gran conquista democr¨¢tica: la consolidaci¨®n de una cultura pol¨ªtica que reconoce que los derechos no son algo que nos regalan o conceden los poderosos, sino algo que nos pertenece y que nadie nos debe negar.
Las multitudinarias manifestaciones no reclamaron s¨®lo un indebido aumento de 20 centavos en el transporte p¨²blico. Expresaron su cr¨ªtica vehemente a las p¨¦simas condiciones de movilidad en una ciudad como San Pablo, donde la gente pobre gasta en promedio 3 horas por d¨ªa para ir y venir de sus empleos, y lo hace, adem¨¢s, apretujada, maltratada, humillada. Un transporte caro y malo, donde el gigantesco lucro empresarial convive con la tolerancia de gobiernos indiferentes y corruptos.
¡°Pero eso pasa y ha pasado siempre¡±, podr¨ªa afirmarse con raz¨®n. S¨ª, pero no pod¨ªa seguir pasando en una ciudad en la que la izquierda hab¨ªa recuperado el gobierno seis meses atr¨¢s.
Las movilizaciones brasile?as son por m¨¢s democracia, m¨¢s derechos; por mejores condiciones de vida, de educaci¨®n, m¨¢s y mejores hospitales, transporte p¨²blico digno (y gratuito), contra la corrupci¨®n, contra la violencia (particularmente, contra la violencia policial), por el respeto a la diversidad sexual, contra el uso ostensivo de recursos p¨²blicos en una Copa del Mundo cuyos beneficios no parecen demasiado visibles para el conjunto de la poblaci¨®n. Algunos salen con una bandera, enarbolandos en una ¨²nica reivindicaci¨®n. Otros salen con muchas, defendiendo todas. No est¨¢n organizados bajo los modelos tradicionales de los partidos o de los movimientos sociales. Pero ganan una enorme capilaridad y exhiben una extraordinaria capacidad de respuesta. Est¨¢n, simplemente, comunicados entre s¨ª, sintonizados, act¨²an en red; una red , m¨¢s que nunca, de car¨¢cter social. Piden, reivindican, gritan, exigen lo com¨²n, lo p¨²blico, lo que es mejor para todos. En suma, sabi¨¦ndolo o no, hacen pol¨ªtica. Y buena pol¨ªtica: pol¨ªtica democr¨¢tica.
?Hacia d¨®nde se dirigen? Dif¨ªcil es saberlo con precisi¨®n. Podemos tratar de entender qu¨¦ es lo que piden, sin dejar de analizar qu¨¦ es lo que ha pasado.
¡°La democracia ¨C ha dicho el ex presidente Lula pocas horas despu¨¦s de la primera gran movilizaci¨®n ¨C no es un pacto de silencio, es la sociedad en busca de nuevas conquistas¡±. La frase despert¨® del letargo a muchos militantes y dirigentes de izquierda que no consegu¨ªan entender c¨®mo la sociedad estaba en las calles y ellos siquiera se hab¨ªan enterado del motivo. Tambi¨¦n, sacudi¨® al gobierno nacional de la hipnosis en la que parec¨ªa haberlo sometido el rugido callejero.
Las movilizaciones de los ¨²ltimos d¨ªas constituyen un hito en la lucha por un Brasil m¨¢s inclusivo, m¨¢s justo y democr¨¢tico.
La izquierda brasile?a le debe a las movilizaciones populares sus mejores victorias. Es tiempo de actuar en consecuencia, reflexionando y escuchando las demandas sociales. Abriendo y multiplicando los espacios de participaci¨®n y deliberaci¨®n sobre el sentido y orientaci¨®n de las pol¨ªticas p¨²blicas. La izquierda ha llegado a gobernar buena parte del pa¨ªs porque promovi¨®, de manera creativa y progresista, estas nuevas modalidades de participaci¨®n y gesti¨®n en la esfera estatal. Reformar el Estado y hacerlo de manera democr¨¢tica, contin¨²a siendo un desaf¨ªo que no puede ser postergado por argumentos tecnocr¨¢ticos o precarios compromisos con la gobernabilidad.
Miles de j¨®venes han comenzado a hacer pol¨ªtica durante los ¨²ltimos d¨ªas. Sus banderas son las que hist¨®ricamente carg¨® la izquierda. Sus banderas son las que enarbolaron los que lucharon contra los gobiernos neoliberales y conservadores que gobernaron este pa¨ªs y a¨²n gobiernan algunas de sus principales ciudades y estados. Marchemos a su lado, sin pretender quitarles la palabra ni traducir sus consignas, aprendiendo con ellos a escribir un nuevo futuro, una nueva historia.
