Mejora estad¨ªstica
A pesar de la moderaci¨®n trimestral de la recesi¨®n, la salida de la crisis ser¨¢ larga y costosa
De nuevo la publicaci¨®n de datos relativamente favorables sobre la econom¨ªa, esta vez del Banco de Espa?a, se saluda con interpretaciones optimistas en exceso y poco matizadas. EL PIB espa?ol se ha contra¨ªdo el 0,1% (apreciaci¨®n que deber¨¢ ser contrastada por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica) durante el segundo trimestre de 2013; y como esa evoluci¨®n es mejor que los abruptos descensos de trimestres anteriores, de ah¨ª se extrae la deducci¨®n de que la recuperaci¨®n est¨¢ a la vuelta de la esquina. Pero no es exactamente as¨ª.
El -0,1% del segundo trimestre equivale a un -1,8% en tasa interanual; una pendiente recesiva de cierta consideraci¨®n sobre todo si se compara con las profec¨ªas de algunos que daban ya por concluida la recesi¨®n en 2013. Pero la realidad solo nos informa de que la econom¨ªa est¨¢ tocando fondo (es decir, llegando al m¨ªnimo del ciclo), que puede estar, seg¨²n versiones, entre el -1,8 y el -2%. A ese m¨ªnimo podr¨ªa haberse llegado ya o, en todo caso, se llegar¨ªa a finales del a?o. Y aqu¨ª termina lo que puede aceptarse sin conjeturas o con inferencia m¨ªnima.
Lo que de ninguna manera puede asegurarse es que despu¨¦s de ese m¨ªnimo la econom¨ªa entre en una fase de recuperaci¨®n paulatina (aumentos crecientes interanuales del PIB durante los pr¨®ximos trimestres). Tan veros¨ªmil o m¨¢s que esa hip¨®tesis es la de que durante varios trimestres la econom¨ªa se arrastre en crecimientos pr¨®ximos a cero y, por tanto, se prolongue la mala situaci¨®n del consumo, la inversi¨®n y el empleo. De forma que el Gobierno podr¨ªa esgrimir una mejora estad¨ªstica (el 0 es mejor que el -0,2% o -0,3%) vac¨ªa de contenido para los ciudadanos.
Editoriales anteriores
Para que todos sepamos a qu¨¦ atenernos con las tasas de crecimiento y las proyecciones es imprescindible que el equipo econ¨®mico se pronuncie p¨²blica y claramente sobre una cuesti¨®n decisiva: ?habr¨¢ un ajuste adicional este a?o para cumplir con el objetivo de d¨¦ficit marcado por la Comisi¨®n Europea? Si no lo hay, ya puede decirse que probablemente el d¨¦ficit se desbordar¨¢ de nuevo en 2013. Si pretende cumplir con el compromiso, los recortes de gasto y subidas de impuestos van a tener consecuencias sobre el crecimiento.
Por el argumento anterior es leg¨ªtimo deducir que el Gobierno ver¨ªa con buenos ojos ahorrarse el objetivo y el compromiso y confiar, una vez m¨¢s, en que o bien el d¨¦ficit y la deuda no se disparen hasta vol¨²menes inasumibles por las autoridades europeas e indisimulables por la contabilidad creativa, o bien en que Bruselas haga de nuevo la vista gorda con las cuentas de 2013. Lo peor es que aunque no se aplique ajuste alguno, no es f¨¢cil que la expectativa de la econom¨ªa remonte el vuelo a finales de este a?o, y cada vez es menos descartable que el crecimiento promedio en 2014 sea pr¨®ximo a cero. Como ya nos advirti¨® el FMI, aunque pocos quieran creerlo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.