(Desde R¨ªo de Janeiro)
Comentarios
Gracias Pablo, coincido plenamente con vos, y agregar¨ªa como dijo un cient¨ªfico social ...que por todo esto, lo que ocurre en Brasil "no tiene nada que ver con los cacerolazos de Santa Fe y Callao en Argentina". A continuaci¨®n una reflexi¨®n personal mas para el debate:Algunas reflexiones personales y en ¡°bruto¡±, sobre el movimiento callejero en Brasil:En relaci¨®n al despertar de Brasil, no s¨¦ qu¨¦ decirles que otros no hayan dicho. Pero no veo esa confabulaci¨®n de la que algunos hablan, por detr¨¢s de un fen¨®meno de redes que comienza a superarnos a los menos j¨®venes.Son los j¨®venes que descubrieron que es m¨¢s divertido estar cuerpo a cuerpo gritando, que gritando en silencio desde sus computadoras. Y descubrieron que tienen poder.No son los mismos actores de los cacerolazos en Argentina. Son j¨®venes de clase media, clase media baja, la nueva clase media brasile?a, los ex pobres de los famosos 40 millones que Lula y Dilma rescataron de la miseria. Pero que viven en un modelo que los ha rescatado de la pobreza con par¨¢metros de acceso al consumo como tener computadoras, Iphone, microondas y ¡°geladeira¡± con freezer, a cr¨¦dito.El cr¨¦dito y la estabilidad econ¨®mica que les dio el cr¨¦dito, les ha dado ¡°cosas¡± tangibles. Pero ahora - muchos ya en la universidad porque Lula y Dilma les dieron la posibilidad de entrar a la universidad y est¨¢n m¨¢s conscientes de sus l¨ªmites- ahora quieren m¨¢s. Quieren mejor educaci¨®n y salud, quieren un transporte p¨²blico digno y barato. Quieren una casa porque no tienen dinero para pagar alquileres inaccesibles. Quieren - no m¨¢s liberalismo -sino un Estado m¨¢s presente y fuerte. Quieren que se amplie el modelo de inclusi¨®n social que los ampar¨® y que ahora ya no alcanza.Y no quieren m¨¢s una polic¨ªa que los reprima. La represi¨®n policial - que fue y sigue siendo arbitraria y escandalosa en muchos casos- los hizo multiplicar. Eran 100 mil, en una semana pasaron a 300 mil, y ahora son m¨¢s de dos millones en las calles. Sin contar los que todav¨ªa en sus casas los apoyan pero todav¨ªa no se animan a salir. Se cansaron.Creo que el movimiento surgi¨® de manera aut¨¦ntica. Que no fue manipulado. Que no tuvo hilos de t¨ªteres por detr¨¢s.Pero tambi¨¦n creo que los grandes medios que quisieron ignorarlos al principio, ahora intentan utilizarlos, y con ellos la oposici¨®n. Y que hay grup¨²sculos infiltrados que intentan aprovecharse de la situaci¨®n. Desde milicias (paramilitares con poder econ¨®mico en las favelas y barrios de clase media baja a quien se les est¨¢ quitando negocios y poder como el transporte de vans o de cable pirata y gas en garrafa). Y hasta se aprovechan de la situaci¨®n algunos minoritar¨ªsimos grup¨²sculos neo nazis. Y es verdad que a r¨ªo revuelto los saqueos se facilitan. Y ahora hay un poco de todo esto tambi¨¦n mezclado.Pero el movimiento ha demostrado fuerza y - lo que es positivo - el gobierno los ha escuchado, interpretado. Es lo que necesitaba el PT para volver a sus or¨ªgenes. Un partido que levantaba estas banderas en el pasado, y que la necesidad de ¡°gobernar¡± un pa¨ªs tan complejo y diverso, les arrebat¨®.Sobre esto hay una gran discusi¨®n al interior de la izquierda del PT y de los movimientos sociales y sindicales ¨C hist¨®ricos aliados del PT desde sus or¨ªgenes. La Reforma Agraria, por ejemplo, ha tenido algunos resultados gracias a Movimiento de los Sin Tierra presionando incansablemente con ocupaciones de tierras improductivas. Tambi¨¦n los ind¨ªgenas y pastorales ind¨ªgenas presionando por la demarcaci¨®n de tierras. Y tal vez estos nuevos movimientos callejeros que ejercen de presi¨®n de manera tan amorfa por ahora, consigan que el PT retome su cauce y pase por encima de alianzas con algunos sectores tradicionalmente conservadores, evang¨¦licos ¨C iglesias neopentecostales ¨C conservadores y hasta golpistas hist¨®ricos (otra cosa que tampoco le perdonan las calles al gobierno de Dilma y de los estados y municipios, no siempre del PT sino de sus opositores)En momentos en que el gobierno se tentaba con las pol¨ªticas de ajuste que tanto criticaba, esto es positivo porque ahora tienen el apoyo de la calle para fortalecerse y volver atr¨¢s. La historia dir¨¢ si son capaces de hacerlo o de ser tragados por una vor¨¢gine que grita ¡°!partidos pol¨ªticos no!¡±. El que ¡°se vayan todos¡± argentino e italiano. Y despu¨¦s un abismo incompresible.Sufro de v¨¦rtigo. Y este tambi¨¦n me lo produce.Fabiana Frayssinet
Escrevo do Rio de Janeiro, e gostaria de esclarecer que n?o ¨¦ a nova classe m¨¦dia, a classe C, que est¨¢ nas ruas protestando. Segundo pesquisas realizadas recentemente, a maior porcentagem de participantes pertence ¨¤s classes A e B. A classe C ¨¦ minorit¨¢ria, contribuindo com jovens que redescobriram as ruas. Das classes A e B comparecem os jovens que s¨® agora sairam do computador e descobriram as ruas e muitos adultos. N?o podemos esquecer da participa??o de criminosos profissionais que est?o sendo pagos (dizem que a 100 reais por dia) para promoverem a destrui??o de patrim?nio p¨²blico e particular. Outro participante importante ¨¦ a m¨ªdia tradicional, em especial a TV Globo, n?o s¨® incitando as pessoas a irem ¨¤s ruas, como fornecendo-lhes as pautas. Conclus?o, passado o primeiro momento, em que a reivindica??o aut¨ºntica e espont?nea dos manifestantes era sobre mobilidade urbana e o aumento das passagens, depois tornou-se uma massa pautada pela m¨ªdia, como "contra a PEC 37", sem saberem do que se tratava, ou de discursos gen¨¦ricos e vazios, como "contra corrup??o", como se algu¨¦m fosse escrever um cartaz a favor.
Hola Pablo! "promovida pelos sectores m¨¢s pobres"?! Promovida pela clase media (el sector de clase media que trabaja en favor de los m¨¢s pobres) y, una vez en las calles, toda la clase media. De ah¨ª las contradicciones y consignas de lo m¨¢s disparatadas cuando se perdi¨® el foco en los 20 centavos. Por suerte el MPL / SP que inici¨® la protesta consigui¨® no ser devorado por muchos vivillos (a derecha Y IZQUIERDA) que quisieron roba la pelota en la cancha embarrada. La carta a la presidenta Dilma de hoy (24/06/13) espero se transforme en bibliografia obligatoria en aulas y concursos docentes. Abrazo desde Salvador, BA.
Para complementar el debate sobre clase media abierto por las declaraciones recientes de Marilena Chau¨ª.
Estimada Clara, muchas gracias por tus comentarios. No creo, sin embargo, que hayas hecho una lectura atenta del texto. No he dicho que las manifestaciones "fueron promovidos por los sectores m?s pobres de la sociedad brasile?a", sino que los derechos y oportunidades creadas en la ¨²ltima d¨¦cada los han beneficiado a ellos. Por otro lado, descalificar (o sobrecalificar) las movilizaciones porque han tenido origen en sectores de la clase media no agrega mucho al debate. Un abrazo.
Comparto el an¨¢lisis de Pablo y las conclusiones. Solo a?adir¨ªa que la imagen de pancartas abigarradas se parece a las del 15M en Espa?a o en cualquier otro pa¨ªs a cuyas ciudades salt¨® la chispa del 15M. En Brasil los ciudadanos piden m¨¢s equidad y m¨¢s democracia y aqu¨ª nos oponemos a las pol¨ªticas neoliberales que destruyen las conquistas de varias d¨¦cadas.
Siento que el pa¨ªs ha dado un gran paso, primero con manifestaciones leg¨ªtimas, una clara demostraci¨®n de sensatez, el pueblo por fin ha despertado de la "MATRIX" (el mundo fantas¨ªa), empieza entender que ser desarrollado no implica simplemente el hecho de poder comprar bienes (Ipad, teles, consolas, coches, etc.) un pa¨ªs desarrollado necesita servicios p¨²blicos de calidad, infraestructura, seguridad, sistema sanitario...El gobierno tambi¨¦n ha tomado una decisi¨®n muy acertada, se nota que Brasil es un pa¨ªs maduro y soberano que no depende de ¨®rganos supraestatales que definan su pol¨ªtica interior, se trata de una verdadera lecci¨®n de DEMOCRACIA. Desde los movimientos sociales hasta del feedback dado por el gobierno en respuesta a las demandas sociales.
Bla,bla,bla.Hay ahora mas pobres que hace 20 a?o en numeros absolutos.La impunidad sigue y seguira suelta,Los ultimos a?os se ha vivido de la subida de los precios de las materias primas.La corrupcion es mayuscula.Brsi gradua la mitad de los ingenieros que Mexico.Eso si abogados,sociologos,antropologos,cientistas politicos,politicologos,periodistas ,es decir gente que no produce nada hay a los montones
Las marchas han sido contaminadas por fracciones de clase media radicales fascistas con pancartas y gritos SIN PARTIDOS POLITICOS, SIN PARTIDOS!! solo gobiernos dictatoriales funcionan Sin Partidos. Otros marchistas son aquellos/as que hacen por "modita" los papelitos en blanco, se pintan las caritas y van con carteles "AFUERA DILLMA" que la TV Globo se los pens¨®, Hay los otros excluidos por los altos costos de las entradas a la Copa de Futbol 60 $us y 80 $us y en entrdas para semifinales VIP (Very Important Prostitute)8,500 $us o semifinal y final 18,500 $us, salen con pancartas "QUEREMOS HOSPITALES CON EL PADRON FIFA", lo que al incio fue una prostesta por 0,20 centavos en el aumento del pasaje de transporte publico, nadie sabe en que acabar¨¢, no hay una DEMANDA grande, todas son generalidades.
Hay gobierno democr¨¢ticos que tambi¨¦n funcionan como si no existieran partidos, que es cuando coluden sus intereses... ?Qu¨¦ importa si se grad¨²an m¨¢s profesionales en ciencias sociales que ingenieros? ?Qu¨¦ importa si se grad¨²an menos ingenieros que en M¨¦xico? En perspectiva, no hay pa¨ªs de Am¨¦rica Latina que no haya pasado por el modelo de sustituci¨®n de importaciones (de industrializaci¨®n donde la participaci¨®n m¨¢s activa en la econom¨ªa era la del Estado, quien vend¨ªa a precios al costo) a una de liberalizaci¨®n de la econom¨ªa (rompiendo esa gran estructura econ¨®mica y obligando al Estado a firmar cheques en blanco por d¨¦ficits fiscales)... Ni qu¨¦ decir de la fuga de cerebros... Brasil ser¨¢ uno de los pa¨ªses m¨¢s industrializados de Am¨¦rica Latina, pero las industrias ocupan poca mano de obra calificada (ahora sobre-calificada) y una gran e intensiva mano de obra no calificada, para poner en movimiento la maquinita de hacer dinero. En concreto, Brasil no deja de ser un pa¨ªs capitalista s¨®lo porque tenga al frente a un gobierno de izquierda heredada.Lo interesante de por qu¨¦ se vuelve la mirada hacia Brasil, es por las pretendidas causas del descontento, que ha hecho estallar lo que ahora se conoce... Pero eso s¨ª, hay que intentar reconocer o anticiparse a los l¨ªmites mismos del movimiento... Lo peor que puede suceder, es que se repita la historia de Chile en el siglo pasado... Solamente esperemos que el pa¨ªs no d¨¦ un paso hacia adelante para retroceder dos luego...
La movilizacion en Brasil nos toma por sorpresa a todos, pero una buena sorpresa, por que como bien dice el articulo de Pablo, "cuando los derechos se amplian, la gente quiere mas..."en este sentido, los gobiernos de cambio en la region deben estar atentos y no dormirse, en continuar el camino de cambios que favorezcan a la sociedad democratica. Son movilizaciones ejemplarizantes y dan testimonio para otros paises como Colombia, donde seguimos a la espera de grandes avances en materia de reformas democraticas, y seguimos asistiendo impavidos a las logicas excluyentes, corruptas y cooptadas del Estado, los partidos y un movimiento social fragmentado y disminuido por la violencia
Seg¨²n mi parecer, las sombran que parecen aportarnos inseguridades en torno a las propias capacidades de comprender ¡°qu¨¦ es lo que piden¡±, se deben a un problema de localizaci¨®n del tramo preciso, en el complejo proceso de formaci¨®n en el que se encuentra la demanda. Simplemente porque la demanda democr¨¢tica no pod¨ªa comenzar a adquirir una consistencia firme y poderosa hasta que el ejercicio de la democracia no fuera posible y accesible para todos, o al menos para la mayor¨ªa. Ten¨ªa que existir primero un poner en vivencia ciertos derechos, para que luego pudiera construirse un saber sobre las posibilidades y oportunidades de su ejercicio. De la vivencia del ejercicio de derechos viene el poder pensarlos, porque no se puede pensar lo que no se conoce y no se puede presentir lo que no se ha sentido antes alguna vez. Despu¨¦s de la vivencia, los mismos hechos sociales pueden ser recreados a partir de su enunciaci¨®n. Hoy diversos grupos hablan, nombran, dicen. Ejercen el ¡°poder decir¡± qu¨¦ es lo que no quieren, porque tambi¨¦n ejercen un ¡°poder saber¡± qu¨¦ es lo que necesitan, lo que les pertenece y lo que desean. Hay una demanda en proceso de formaci¨®n que se constituye a partir de deseos, y no se puede desear lo que no ha podido ser representado.Como dice Ranci¨¨re, ¡°el deseo se alimenta de encuentros¡±, y la experiencia democr¨¢tica de los ¨²ltimos a?os ha funcionado como un verdadero ¡°encuentro¡±, permitiendo recuperar la capacidad humana de simbolizaci¨®n, activar el deseo e impulsar la demanda; en ese orden. Se trata de delicados ejercicios de recuperaci¨®n de ¡°la Palabra¡± que, sin dudas, merecen ser celebrados.
Aqui falo de Panelas-Pernambuco-Brasil, com certeza as manifesta??es que est?o acontecendo no Brasil, s?o de fato democr¨¢ticas. Nossos jovens realmente est?o fazendo pol¨ªtica, est?o exercendo sua cidadania, cobrando os direitos que est?o garantidos constitucionalmente: sa¨²de, educa??o, transporte, etc. ou seja, servi?os p¨²blicos de qualidade. Al¨¦m disso estamos assistindo na m¨ªdia ao longo da h¨ªst¨®ria do nosso pa¨ªs casos de corrup??o de v¨¢rias maneiras. E estes R$ 0,20 centavos nas passagens de ?nibus significaram muito mais do que isso, o significado perpassou o do transporte, mas feriu a dignidade, o direito e o respeito com as condi??es que vivem os que dependem do bem p¨²blico, a¨ª, n?o se enxergou apenas o deslocamento, mas em momento da Copa das Confedera??es da FIFA, tamb¨¦m ficou em evid¨ºncia os gastos enormes para constru??o de est¨¢dios de futebol para a copa. Dessa forma, a popula??o n?o enxergou gastas semelhantes para atender as necessidades b¨¢sicas de uma na??o. Como brasileira, n?o consigo aceitar que as nossas riquezas, nossos impostos, os quais s?o muitos, n?o consigam atender as nossas necessidades b¨¢sicas. Antes me inquietava mais ainda o fato de n¨®s ficarmos calados vendo aquilo como se estivessemos em um palco assistindo a tudo, mas o povo acordou! Viva a democracia!!!
Estoy de acuerdo con usted Pablo. El Brasil esta cambiando, es buena la participaci¨®n de sus jovens, es un tiempo de celebrar la democracia!
politicas sociales son uma cosa y crecimiento econ?mico outra, los q recieben politicas sociales (me refiero a las ayudas financeras) saliron de la mis¨¦ria y ahora son pobres com el m¨ªnimo y no, obvio, entraron en la classe media y aun no hicieron sus protestas... Brasil no tiene burbuja , eso es asnera y exclusividade de Espa?a y EUA
Hay ahora mas pobres que hace 20 a?o en numeros absolutos.La impunidad sigue y seguira suelta,Los ultimos a?os se ha vivido de la subida de los precios de las materias primas.La corrupcion es mayuscula.Brsi gradua la mitad de los ingenieros que Mexico.Eso si abogados,sociologos,antropologos,cientistas politicos,politicologos,periodistas ,es decir gente que no produce nada hay a los montones
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